Economía

Así ve Serrano Mancilla la economía venezolana

Alfredo Serrano Mancilla quien desde hace varios años hace recomendaciones económicas al Ejecutivo, ocupa ahora un cargo especial en el Comando de Abastecimiento Soberano, el cual busca disminuir la escasez crónica que existe en el país. 

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FOTO: ARCHIVO | AVN

El economista español Alfredo Serrano Mancilla es asesor económico de Bolivia, Ecuador y Venezuela. Desde el gobierno de Hugo Chávez sugiere ideas a miembros del gabinete económico, pero ahora, bajo la administración de Nicolás Maduro, será parte de la conducción oficial de las políticas públicas del país.

De acuerdo a la Gaceta Oficial Número  40.977 de fecha 30 de agosto, Serrano Mancilla integra el Comando de Abastecimiento Soberano, al ser uno de los miembros del Estado Mayor del vértice Construcción y consolidación de un nuevo sistema de distribución y comercialización.

Considera que la economía venezolana adolece de cuatro principales enfermedades: rentismo exportador petrolero, rentismo importador, sistema distributivo ineficiente-especulativo y estructura económica oligopólica, según el artículo Las tesis económicas del chavismo, publicado en la página web del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag).

Sostiene que «la guerra económica interna continua haciendo estragos. La emergencia económica obliga a acelerar las respuestas. La Agenda Económica Bolivariana (AEB) es la respuesta en construcción del chavismo para afrontar este gran desafío. Toca tomar un camino».

A su juicio es importante definir las estrategias económicas entre las tesis que existen actualmente en el seno del chavismo. Dice que de no hacerlo a tiempo, «se corre el riesgo de que cada quién tome su propia receta, lo que podría desencadenar un empate catastrófico, sin final feliz».

Entre sus principales lineamientos apunta lo siguiente:

1.- En este momento sería un error histórico pensar que se puede salir únicamente con medidas económicas sin atender la disputa política. El primer punto a resolver es el esquema distributivo, que sea óptimo tanto desde la perspectiva de la justicia como desde la misma eficacia económica.

2.- Se debe calcular cuál es el presupuesto de las Misiones Sociales y utilizar este valor como meta de la revolución tributaria. Los Comités Locales de Abastecimiento y Producción y las Tarjetas de Misiones Socialistas son respuestas rápidas para la emergencia adversa. Ambos instrumentos deben crecer hasta alcanzar a la población objetivo más vulnerable.

3.- Se debe continuar con los motores productivos, priorizando lo alimentario y la salud, pero sin descuidar las industrias básicas y estratégicas (sector minero, petroquímica) y el sector turístico. Destaca como fundamental definir bien las reglas del juego de las nuevas alianzas estratégicas para atraer inversiones privadas.

– Herramientas elementales –

Revolución tributaria: Es esencial implementar impuestos sobre el gran capital ocioso para los contribuyentes especiales que no destinan su patrimonio a actividades productivas. También hay que continuar con el sistema de facturación electrónica para ganar la batalla al fraude y a la elusión fiscal.

Política de estabilización de precios con abastecimiento soberano: Es necesario introducir el control de precios en origen (importación) para no comprar por encima de los precios de referencia internacional.

Nueva política de creación, captación y administración de divisas: Se requiere una divisa protegida que no esté sujeta al vaivén especulativo del mercado. Y en forma complementaria se debe perfeccionar el método de asignación de las divisas a través de un sistema de flotación administrada, ágil en su intercambio, atractivo para los ahorristas y disponible en cantidades pequeñas para el uso familiar, estableciendo cuotas por actividad económica. Hay que seguir buscando fuentes alternativas para atraer más divisas: arco minero, fomento de exportaciones no petroleras, nuevas emisiones de papeles indexados por el precio del petróleo.

Continuar ordenando la política de subsidios: Perfeccionar un esquema de precios de gasolina que permita sostener el nuevo sistema de subsidio directo a las personas a través de las Tarjetas de Misiones Socialistas. Hay que acabar con la era del subsidio al producto.

El sector financiero no puede dar la espalda a la economía real: No debe haber reservas bancarias excedentarias más allá del encaje legal. Las finanzas deben ser el combustible para los diferentes motores productivos.

Para conocer más sobre las tesis económicas del chavismo y las ideas de Serrano Mancilla, aquí.

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