Vida sana

¿Qué deben comer los niños que hacen deporte?

Mis hijos siempre han practicado un deporte. La idea es que drenen energía y adquieran disciplina. Poco a poco el entrenamiento se ha tornado más fuerte. Por un momento pensé que no los alimentaba bien, pues mi hijo de 10 años pretendía comer cantidades que yo consideraba no eran saludables. Investigué sobre el tema y esto fue lo que conseguí:

NIÑOS, DEPORTES
Fotos: HumanSports freepik
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Base científica
La alimentación para los niños que hacen deporte está dirigido para quienes lo practican más de tres veces a la semana y la rutina dura más de una hora.

El informe de ‘Nutrition for child and adolescene athletes’ de la Universidad de Hamilton, Ontario, puso en evidencia que los niños utilizan más grasa y menos hidratos que un adulto durante la práctica de ejercicio. El doctor Oded Bar-or, experto en medicina del deporte en pediatría, comenta en dicho informe cómo «un niño de siete años de edad, podría requerir hasta un 25-30% más de energía por kilo de peso corporal que un adulto joven cuando ambos caminan o corren a la misma velocidad». La primera respuesta a este anuncio teórico fue preguntar por qué.

El doctor explica que se trata de una cuestión de desgaste. La coordinación o para ser más precisos, la falta de coordinación de los movimientos de un niño le lleva a multiplicar la contracción muscular, “con lo que requiere casi un 30% más de energía por kilogramo de masa corporal para realizar ejercicios. De igual modo, durante actividades cortas e intensas, los niños parecen depender más del metabolismo aeróbico (la grasa es la fuente más predominante de energía) que del metabolismo energético anaeróbico”.

En lenguaje sencillo, significa que los niños deben comer más grasas naturales como frutos secos (nueces, avellanas, almendras y semillas), aguacate, aceite de oliva, entre otras.

En el día a día
Ahora que ya sabes que debes darle más grasas a los niños que hacen deporte es importante sepas a qué hora y cómo.

Daniela Urdaneta licenciada nutricionista y dietista, dice que la mejor forma es en las comidas y agrega: “Debemos incluir meriendas con frutas como patilla, manzana y peras. Cuidado con el cambur por el tema de la digestión o carbohidratos de rápida absorción antes y después del ejercicio carbohidratos complejos como una barra de granola, avena”.

Además, la especialista comenta que hay que estar claro que, mientras aumenta la edad, se debe aumentar el requerimiento calórico, teniendo una base de niños que tengan de cuatro a ocho años y que deben consumir a diario entre 1600 y 2000 calorías en el día, mientras que entre ocho a 17 años de 2300 a 2500 calorías al día. No deben faltar alimentos como arroz, granos, avena, y proteínas como carne y huevos.

Es importante corroborar todo esto con un grupo especialista de pediatras que evaluarán el crecimiento y el peso. Po en conjunto con una nutricionista deportiva infantil.

En cuanto a los dulces que al parecer dan energía, Urdaneta dice: “son alimentos que no dan ningún valor nutricional al cuerpo, así que debemos dejarlos de lado”.
¿Y la hidratación?
Los niños tienden a ingerir poca agua, principalmente por falta de costumbre. Así que como padres tenemos la tarea de inculcar su consumo.
La hidratación saludable indica que un niño ha de ingerir más de un litro de líquidos al día, que incluyen agua. Un niño deportista debe alcanzar el litro y medio: se trata de tener hidratado el cuerpo por dentro. El agua ha de llegar a músculos, tendones y ligamentos ya que además de ser imprescindible en el proceso de termorregulación, actúa a modo de amortiguador entre las articulaciones del niño en pleno proceso de crecimiento y desarrollo.

Una idea para que se inicien en su consumo es ponerle un termo de agua con unas gotas de limón o naranja.
Recuerda que como madres está en nuestras manos la manera en que nuestros hijos se alimentan y la mejor manera de enseñarles es con el ejemplo. Procura que sea lo más natural posible y tendrán grandes resultados.

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