Apagón en Puerto Cabello pone tilde en la crisis eléctrica nacional

Ana Pérez, una mujer de 42 años de edad, residenciada en el centro de la ciudad, relató a El Estímulo que ella ha tenido que hacer “magia” para que sus sobrinos de 6 y 8 años duerman en las dos noches que llevan a oscuras y “sin aire ni ventilador”, por lo que mantenía la esperanza de que regresara la electricidad cuanto antes, pero no ha sido así.

Pérez mencionó que además los zancudos tampoco ayudan en esa labor del descanso nocturno. “Hemos inventado abrir las ventanas y colocar unas colchonetas en el piso a ver si mejora un poco la situación, pero igual los niños se despiertan y he tenido que buscar un abanico para soplarles aire”.

Mientras tanto Luisana Marcano, una jubilada de 69 años de edad que vive en el sector Rancho Grande, narró que muy a su pesar tuvo que desconectar la nevera y que lo poco que tenía en ella se descompuso: “Se me dañaron las verduras que tenía”.

Explicó que no había hecho compras el fin de semana porque esperaba cobrar su pensión el lunes pero esto tampoco fue posible porque la falla eléctrica impidió que el banco pudiera entregarle el dinero, por eso solamente mantenía unos tomates, berenjenas y lechuga. “Todo olía muy mal y preferí botarlo aunque me daba tristeza”.

Adicional a esto, refirió Marcano que tampoco había conseguido comprar velas o velones porque se han ido agotando. “Una vecina nos prestó una velitas muy pequeñas que usan para meditar y con eso nos ayudamos de noche mi esposo, mi hija y yo”.

Otros se las han ingeniado para ubicar a quienes tienen pequeñas plantas eléctricas y de esa manera cargar teléfonos celulares y otras baterías.

“En casa de mi hermana hay una pequeña planta eléctrica y colocamos muchos aparatos a cargar allí, también lo hicieron sus vecinos”, dijo María Berríos que vive en la zona de Tejerías en Puerto Cabello.

El servicio eléctrico comenzó a ser restablecido en sectores aledaños al Hospital Adolfo Prince Lara, ubicado en la avenida La Paz, también en La Belisa y La Sorpresa, entre otras zonas.

Comercios y puerto

Por su parte Jorge Aroca, presidente de la Cámara de Comercio de Puerto Cabello, refirió que hay incertidumbre y preocupación por las pérdidas que estos días de apagón dejarán a los comerciantes y empresarios que trabajan en la ciudad, aunque reconoció que la peor parte la llevan los ciudadanos que ya comienzan a desesperarse.

“Está el comercio cerrado o parcialmente cerrado, algunos comercios tienen plantas eléctricas que pudieran soportar parcialmente la situación pero esas plantas después de ocho horas tienen que estar alimentándose con gasoil o gas que también hay limitaciones para el acceso y ya tenemos algunas manifestaciones. Anoche en algunas zonas de Puerto Cabello se nos informó de algunos rumores de posibles saqueos y tiroteos. Todo esto genera una gran preocupación”, sostuvo Aroca.

Respecto al puerto, destacó que el impacto es importante porque la semana antepasada en el buque que arribó a los muelles, llegaron cargas con materias primas y algunos productos que no se han logrado nacionalizar porque esperan los ajustes de acuerdo al decreto presidencial de la exoneración de impuestos.

Ahora con esta falla eléctrica, la demora se incrementa y según han expresado los importadores, podrían tener más gastos por los retrasos que lo que lograrán de descuentos.