Economía

¿Cuánto aguanta Lorenzo?

Lorenzo, como lo llaman los 30.000 trabajadores de Empresas Polar, no rehúye el combate. Es un competidor nato. En 2007, a los 42 años, corrió Nueva York en un tiempo de 3 horas, 45 minutos y 20 segundos. Un logro como éste requiere resistencia, pero sobretodo disciplina y constancia para alcanzar la meta. Con las mismas fortalezas enfrenta un round más en la arena de la diatriba política.

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Texto: Juan Toro | Foto: MIGUEL GUTIERREZ | EFE

Lorenzo Mendoza, como lo llamamos quienes lo vemos desde la barrera, salió ileso de feroces ataques verbales del presidente Chávez, como el del 6 de marzo de 2009:

“Mendoza se pone bravo y arremete, él cree que está más allá de las leyes. No camarada. Lo que voy a hacer es expropiarle. Si él sigue agrediendo al gobierno, irrespetando este país, por más Mendoza que sea, por más sangre azul que sea le voy a quitar toda la Polar chico, toda. Te la expropio mano, no tengo problema contigo Mendoza… Para que me llames tirano con más ganas, si sigues mamando gallo, yo te voy a quitar todita la Polar, hasta la última planta que tienes, ya te lo estoy advirtiendo Mendoza!”.

Lorenzo, como Chávez, conoce la geografía e idiosincrasia del pueblo venezolano, pocos personajes públicos pueden hacer alarde de esto. La conexión emocional que logra Mendoza, como lo llaman los funcionarios chavistas, con el pueblo venezolano es similar a la del fallecido mandatario. Es un hombre que está en la lista de las 200 fortunas más grandes del mundo, que es amigo del Rey de España y que no sólo recorre cada planta, sino que hace contacto directo con sus trabajadores, quien a fin de cuentas “son el pueblo”.

– Lo que se hereda, no se hurta –

Su liderazgo y conexión con los trabajadores es una herencia paterna. Cuentan en la Polar los trabajadores más antiguos, anécdotas que reflejan la estrecha relación que lograba Lorenzo Mendoza Quintero con sus trabajadores, incluso dicen que el busto de Lorenzo Padre es un homenaje de quienes laboraban en las plantas. Una vez escuché, que sin protocolo se montaba en los camiones y “hacia la ruta” como un obrero más.

Ese don de conexión que heredó de sus ancestros, lo ha cultivado y lo acompaña con la disciplina y constancia de los maratonistas. Esas tres fortalezas: liderazgo, disciplina y constancia han sido determinantes en su estrategia de supervivencia empresarial. El 18 Mayo de 2015, un comunicado de Empresas Polar señalaba que el gobierno los había inspeccionado 165 veces y habían debido responder más de 1.500 requerimientos de información. El director general de la empresa dio una declaración que refleja la disciplina y constancia dictadas por el liderazgo de Lorenzo Mendoza:

“En cada procedimiento la empresa ha consignado toda la información solicitada y los inspectores han constatado que la producción y distribución se realizan a la máxima capacidad disponible. A pesar de esa situación, continuaremos entregando la misma información el mismo número de veces que nos la pidan”.

Esa ha sido una constante no sólo en 2015, sino que se mantiene. El gobierno inspecciona, requiere información y la empresa disciplinadamente responde. Pero, el jueves 27 de octubre de 2016 los procedimientos fueron más allá y esta vez fue la policía política la que rodea la sede y horas más tarde la casa de los Mendoza Pulido. Lorenzo respondió. Los trabajadores (¿la voz del pueblo?) fueron el coro que ratificaba su rechazo al acoso.

– Lorenzo presidente –

Los rumores de una posible incursión política han estado presentes desde hace unos años. Incluso, se habló de estudios de opinión pública y reuniones con asesores colombianos para evaluar la posibilidad. Chávez y Maduro lo han retado a que se lance a candidato, pero el hombre insiste en que él está para dirigir empresas Polar y continuar produciendo en el país.

Sin embargo, hay días, como los de esta semana, que los rumores son más alimentados por los deseos que por hechos. Los deseos son los de gente de los barrios, clase media y por supuesto empresarios. Cada sector tiene una razón para verlo como esperanza, los pobres lo ven como un hombre de éxito, conectado con ellos y con la fuerza para sacar el país de la crisis. La clase media como “su presidente ideal”, bien parecido, deportista, de buena familia y por supuesto exitoso. Para los empresarios es un hombre con conocimientos, formación y liderazgo que podría diseñar y ejecutar la estrategia de salvación y trabajar la recuperación del país. Pero Lorenzo se niega. ¿Hasta cuándo aguantará el pedido?

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