El primer bistró porcino en Madrid es venezolano

Especializados en cerdo, La Porcinería se ha convertido en un rincón para que las personas puedan disfrutar de este tipo de carne en muchas de sus versiones. Desde hamburguesas hasta platos principales más elaborados, la carne de cerdo y el ADN venezolano son los protagonistas del lugar

Bárbara Ramírez

01 de marzo, 2018 07:32 am

Foto: La Porcinería.

Marian Díaz, ingeniera industrial, José Nuñez, abogado y Fernando Badell, odontólogo, son tres amigos maracuchos residentes en Madrid que tenían la idea de montar un restaurante pero era un deseo que veían como un proyecto lejano. Sin embargo, en marzo de 2016, todo cambió, cuando los tres futuros socios leyeron un artículo sobre un movimiento mundial de chefs que promovía el consumo de carne cruda de cerdo. La publicación no solo les despertó la curiosidad sino que también se convirtió en un incentivo para abrir el primer bistró porcino en Madrid.

“Nos conseguimos con la sorpresa de que en Madrid no existía un restaurante especializado en cerdo, teniendo aquí una materia prima excelente porque el cerdo ibérico es uno de los mejores del mundo”.
De esta manera, en julio de 2017 y en la zona de Salamanca, se inauguró La Porcinería, un restaurante mono producto, divertido y diferente. La propuesta gastronómica cuenta con un menú que se caracteriza por la fusión internacional, la creatividad y la combinación de nuevos sabores.

“El nombre fue idea de nuestro equipo de branding gastronómico Eat&Love Studio. Para nosotros es un nombre divertido y fácil de recordad y asociar”.
Marian explica que uno de los platos más populares del restaurante cuenta con ADN venezolano y es el tataki de lagarto; el cual está elaborado con puré de yuca trufado y yuca frita rallada. Es así como, mediante el uso de ingredientes comunes de las tierras venezolanas, La Porcinería busca trasmitir sabores criollos en la capital española.
“Otra forma de representar a nuestro país es a través del buen trato y de las ganas de hacer nuestro trabajo con excelencia. Le ponemos mucho corazón a todo lo que hacemos y eso se siente en el ambiente del restaurante”.
Para conocer a La Porcinería, Marian recomienda ordenar el bombón de cerdo thai que es un mantou o panecillo chino relleno de estofado de cabezada de cerdo thai con salsa kimuche y alga wakame. De igual forma, la carrillera con crema de papas y salsa de cacao y pistacho es uno de los platos más solicitados.

La propuesta también ofrece diversas opciones de hamburguesas como la de costillas desmigadas con panceta (tocineta) crujiente y espinacas y la Ibérica especiada con hinojo y acompañada de queso provolone, lechuga y cebolla a la plancha. Asimismo, el menú cuenta con entradas sabrosas como las alcachofas fritas con velo de panceta y foie rallado.

Con un menú creativo y con materia prima de primera calidad, La Porcinería busca diferenciarse de las otras propuestas culinarias madrileñas. Además, con un ambiente agradable, cercano y real esperan que día a día el cliente se sienta satisfecho con la comida y con la experiencia en general.
“Hemos tenido mucha receptividad, las personas se sienten a gusto con el ambiente, el servicio y la comida. Ellos saben que le ponemos mucho corazón y esfuerzo. Eso se valora”.
Después de casi siete meses, la idea que comenzó como un proyecto lejano actualmente forma parte del movimiento gastronómico de la carne porcina. Aunque no todo ha sido fácil, La Porcinería es un rincón en donde las personas pueden disfrutar de las distintas preparaciones y versiones de la carne de cerdo.
“En una ocasión nos quedamos sin horno en pleno servicio y tuvimos que salir a comprar uno nuevo. Atravesamos el restaurante (que es pequeño) con un horno en caja. Pudiéramos escribir un libro con nuestras anécdotas pero gracias a mucho esfuerzo todo ha valido la pena”