A Picasso se le fue la luz... y un par de cuadros

Parece que el electricista francés, Pierre Le Guennec, aprovechó el blackout en casa de los Picasso para echar una mano por otro lado. La mañana del 20 de marzo Pierre y Danielle fueron sentenciados con un veredicto: culpables por robo de 271 piezas del pintor.  La pareja conservó las creaciones en un garaje durante 40 años. La justicia decidió devolver a la organización Picasso Administration todo el material «extraviado». Pierre Le Guennec tiene 71 años y la colección que tenía bajo su ático está valorada en más de 60 millones de dólares.

Los jubilados fueron condenados por «ocultación de bienes provenientes de un robo». Sin embargo la investigación no permitió establecer formalmente la identidad del autor de dicho delito. Hay pequeños lienzos, litografías, collages y dibujos que van del año 1.900 al 1.932, y que se encuentran en perfecto estado de conservación.

En su defensa la pareja sostuvo que las 271 piezas, conservadas en cajas de cartón, eran un regalo de Jacqueline Picasso, la última esposa del artista. Los testigos que declararon ante el tribunal de Grasse en Francia que aseguraron que esta era una hipótesis falsa.

«Estamos decepcionados, habíamos ‘confiado’ en el tribunal», dijo  Pierre tras el veredicto. Agregó su esposa: «Somos personas honestas. Quizá no sabemos hablar… Somos gente pequeña, no tenemos un gran apellido».

La existencia de las pinturas salió a la luz en 2010, cuando el electricista y su esposa viajaron a París para presentar las obras a Claude Picasso, responsable de la autentificación de las obras, quien junto a los otros cinco herederos, decidió hacer una denuncia penal por robo. El lote de obras serán entregado al hijo del maestro, Claude Ruiz-Picasso, quien representa a los seis herederos de Picasso en esta causa.