De allí acaba de regresar su sumiller y jefe de sala, Josep Roca, quien ha recorrido cuatro provincias, catado decenas de vinos y descubierto numerosos productos autóctonos con los que, junto a sus hermanos Joan y Jordi, cocinará cenas en los destinos escogidos en esta segunda edición de su gira: Buenos Aires, Miami, Birmingham y Houston en los Estados Unidos y Estambul.
El primero de agosto El Celler de Can Roca se instalará en la Sociedad Rural Argentina de Buenos Aires, donde servirán un menú argentino en cuya confección ya trabaja el equipo del restaurante y del Roca-Lab, su taller de experimentación y creatividad, informó hoy el BBVA, que patrocina el tour, en una nota.
Al igual que hicieron el pasado verano, los hermanos Roca se trasladarán con su equipo al completo para cocinar con productos de los países visitados. Además, seleccionarán a dos estudiantes de hostelería de las ciudades a las que acudan que disfrutarán de una beca de cuatro meses en El Celler.
«Creo que haremos grandes cosas en Argentina. Será un tributo emotivo, cercano, respetuoso y cómplice. Carne, mate, dulce de leche… Buscaremos productos símbolo de Argentina y les daremos nuestra interpretación. Pero también usaremos pescados y mariscos, que son maravillosos, algo que esperemos sirva como reconocimiento a los recursos propios que tiene el país», señaló Josep Roca.
El sumiller seleccionará los vinos argentinos que acompañen los platos. «Queremos ser embajadores del vino argentino para dar nuestro apoyo a esa nueva generación de elaboradores que tanto me ha impresionado», agregó.
Tras visitar viñedos y bodegas de Mendoza, Salta y Jujuy, destacó «un renacimiento de vinos vivos, liderado por una nueva generación de viticultores que buscan que el paisaje se identifique en sus vinos y eso hará que el vino argentino dé mucho más de sí en el futuro».
Además tuvo la oportunidad de conocer en directo la pasión con la que los argentinos viven el fútbol, asistiendo a un partido en La Bombonera, lo que inspirará alguno de sus platos, que cocinarán con alumnos de Camino Abierto, fundación contra la exclusión social de jóvenes.
En su primera gira, el equipo de El Celler de Can Roca sirvió 50.000 platos para 2.700 comensales en Houston y Dallas (EEUU), Monterrey y México DF (México), Bogotá y Lima.
Son los únicos cocineros a quienes Naciones Unidas ha nombrado Embajadores de Buena Voluntad y desde esa posición emprenderán varios proyectos para luchar contra el hambre. Pero los hermanos Roca van más allá y abogan por una nueva vanguardia culinaria enfocada desde el humanismo
Los hermanos Roca se convirtieron en embajadores de buena voluntad del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), durante un acto en el que asumieron el compromiso de poner "la investigación culinaria al servicio de la pobreza"
