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Demonios tecnológicos: en un exorcismo se manifestaron por mensajes de texto

Monseñor Stephen Rossetti, psicólogo licenciado y profesor asociado de investigación en la Universidad Católica de América, publicó un libro en el que narra sus experiencias como exorcista. En sus relatos cuenta cómo los demonios se han adaptado a las nuevas tecnologías

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Exorcismo

El monseñor Stephen Rossetti acaba de publicar un libro, «Diario de un exorcista estadounidense. Demonios, posesión y la batalla moderna contra el mal antiguo”, en el que resume sus 13 años de experiencia realizando exorcismos en Estados Unidos. Lo más revelador: los demonios se pueden comunicar por mensajes de texto, una novedad que todavía no hemos visto en las películas.

En entrevista con el New York Post, este cura de 70 años, psicólogo licenciado y profesor asociado de investigación en la Universidad Católica de América, relató sus diferentes encuentros con el mal. Y abundan los típicos enfrentamientos con entidades que hablan otros idiomas, que reaccionan al agua bendita o que transmiten el malestar de la poseída al exorcista.

«Mi estómago sintió náuseas instantáneamente, y la sensación de malestar se extendió rápidamente a mi cabeza y al resto de mi cuerpo. Todo mi ser se sintió espiritualmente golpeado durante toda la sesión», recuerda sobre un caso específico. Pero luego, contó un desafío realmente singular, que involucra a las nuevas tecnologías.

Una joven se acercó a él después de que una cruz inversa apareciera, como una quemada, en  su hombro. Al mismo tiempo, el padre de la poseída estaba recibiendo mensajes de texto «sarcásticos» de los demonios. “Los textos eran una típica diatriba demoníaca: ‘Ella nos pertenece’”, dice Rossetti, que trabajó en dos parroquias de la Diócesis de Siracusa durante cinco años y ahora se residenció en Washington, DC.

Rossetti aseguró que los mensajes parecían provenir del número de teléfono de la joven. Tras una cuidadosa investigación, no había evidencia de que ella hubiera enviado los mensajes.

«Por cierto, varios exorcistas han tenido la misma experiencia, recibiendo mensajes de texto de demonios, ¿y por qué no?», explicó el cura. «En el pasado se metieron con la electrónica: televisores y luces que se apagaban y se encendían por sí mismos. Ahora se meten con los teléfonos móviles».

¿Y qué pasó con la joven? El exorcismo duró casi seis meses. Según el cura, la mujer había sido ofrecida al nacer al demonio. Como ella decidió seguir la fe católica, fue castigada con esa quemadura. Pero luego fue liberada.

La comunidad científica ha comprobado que muchos casos denominados como «posesiones», no son más que manifestaciones de enfermedades mentales y que el diagnóstico y tratamiento como un hecho sobrenatural, ha generado mucho daño en los pacientes.

De hecho, Rosetti, que asegura realizar 20 exorcismos cada semana, admite esos errores, pero dice que ha visto lo suficiente como para creer. Por eso se atrevió a dejar un consejo al final de la entrevista: “Le digo a la gente que pongan crucifijos en su casa, agua bendita en una pila en casa, estatuas religiosas alrededor de la casa y recen el rosario. Esa es tu protección».

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