Los más recientes datos del ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior indican que la venta de electricidad sumó 6,2 millones de dólares en el trimestre, contra 9,0 millones un año antes, lo que supone una baja de 31,23%.
Estas ventas a cargo de CVG Edelca representaron el 2,67% de todas las exportaciones venezolanas a Brasil, contra 3,40% un año antes.
Las exportaciones totales desde Venezuela a la principal economía latinoamericana sumaron $232 millones en el trimestre, contra $265,5 millones en el primer trimestre de 2014, lo que representa una caída del -12,58%.
Por su parte, las ventas de Brasil a Venezuela alcanzaron a $643 millones en el trimestre, una fuerte caída de 25,61% en comparación con los $864,9 millones en la primera parte de 2014, según los datos oficiales.
Las principales caídas –que ayudan a explicar cómo se agrava la escasez de productos básicos en Venezuela- se verifican en “Animales vivos y productos del reino animal”, con retroceso del 59% y en productos del reino vegetal 71%.
Estas compras de carnes, pollo y ganado en pie facturaron $210 millones, contra $514 millones en el primer trimestre de 2014.
Las compras de grasas y aceites de origen animal o vegetal desde Brasil retrocedieron 43%, según la misma base de datos.
La interconexión eléctrica entre Venezuela y Brasil opera desde 2001, cuando comenzó a abastecer en ese entonces el 80% del consumo de Roraima, un estado no interconectado con el resto del sistema eléctrico brasileño y que se abastecía solamente con costosas plantas térmicas.
Se trata de una línea de 508 kilómetros en el lado venezolano que provee 200 megavatios a Brasil. Fue trazada con una inversión de 185 millones, de los cuales 130 fueron provistos por Venezuela y $55 millones por el gobierno brasileño.
Con su contaminación visual, atraviesa paisajes de la Gran Sabana y en su momento fue cuestionada por organizaciones ecologistas y también por indígenas de la etnia Pemón, que reclamaban pagos de derecho de paso por sus territorios.]]>