La serie de terror ha generado decenas de preguntas entre quienes ya la vieron. La mezcla de elementos fantásticos complica mucho más la trama y el final es muy abierto. Pero no temas, aquí estamos para ayudarte y darte todas las claves si no entendiste la producción de Netflix
Viajes interdimensionales, cultos, rituales con sangre, criaturas alienígenas, cámaras retro y mucho found footage… son tópicos que suelen tratarse en las series y películas de terror. Sin embargo, en «Archive 81» confluyen, lo que deriva en un plato de múltiples sabores que está generando muchas conversaciones en las redes sociales.
Si eres de los que disfrutas de los géneros mixtos; de los guiones que juegan al despiste y si tienes al «Proyecto de la Bruja de Blair» como una gran referencia, probablemente disfrutarás esta serie de Netflix. Sin embargo, es natural que esta mezcla confunda al espectador. Por eso, para aquellos que se quedaron sin respuestas para algunas cuestiones que plantea la creación de Rebecca Sonnenshine, van las siguientes líneas.
Como es regular en este espacio y por respeto al lector, advertimos que vienen spoilers.
Son muchas las preguntas que esta serie nos deja, por eso vamos a responder las que más se han planteado en las redes sociales y las más obvias que deja el guion escrito por nada más y nada menos que siete manos. Empecemos.
Virgil Davenport, personaje que interpreta Martin Donovan, es quien le encarga a Dan Turner (Mamoudou Athie) restaurar unas cintas viejas y es el punto de partida de la trama. Cuando los episodios avanzan, se revela como un titiritero, pero cada vez que el protagonista lo enfrenta, ofrece respuestas lógicas a lo que está sucediendo. Obvio que juega al despiste y llegamos al último capítulo con la duda de qué es exactamente lo que desea.
Davenport es quien nos explica lo que ya es evidente en el episodio final: hay dos facciones, los que luchan para que Kaelego siga encerrado en El Otro Mundo y los que desean sacarlo. Pero no se incluye en ninguno de los dos, si bien le advierte a Dan que no debería intentar rescatar a Melody (Dina Shihabi) porque no sabe cómo funciona la lógica entre el espacio y el tiempo.
Hay una frase que pronuncia Davenport que podría dar una luz: «Lo siento Dan, en serio me caías bien». Lo dice cuando saca una pistola, solo porque su antagonista ha empleado la violencia. Entonces, en principio, no desea hacerle daño y tampoco parece inclinado a retomar lo que inició su hermano Samuel (Evan Jonigkeit), el culto a Kaelego. ¿Esto dónde nos deja?
“Creo que es algo que podrías esperar en una segunda temporada”, dijo la showrunner, Sonnenshine, en conversación con los medios estadounidenses una vez que finalizó la serie. «Eso fue algo en lo que simplemente no tuvimos tiempo de entrar, aunque habíamos trazado todas sus motivaciones. Creo que para nosotros todo volverá a un lugar emocional, pero eso definitivamente está sobre la mesa para la exploración y la historia adicional en una temporada 2, en caso de que suceda”.
LMG es la compañía de Virgil Davenport. Es obvio que abrió una empresa que trabajaba con ADN para hacer un perfil de identidad de mujeres hechiceras que le permitieran llegar hasta su hermano, Samuel.
Pero gracias a las investigaciones del mejor amigo de Dan, Mark, sabemos que hay más compañías ficticias. Esto podría significar que Davenport tiene otros intereses más allá de encontrar al pariente y tiene que ver con aprovechar ese poder de moverse entre dimensiones y el tiempo.
«Diré esto sobre Virgil y Samuel», explicó la showrunner a EW: «Revelamos que son hermanos y luego que están tratando de hacer lo mismo. Pero creo que, mientras que Samuel era un creyente en gran medida y tenía una gran fe en lo que estaba haciendo, Virgil es un científico, es un hombre de negocios y no comparte ese espacio. Así que no es vocacional, es simplemente otra cosa».
Y remata: «Hay una razón muy profunda por la que Virgil está haciendo lo que está haciendo. Simplemente no lo sabremos hasta la temporada 2».
Pongámonos en situación: en el último capítulo, Dan descubre que la señora misteriosa de cabello blanco es Bobbi (Jacqueline Antaramian), la mamá de Melody. Esta señora activa el ritual cortándose la mano, cubriendo de sangre la figura de Kaelego y leyendo el libro. Luego aparece esa especie de torbellino eléctrico que envuelve al protagonista y tres Doritos más tarde, él aparece junto a Melody.
En el loco y confuso intento de escape, vemos que hay varias puertas, y una se abre solo para que Melody sea arrastrada por Samuel. Misteriosamente ella aparece segundos después en el presente, donde están Bobbi y el amigo de Dan, Matt McGorry (Mark Higgins). Al mismo tiempo, luego presenciamos que el protagonista despierta en un hospital y comprueba que es 1994 por el anuncio de la muerte de Kurt Cobain y porque las Torres Gemelas siguen intactas. ¿Cómo se explica todo esto? ¿Estamos hablando de traslados entre dimensiones o de viajes en el tiempo?
Sonnenshine lo argumenta, aunque su respuesta puede hacernos explotar la cabeza: “Esto es, para nosotros, solo un nuevo giro en el viaje en el tiempo. Es como pasar a través de otra dimensión. No es lo que pensamos que es un viaje en el tiempo. Pero hay mucho de este espectáculo que trata sobre el tiempo y cómo se mueve y qué es: ¿es un círculo plano? ¿Es un universo en expansión? ¿Es un universo de bloques? No lo sabemos».
Y agrega: «Pero el adagio de tener esta dimensión alternativa pone en acción un nuevo campo de juego. Alguien fue a los noventa y alguien fue a nuestro presente. ¿Eso significa que hay pequeños agujeros por los que puedes viajar?
Cuando se le repreguntó, la creadora de la serie fue un poco más clara: «No es una máquina del tiempo. Es algo diferente. Es una forma de doblar el tiempo a través de una dimensión alternativa”.
La confusión reina en «Archive 81», de manera que algunas cosas están destinadas a la interpretación del espectador. Ya sabemos que existe Otro Mundo, es allí donde vive Kaelego, que es esa especie de extraterrestre Maya en cuclillas, que intenta salir por los monitores cuando Dan está trabajando restaurando las cintas.
No está claro cómo actúa este villano, dios, semidios o presencia, como lo quieras llamar. Pero sí es obvio que cuatro personas llegan a habitar el mismo espacio donde está él: Iris Vos (Georgina Haig), Samuel, Melody Pendras y finalmente Dan Turner. ¿Lo vieron matar a alguien? No. Realmente quienes cometen los crímenes son sus seguidores.
Lo que sí parece simbolizar Kaelego es una realidad alternativa, y quienes le siguen, creen que al darle la bienvenida en la tierra, gobernará en un “mundo completamente nuevo”, sin sufrimiento. Recordemos que los hermanos Vos discuten al respecto, y él le dice a ella que las enfermedades y el dolor forman parte de la humanidad y que eso no debe cambiarse. Ella opina todo lo contrario y dirige las ceremonias para invocarlo.
Como no sabemos exactamente cómo funciona el Otro Mundo, solo queda especular. Porque el tiempo parece moverse muy lentamente allí o no moverse. Lo notamos en el reloj de Dan, cuando entra en esta dimensión. Y se comprueba porque a pesar de que estuvieron allí por décadas, Iris, Samuel y Melody no cambiaron físicamente.
Otro punto de discusión es que, cuando están buscando una salida, Dan y Melody parecen encontrar una serie de opciones entre puertas que se abren y otras que no. Esto permite el «secuestro» de Samuel, quien arrebata a Melody de las manos de Dan. ¿Por qué pasa esto?
La creadora de la serie lo explica así: «Todo eso es una especie de construcción de Kaelego, este Otro Mundo. Como, las cosas que en realidad estamos viendo. Pero eso estaba destinado a ser como una especie de… cuando ves a Dan despertar, dices: ‘Oh, lo entiendo’. Hay diferentes puntos en los que el tiempo se adentra en este otro mundo, representado por puertas».
Vamos a tratar de explicarlo de una manera más sencilla: Kaelego domina un lugar donde una variedad de puntos en el tiempo pueden converger y esos puntos son las puertas. Luce familiar para quienes están dentro (no es un infierno ni un cielo, por ejemplo), tal vez para que quienes quedan atrapados allí no busquen escapar.
Probablemente es la pregunta que menos permite elucubraciones. Sonnenshine respondió varias veces que sí a Cinema Blend cuando tocaron este tema. Recordemos que Dan sufrió varias alucinaciones. Pero la showrumner respondió que en efecto está en un hospital y en 1994. Lo que nos deja la bandeja servida para que en la próxima temporada, lo veamos intentando regresar al presente.
Pero, ¿por qué aterrizó en 1994 y no en el presente como Melody? Bueno, todo tiene que ver con las puertas. Hay diferentes líneas de tiempo que se encuentran detrás esas puertas. Al cerrarse una, es probable que Dan tuvo que tomar otra y esa le llevó a los tiempos de MTV y las Torres Gemelas.
Si Melody fue atrapada por Samuel, cuando Dan la buscaba, ¿por qué no aparece su secuestrador en el presente? Sonnenshine no quiso adelantar nada: “Oh, Dios mío. Quiero decir, no sé, ¿dónde podría estar? Diría que estén atentos a la temporada 2”, dijo a The Wrap.
“La idea es que continuemos con estos personajes en una nueva temporada si tenemos la suerte de tener una segunda temporada”, explicó Sonnenshine a The Wrap. “No fue concebido como un espectáculo de una temporada. Creo que hay más historias que contar. Creo que terminamos en un buen suspenso que debe abordarse. Presentamos muchos personajes que rodean a Dan y Melody que tienen vidas muy ricas e interesantes para explorar más a fondo. Así que sí, esperamos seguir adelante”.
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