Venezuela

15 materias pendientes para volver al salón de clases

¿Será posible regresar a las aulas este año? De momento, se estudian opciones, pero la última palabra -como siempre- la tiene el Ministerio. El 15 de enero se celebra en Venezuela el Día del Maestro y ya tenemos claro lo que ha pasado con ellos durante estos meses de pandemia: hay mucho por hacer para que los maestros y docentes puedan volver a sus espacios naturales en condiciones más o menos óptimas. Es una deuda del Estado y de la sociedad en general

maestro contagios
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Luego de diez meses tras el cierre de las instituciones educativas como medida para evitar la propagación de la covid-19 en Venezuela, el Ministerio de Educación y la Comisión Presidencial para la covid-19 informaron que están analizando el retorno semipresencial al salón de clases, al menos para las evaluaciones, además de las jornadas de asesorías pedagógicas iniciadas en octubre durante las semanas de flexibilización del confinamiento.

Aun sin planteamientos claros y sin fechas para lograr la modalidad “presencial parcial”, el reto supone mucho más que medidas de bioseguridad eficaces: al menos quince exigencias pendientes deben considerarse no solo por la salud de cada comunidad educativa, sino por la restitución y el mantenimiento de la educación gratuita, de calidad, actualizada e inclusiva, y para superar la catástrofe educativa ―que es también crisis social― en la que estamos inmersos desde antes de la llegada de la pandemia.

Maestros y expertos en educación de diversos gremios tienen la palabra. Ahora faltan las acciones.

1. Revalorización del maestro

“El rescate de la vocación y la profesión de los maestros es uno de los puntos centrales en este momento. Esto implica rescatar las condiciones socioeconómicas y la calidad en su formación para que genere una propuesta de innovación, de calidad para el aprendizaje. La profesión de maestro va a tener un éxodo muy grande porque nadie quiere ser maestro ganando dos o tres dólares al mes, sin nada de equipamiento y con una minusvaloración social. No es nada prometedora la educación en Venezuela si no se aborda este punto”. ―José Gregorio Terán S.J., subdirector nacional de Fe y Alegría Venezuela.

2. Salario digno para los maestros

“Para comenzar a dignificar la función pedagógica del maestro, primero, hay que conquistar un salario que le permita alcanzar condiciones dignas de vida. Las políticas económicas salvajes desarrolladas por el gobierno nacional pulverizaron el salario, llevando al docente a una condición de extrema pobreza y a la negación de su papel como formador de ciudadanía. Segundo, hay que restituir el estado de derecho de la Convención Colectiva del Magisterio, hoy controlada por la Onapre y por la estafa política de haber unificado la Convención con el resto de los trabajadores del MPPE. Igualmente, hay que restablecer la seguridad social y las prestaciones sociales. Y tercero, urgen condiciones para el ejercicio de la profesión docente que permitan que la escuela y los estudiantes reciban una educación de acuerdo con los principios constitucionales. En ese sentido, es necesaria la aplicación del Reglamento del Ejercicio de la Profesión Docente, hoy trasgredida por el MPPE”. ―Raquel Figueroa, coordinadora de la Unidad Democrática del Sector Educativo (UDSE).

3. Acompañamiento psicoemocional de los maestros

“Promover y asegurar el bienestar psicoemocional es prioritario en todas las áreas laborales, mucho más en el profesional de la educación, porque todos los días es responsable de atender decenas de niños y adolescentes ¿Cómo acompañar a los docentes? Se requiere que en los centros educativos haya psicólogos, psicopedagogos u orientadores que den herramientas psicológicas a los docentes para el trabajo de sus problemas y para su buen desempeño laboral, que generen espacios catárticos y de expresión de las emociones ―grupos de apoyo mutuo―, y de ser posible, que creen jornadas de esparcimiento y cohesión grupal”. ―José Gregorio Bastidas, orientador psicológico.

4.Tecnología e innovación para la educación a distancia

“Necesitamos dos cosas: infraestructura y un diseño instruccional educativo. Lo evidente es que tanto las casas, los centros educativos y las casas de los educadores necesitan una conectividad continua, rápida y estable, y equipos funcionales, no necesariamente de última generación. Visto por allí, Venezuela es uno de los peores países de América para la educación a distancia. La pobreza arropa a cerca de 90% de la población. Hablar de renovación de equipos o del pago de tarifas reales de telecomunicaciones cuando no están garantizadas ni las tres comidas es ruidoso. Incluso con la infraestructura cubierta, las escuelas que no tengan un diseño instruccional acorde con el aprendizaje a distancia estarán perdiendo el tiempo y esfuerzo. Se trata de buscar a pedagogos expertos que puedan desarrollar módulos de formación, curvas de aprendizaje y el aprovechamiento de recursos digitales para que la experiencia educativa sea real. Este diseño instruccional adaptado a Internet es donde se tuvo que poner todo el esfuerzo desde marzo 2020 y casi nadie lo hizo”. ―Luis Carlos Díaz, periodista y ciberactivista.

5. Mejoramiento del programa “Cada familia, una escuela”

“Desde el momento de su lanzamiento hasta ahora, uno de los problemas fundamentales del plan ‘Cada familia, una escuela’ es que tiene algunos rasgos de educación a distancia y otros de educación en casa, pero no está diseñado como uno o como el otro, tampoco como una combinación de ambos. Esa falla de origen hace que sea de difícil instrumentación y desarrollo. Además, su instrumentación el año escolar pasado debió concluir con una evaluación profunda sobre el estatus de sus procesos y resultados en el territorio nacional, que debió incluir la evaluación de las capacidades reales de escuelas y docentes para instrumentarlo nuevamente en este año escolar, así como la evaluación de los aprendizajes reales de los estudiantes para poder rediseñar los recursos pedagógicos y procesos del Plan antes de volver a implementarlo”. ―Olga Ramos, coordinadora del Observatorio Educativo de Venezuela.

maestro
(Foto: Daniel Hernández)

6. Respeto por cada una de las escuelas

“Después de diez meses de aislamiento social, escuelas cerradas y educación a distancia, valoramos mucho más la importancia de las escuelas como espacios de aprendizaje, protección, desarrollo y socialización. En un aula, el niño tiene la oportunidad de aprender, jugar, participar, expresar, decidir, compartir, equivocarse y comprender la importancia de vivir en comunidad. Se debe garantizar el retorno seguro a la escuela para lograr que cada docente, familias y niños dispongan del apoyo, orientación, comprensión y el estímulo que los haga sentirse nuevamente como miembros de una comunidad educativa”. ―Carlos Trapani, coordinador general del Centros Comunitarios de Aprendizaje (Cecodap).

7. Creación de protocolos de bioseguridad para las escuelas

“No hay misterio en la transmisión de este virus. La educación de nuestros niños no puede continuar suspendida, necesitan a sus maestros y ellos necesitan ser los dueños del protocolo de bioseguridad, necesitan entender los fundamentos de la transmisión de la enfermedad y ser capaces de diseñar sus propios protocolos de acuerdo a las características de su escuela y comunidad, y a partir de sus recursos disponibles. El maestro es la persona más peligrosa del aula, porque es quien suele hablar más tiempo y está frente a los niños”. ―Lila Vega, pediatra y coordinadora de la Red de Madres, Padres y Representantes.

8. Autonomía de las escuelas para decidir su reapertura

“En Andiep somos creyentes en que debemos hacer una semipresencialidad sin poner en riesgo a ningún miembro de la comunidad educativa. Entonces, podemos ir implementando un protocolo descentralizado, escalonado y progresivo de acuerdo con los diversos escenarios que se puedan ir generando. No puede ser un protocolo emanado del Ministerio de Educación, ni siquiera a nivel de los estados, municipios o parroquias, sino de cada institución. Cada colegio es una realidad distinta. Es necesaria la semipresencialidad, mucho más ahora cuando se ha visto que están disminuyendo las evaluaciones de los estudiantes, porque han ido perdiendo el estímulo. La alternativa de la educación a distancia tiene que existir, pero nunca puede sustituir a la educación del profesor”. ―Fausto Romeo, presidente de la Asociación Nacional de Instituciones de Educación Privada (Andiep).

9. Reactivación del Programa de Alimentación Escolar (PAE)

“La población más afectada por la desnutrición es la de 0 a 5 años ―maternal y preescolar―. Es prioritario e imprescindible atenderla. El impacto implica que las capacidades cognitivas del estudiante se afectarán en el tiempo. También es prioridad la atención a la población escolar ubicada en las zonas más pobres y de difícil acceso. Es necesario garantizar la ingesta mínima en desayunos y almuerzos, reduciendo sustancialmente la ingesta de carbohidratos. Proteínas y vegetales deben formar parte de la dieta correspondiendo al contexto regional. Además, es necesario articular con el sistema de salud para establecer mecanismos de prevención de enfermedades e incorporar control de talla y peso. La administración del PAE no es solo un asunto educativo”. ―Ofelia Rivera, coordinadora del Movimiento Pedagogía Progresista y miembro de la UDSE.

10. Acceso a la educación de las comunidades indígenas

“Está pendiente cumplir lo establecido en el artículo 27 de la Constitución y los artículos del 74 al 104 de la Ley de Pueblos y Comunidades Indígenas. Con esto como base, hay que respetar a cada territorio y comunidad indígena en lo que requieren para la educación y apoyarla en el diseño de su currículum particular. Falta capacitar a los indígenas elegidos por sus comunidades para ser maestros y, sin perder sus idiomas, garantizarles la enseñanza del castellano para que tengan la oportunidad de defender sus derechos ante la jurisdicción no indígena”. ―María Teresa Sánchez, directora de Extensión Social Universitaria de Ucab Guayana.

11. Continuidad educativa de los estudiantes con discapacidad

“Antes de la llegada de la pandemia, la atención de la población estudiantil con necesidades educativas especiales se estaba viendo afectada por la migración de especialistas de la Educación Especial a otros países o sectores de la producción nacional en búsqueda de mejoras económicas. Las aulas integradas y unidades psicoeducativas que funcionaban dentro de las escuelas regulares, así como los centros de atención especializada, poco a poco fueron cerrando sus servicios. Para el 2021, la tarea pendiente es restituir progresivamente el acceso de esta población a ambientes de aprendizaje seguros con una atención psicoeducativa integral de calidad para ir desarrollando en el niño y el adolescente herramientas que les permitan manejarse e integrarse en esta nueva realidad lo más independientes-autónomos posible”. ―Jenny Jiménez, directora del Instituto Universitario “Jesús Obrero” (Iujo), ampliación Petare.

12. Reestructuración de las universidades públicas

“Esta es la peor etapa de la educación universitaria desde 1912 cuando la dictadura de Gómez cerró la UCV por doce años. Está semiparalizada desde hace casi un año: muchísimos jóvenes han abandonado sus estudios porque deben luchar para sobrevivir y muchos docentes se han apartado porque no pueden subsistir con salarios fluctuantes entre 3 y 10 dólares mensuales. Las principales universidades públicas están sufriendo recurrentes episodios de robos de equipos y vandalismo, porque los empleados y el personal de seguridad no están asistiendo, y no hay autoridades que enfrenten y denuncien este desmantelamiento. Con tales variables, lo que se podría hacer es oficializar el cierre técnico de las universidades, convocar a la elección de nuevas autoridades y que llamen a claustro abierto a los profesores y estudiantes para decidir las estrategias a tomar”. ―Leonardo Carvajal, investigador del Centro de Investigación Humanística de la Ucab.

Universidad Central de Venezuela con poco mantenimiento

13. Cese de los actos violentos en La Vega (y en zonas similares)

“Ni por el carajo queremos ser un escudo humano en medio de las balas. En La Vega necesitamos justicia y gente que eduque sin complicidad, con respeto y dedicación, porque la violencia inicia cuando la viveza criolla desplaza a la justicia: cada malandro es el resultado de una mala educación en casa, en la familia y en la escuela. Si al chamo se le sigue convenciendo con actos de que lo importante es el dinero y no el medio correcto para conseguirlo, será difícil cambiar la violencia colectiva de nuestras calles y queremos que ya, de una vez, sean seguras y sin miseria”. ―Tailoi Arabia, subdirector de la U.E. Colegio Alianza Fe y Alegría de La Vega.

14. Restitución y mejora de los servicios básicos en escuelas y hogares

“Es necesario el saneamiento de las escuelas y asegurar permanentemente agua potable, luz eléctrica, internet y recursos didácticos ajustados a la realidad de cada institución y que sirvan para mantener al estudiantado estimulado para la adquisición de aprendizajes y el desarrollo de competencias ¿Y si la casa es la escuela? ¡Igual! Los servicios básicos tienen que funcionar para tener un mejor desempeño de los estudiantes, sus representantes y de los docentes que siguen con fuerza y comprometidos con sus muchachos”. ―Fabiana Duarte, maestra de segundo grado y coordinadora de la E.B. Fe y Alegría “Virgen Niña” de Asalta.

15. Entender que la educación es un derecho humano

“Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita. Así comienza el artículo 26 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Por lo tanto, no es un beneficio, ni un regalo, ni un bono. Es un derecho que el Estado debe garantizar, cumplir y proteger. Y los padres tienen el derecho preferente, es decir, por encima de cualquiera, de decidir la educación que quieren dar a sus hijos. Como los derechos no se piden, ni se mendigan, sino que se exigen y se ejercen, los padres tienen la obligación de exigirle al Estado que existan suficientes instituciones educativas, completamente dotadas de servicios públicos, de alimentación y de salud, con suficientes docentes capacitados y bien remunerados, con programas de estudio y suficientes materiales de enseñanza que garanticen una educación de calidad. Solo así nuestros hijos tendrán un futuro fuera de la pobreza y nuestro país, ciudadanos que lo desarrollen”. ―Alexis Ramírez, director de Excubitur – Derechos Humanos en Educación.

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