Empresas y Negocios

La planta de Ford Motors vuelve a paralizarse este 4 de mayo

La planta de la ensambladora de vehículos Ford Motors de Venezuela, ubicada en la zona industrial de Valencia, volverá a paralizarse desde este lunes 4 de mayo y hasta el 18 de este mes, cuando regresarían a ensamblar 400 unidades que restan antes de que se acabe la materia prima con la que cuentan.

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Por Carmen Fernández

Trabajadores de la empresa se muestran preocupados porque se trata de la segunda paralización de sus labores en lo que va de año. La primera ocurrió entre el 2 y el 13 de abril. Ya las vacaciones colectivas que iniciaron en diciembre de 2014 se habían extendido hasta marzo.
Durante este último tiempo ensamblaron algunos vehículos de manera intermitente aunque el plan era producir 20 unidades diarias, aseguraron empleados de la Ford, pero la materia prima es insuficiente y desconocen cuándo llegará al país la que requieren para reanudar de forma fluida la producción.
En esta empresa hay 2.256 trabajadores en nómina fija, más un grupo de tercerizados, indicaron algunos empleados consultados que además temen por su futuro porque la compañía solicitó a la Inspectoría del Trabajo Pipo Arteaga de Valencia la calificación de despido para 256 personas, a través de un laudo arbitral que está en curso.
Desde hace un par de semanas la ensambladora General Motors, también con sede en la zona industrial de Valencia, ha notificado a 466 trabajadores de la medida,  a través de un laudo arbitral, y a partir de esta semana han sido convocados a un hotel en Naguanagua para que retiren sus cheques respectivos.
Este domingo, el vicepresidente nacional de Acción Democrática, Antonio Ecarri Bolívar, declaró que no ha habido sinceridad de parte del gobierno, las empresas y los sindicatos con los trabajadores de la industria automotriz, porque no han explicado claramente las dimensiones de esta crisis y que podría significar que unos 100.000 empleados directos e indirectos de la grande, mediana y pequeña empresa del estado Carabobo, queden desempleados.
Ecarri afirmó que los sindicatos deberían darle un ultimátum al Ejecutivo nacional para que diga la verdad sobre el monto de divisas que el Estado está dispuesto a suministrar para cancelar las deudas que tienen las empresas automotrices con sus proveedores a nivel internacional.
Destacó que las ensambladoras están llamando a los trabajadores por grupos para que laboren a tiempo determinado, sin embargo, muchos de estos son devueltos a sus hogares apenas llegan a la planta y muchas veces transcurren días sin que las máquinas de producción sean encendidas.
Ecarri dijo que en el caso de Ford Motors no hay garantías de que pueda reactivarse, debido a que no cuentan con los insumos necesarios para la producción. Adicionalmente sus proveedores internacionales no les despachan “a menos que les paguen en dólares y por anticipado, debido a la inmensa deuda que tienen, no por ser mal pagadores sino porque el gobierno no les entregan las divisas necesarias para cumplir con sus compromisos”.
El dirigente partidista añadió que General Motors podría paralizarse en julio y Chrysler ya paralizó las líneas de producción de carrocería y pintura.
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