En mi caso, simplemente me produce repugnancia comer carne, visitar el pueblo de El Junquito y acudir a una parrilla, algo que solo racionalicé ya casi llegando a viejo. Dudaría en ponerme a pontificarle a un carnívoro (moderado) que adopte mis hábitos, que todavía no está comprobado por la ciencia que sean mucho más recomendables.
Los vegetarianos solemos pasar hambre en Venezuela, sobre todo cuando nos toca hacer una parada en carretera vía San Juan de los Morros (no estoy solo: pregúntele sobre cómo sufre en las giras de conciertos a Horacio Blanco, cantante de Desorden Público).
Los restaurantes vegetarianos de Caracas suelen tener una continuidad titubeante en el tiempo, supongo que por su escasa rentabilidad. Actualmente no están prestando servicio algunos de los más emblemáticos, como el Gourmet Vegetariano de La Florida. Sin embargo, hay al menos cinco opciones en la capital venezolana, con ventajas y desventajas más o menos complementarias. Sí: vegetariano no quiere decir monocorde.
Generalmente voy con audífonos a todo tren, odio escuchar pendejadas al estilo de “yo antes me metía puro cochino frito”. La mayoría de estos locales están ofreciendo platos navideños adaptados, aunque no soy fan de la hallaca (tradicional o vegetariana) Tome en cuenta que la información sobre precios es extremadamente volátil en el contexto-país, y que al momento que estoy escribiendo esto quizás haya habido algún ajuste.
1. El Rincón Vegetariano
(Sabana Grande, en la feria del centro comercial viejo al lado del City Market). Es el local al que más asisto, por lo económico (insólitamente, mantienen el menú principal en Bs 100, supongo agarrado con alfileres). Aquí se desmiente la creencia de que el vegetariano pasa hambre, pues la ración suele ser generosa y balanceada. Creo que es el único de todos estos lugares donde tienes opción a una fruta como postre (un trozo de patilla). Una de las especialidades más deliciosas son los canelones de acelgas. Lamentablemente, está en un centro comercial viejo que no siempre ofrece las condiciones sanitarias óptimas.
2. The Veggies
(La California, en la calle del detrás del Instituto Nacional de Transporte Terrestre). “La cochinadita rica” o placer culposo de los vegetarianos caraqueños, por sus especialidades bien grasositas como las lumpias de vegetales, los medallones de berenjena y el arroz salteado (pulgar arriba).
Tiene orientación hacia la cocina asiática (creo que el dueño viene de allí). Es más caro (un menú básico, con precio según el peso, ronda los 200 bolívares), pero impresiona por su cornucopia de opciones: siempre te sientes tentado a meter más y más en la bandejita (es self service). Tenga precaución con el picante. Las instalaciones son chic, con un segundo piso soleado.
3. Superbueno
(Capitolio, entre esquinas de Padre Sierra y El Conde). Es uno de los locales vegetarianos ya tradicionales de Caracas, regentado por una asociación evangélica. El menú básico actualmente ronda entre 140 y 160 bolívares, según el número de ensaladas. Entre sus grandes fortalezas (para los que les gusten) están los panes integrales y las torticas. Lamentablemente no ofrecen opciones de frutas, imagino que porque están muy caras. También hay servicio de desayuno desde las 7:00 am, aunque todavía no lo he probado. Al lado tiene otro local vegetariano menos famoso que es un poco más tranquilo.
4. Canalito Natural
(Los Ruices, frente a VTV). Es uno de los clásicos, aunque tuve dudas de incluirlo aquí, porque también ofrece un menú “carnívoro” (de bajo calibre), lo que siempre te pone un poco a la defensiva. Es el local (semi)vegetariano más caro (un almuerzo me costó aproximadamente 300 bolívares), pero quizás el más delicado en sabores y presentación de los platos, con acento en los aderezos, algo para lo que no estamos 100% entrenados los que nos familiarizamos con los vegetales a lo Capitán Cavernícola. Probé una ensalada Tentación de Ricota con miel y mostaza celestial, además de unas albóndigas de coliflor y jojoto.
5. Sabas Nieves
(Plaza Venezuela, avenida Francisco Solano con calle Pascual Navarro, subiendo un par de cuadras desde el Gran Café). Otro de los impelables de la minoría subterránea vegetariana de Caracas. El almuerzo básico + IVA actual está en 150 bolívares. Se caracteriza por el menú temático: criollo los lunes, italiano los martes, árabe los miércoles, peruano los jueves, mexicano los viernes y variado los sábados. Aún no los he repasado todos. En la foto usted verá un trozo de sábila que mastiqué con todo y concha por error uno de los jueves peruanos, aunque más bien se usa como aperitivo.
Además del pollo en varias versiones, el menú suma propuestas marinadas largo tiempo en especias o selladas al carbón. Entre lo más pedido están los arayes, un plato tradicional libanés; las costillitas asadas durante muchas horas en barbecue importada; el lomito aderezado en 7 especias y guarniciones como las batatas con miel, especias y queso parmesano
Estrenaron nuevos espacios, diseñados con el concepto de neuroarquitectura, que permite atender a 24 comensales a la vez, y sumaron nuevos platos a su menú, como la pasta horneada y la milanesa vegetariana, hecha de frijoles
