Toda niña sueña con el día de su matrimonio. Se arropa con sábanas blancas y recoge flores frescas del jardín para jugar a dar el “sí”. Poco a poco, los sueños se hacen realidad y algunas suertudas pueden imitar el pueril juego —como lo visualizaron
Alfombras de flores, vestidos con etiquetas en donde se leen grandes nombres, champagne y divina música y comida que dure hasta el amanecer. Estos son los cuentos de hadas más caros de la historia, en donde no siempre la princesa tiene un final feliz.
1. Noche hindú en Paris
Vanisha Mittal y Amit Bhatia empezaron a vivir felices para siempre en 2005. Y ¿cómo no estar feliz cuando el padre de la novia, un magnate de la India, gasta 46 millones de euros, para satisfacer los caprichos de su princesa? El convite comenzó en el Palacio de Versalles y terminó con un chispeante show pirotécnico en la Torre Eiffel.
2. Reales a la basura
Gastar 3.5 millones de dólares en un matrimonio para que la unión tan solo durase 1 año y medio puede resultar bastante caro. La siempre controversial Liza Minnelli se casó en 2002 con David Gest en el Regent Hotel de Nueva York. Entre los invitados se encontraban sobrevivientes del mundo del espectáculo e importantes miembros de la realeza, al menos la del pop: Michael Jackson, quien además apadrinaba la ceremonia. Lo que empezó ante Dios, terminó en tribunales y con fuertes acusaciones de contagio de enfermedades de transmisión sexual.
3. Diversión doble
La modelo y actriz inglesa Elizabeth Hurley y Arun Nayar no se conformaron con celebrar su amor una vez. En 2007, gastaron 1.900.000 euros para gozar de dos celebraciones: una en un elegante castillo medieval en Inglaterra y otra en India, en casa de la familia del novio. El vestido para la fiesta occidental fue un modelito de la oxigenada Donatella Versace, mientras que, para la ceremonia bendecida por Brahma, Liz lució un pintoresco sari. Tres años más tarde, la luna de miel se volvió amarga y decidieron separarse.
La pandemia global alcanza a los grandes nombres del espectáculo, la política, la alta sociedad y el deporte. Te ponemos al día sobre las figuras que han sido contagiadas en las últimas semanas por el coronavirus
En París el confinamiento, al igual que en otros países, es ya una medida radical ante la amenaza del Covid-19. No son pocos los latinos que hacen vida en la capital francesa y sienten miedo ante la posibilidad de quedar sin empleo
Carla Castillo es una ingeniera venezolana que vive desde hace varios años en la capital francesa y hoy está encerrada en pleno inicio de primavera. Pero está preparada y el teletrabajo se ha convertido en su principal distractor entre tanta información
