El superávit es producto de un descenso de 14,2% en las exportaciones totales, que se ubicaron en $19.057 millones, y de una baja de 1,4% en las importaciones de bienes, que se situaron en $12.246 millones.
Las exportaciones totales se vieron afectadas fundamentalmente, por el descenso de las ventas petroleras, comportamiento que obedeció a la baja de 16,5% en el precio promedio de la cesta venezolana, en tanto los volúmenes exportados aumentaron 3%.
La contracción en las importaciones de bienes, al cierre del trimestre, estuvo influenciada por la baja de 12,3% en las compras del sector privado. Las del sector público mostraron una variación positiva de 16,5%, apuntaladas por las no petroleras, en particular de alimentos; sustancias y productos químicos; y productos elaborados de metal, que representan el 55% de las compras públicas, en tanto que se observaron descensos en las petroleras, en las categorías sustancias químicas básicas, gasóleos, destilados y lubricantes, señala el comunicado.
La cuenta corriente de la balanza de pagos cerró el tercer trimestre con un saldo positivo de $899 millones y las reservas internacionales netas del país alcanzaron un nivel de $20.890 millones al cierre del tercer trimestre.
Afirma el comunicado que el déficit de la cuenta financiera se redujo significativamente a $568 millones, inferior en 85,9% al déficit de $4.031 millones en igual período del año anterior. Este resultado es producto del incremento de los activos netos del sector público, asociados a mayores cuentas por cobrar del gobierno, derivadas de los acuerdos de cooperación energética, los depósitos de Fonden y los títulos de deuda por parte de la Oficina Nacional del Tesoro, además de la influencia que ejercieron los activos del sector privado en forma de depósitos.
Los pasivos descendieron por efecto de la amortización prevista en los programas de financiamiento del Fondo Conjunto Chino‐Venezolano y los derivados de acuerdos bilaterales del sector público; en tanto que los privados registraron reducciones en sus cuentas por pagar a proveedores externos y en los depósitos locales a favor de las líneas aéreas.
La posición acreedora neta del país con el exterior, en el tercer trimestre, tuvo un crecimiento anualizado de 6,5%, situándose en $155.667 millones.]]>
