El jefe de la bancada opositora en el Parlamento, Stalin González, recordó este viernes que según la Constitución el único organismo que puede aprobar la reestructuración de la deuda venezolana es la Asamblea Nacional.
«El país necesita saber qué se hará con los recursos y una deuda irresponsable. El gobierno ha hipotecado al país y exigimos que se debata esto», señaló el diputado González.
El parlamentario declaró desde las afueras del Palacio Federal Legislativo luego de que la Guardia Nacional le impidiera el acceso a la Asamblea Nacional, alegando que solo tiene autorización para ingresar los días martes y jueves.
Recordó que la deuda en 2006 era de 46.000 millones de dólares, para 2013 ascendió a 130.000 millones y este año se ubica por los 200.000 millones de dólares.
«Hace 9 años cada venezolano debía 1.400 dólares. Hoy son más de 3.000 dólares por persona lo que debemos. Son unos ludópatas. Pero en vez de estar enfermos de juego, están enfermos de poder», expresó el parlamentario.
También rememoró cómo en 2012, cuando se contaba con $19.000 millones en oro, el hoy fallecido presidente Hugo Chávez ordenó la repatriación de este recurso. En ese sentido, dijo que cinco años después quedan alrededor de 7.000 millones de dólares aunque resaltó que no hay certeza de ello porque no hay información oficial.
Por ello, González rechazó lo que califica como «empeño de activos y recursos naturales» a los rusos y chinos, en referencia al alquiler de la refinería de Amuay.
Pese a que el presidente de la Asamblea, Julio Borges, propuso al Ejecutivo la posibilidad de reestructurar la deuda de Venezuela hace semanas, la propuesta nunca fue escuchada por el Ejecutivo. El presidente Nicolás Maduro anunció este jueves el inicio de un refinanciamiento de los títulos de deuda a partir de este viernes 3 de noviembre y encargó al vicepresidente Tareck El Aissami, para reunirse con bancos de inversión y tenedores de bonos.
Para González, este anuncio demuestra que el gobierno «está en default y que no tiene plata».
Sobre la posibilidad de que lo apruebe la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), el diputado por la bancada opositora subrayó que esta instancia «es ilegal y el mundo no la reconoce».
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