Energía y Petróleo

La integración es la base para la energía segura en América Latina, según la AIE

El equilibrio y la integración son las bases que se ven en el largo plazo para el desarrollo de matrices energéticas seguras en América Latina y el resto del mundo, afirmó hoy en Chile María van der Hoeven, directora de la Agencia Internacional de Energía (AIE).

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Van der Hoeven participó en Santiago de Chile en el seminario «Energía 2050» y dio a conocer el panorama energético mundial 2014 de la AIE.
La ejecutiva señaló que el actual escenario apunta al desarrollo en los países de distintas regiones de una variedad de fuentes energéticas, y no la dependencia exclusiva del petróleo u otros combustibles fósiles como el carbón, para satisfacer la actual demanda de energía, que ha crecido un tercio desde el año 2000, reseñó la agencia EFE.
Precisó que el gas va tener un papel importante en el reemplazo del carbón, cuya demanda seguiría vinculada al crecimiento de países como China y principalmente India, que tomaría un papel más importante en la demanda energética.
«En China la demanda de carbón va seguir siendo importante pese al menor crecimiento de su economía e India presentará un consumo relevante», señaló Van der Hoeven.
Lo contrario ocurriría en los países de la OCDE y Estados Unidos que han experimentado una paulatina reducción de este combustible, en gran parte por sus efectos contaminantes.
Según la directora de la AIE, los países deberían enfocarse en «descarbonizar» el sector de la electricidad, sobre la base de que el sector de la Energía «es la mayor fuente de emisiones de gases de efecto invernadero», y supone también la mayor oportunidad para contribuir al ahorro energético y lograr una mayor eficiencia.
Además planteó que hay que optar por fuentes de abastecimiento bajas en carbono, como las energías renovables.
Resaltó la importancia de la hidroelectricidad, de la que América Latina dispone en abundancia, así como de otras energías renovables no convencionales que han ido progresivamente disminuyendo su costo gracias a las nuevas tecnologías.
En el desarrollo de proyectos, recalcó la importancia de hacer partícipes a las comunidades involucradas como una forma de generar sinergias y evitar resistencias a las nuevas iniciativas energéticas.
Sobre las perspectivas del petróleo dijo que estas son inestables, particularmente por la zona geopolítica donde se encuentran las mayores reservas mundiales.
En cuanto la seguridad del abastecimiento, Van der Hoeven sostuvo que la tendencia mundial apunta hacia la interconexión de las redes, no solo en los países sino en las regiones completas.
A su juicio, América Latina tiene una gran oportunidad que explorar en esta área y el desarrollo del sector debería tender a la integración de sus redes eléctricas para dar mayor sustentabilidad al sistema.
«La integración regional es parte de la respuesta al equilibrio del sistema eléctrico», aseveró y sostuvo que «para América Latina sería un modelo muy deseable».
También recalcó que ello contribuiría una rebaja en los costos de la energía que han tenido una tendencia ascendente durante los últimos años, salvo el período reciente por la baja que ha experimentado el precio del petróleo.
De hecho, los precios del crudo han descendido desde junio alrededor de un 40 por ciento a su nivel más bajo desde 2010.
La caída pone en peligro la transición a las energías renovables, pero también crea buenas condiciones para subir el costo de quemar combustibles fósiles, dijo Van der Hoeven.]]>

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