Oliveros: Economía de Venezuela está en una etapa de "chatarrización"

El país lleva cuatro años de recesión, alta inflación y escasez y el 2017 tiene ya las mismas características de una economía que entró en una crisis que demanda mayor resistencia, resalta el director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros.
«Esta es una crisis que va a terminar, pero no mañana, con lo cual es importante establecer una estrategia de resistencia para el corto, mediano y largo plazo, la cual debe tener como centro la protección del patrimonio», indicó durante el videochat organizado por El Estímulo y su marca de economía El Interés.
Dice que aunque 2017 cuenta con las mismas calamidades económicas que muestra desde 2014, este año se diferencia por la profundidad de la crisis. «Esto hace que el grado de aguante de las empresas y de las personas sea menor, porque esta es una carrera de resistencia que está llegando a un límite».
Esa profundidad de la crisis se observa en que Venezuela se ha quedado en la cola de la modernidad empresarial, en el rezago tecnológico, los servicios cada vez de menor calidad y en una población más empobrecida. «Es decir, estamos en una especie de chatarrización de la economía y esto nos va a pasar factura».
Indicó Oliveros que desde 2014 a 2016 la economía ha caído 26% y espera en 2017 una disminución de 10%, con una fuerte baja de 10% del sector petrolero y de 16% del consumo privado.
Recalcó que durante el primer semestre de este año, el volumen de ventas ha caído significativamente en varios sectores, entre ellos, el de bebidas alcohólicas, vestido y calzado y entretenimiento con bajas de 60%, así como 30% en el área de los embutidos, 40% en carnes y pollo.
La inflación la proyecta en 1.200% para cierre de 2017, lo que significa una caída del poder adquisitivo de 40%. Esto genera mayor empobrecimiento y la imposibilidad de acceder a la canasta alimentaria. A su juicio, el empeoramiento de estos indicadores, genera efectos adversos sociales y políticos.
Desde el punto de vista de las finanzas del gobierno, el director de Ecoanalítica calcula una contracción vía Seniat de 48%, «lo que refleja el grave problema de la economía venezolana de recesión e inflación» y que «coloca el flujo de caja del gobierno en una situación más complicada y más dependiente de la emisión de dinero del Banco Central de Venezuela. La caída del gasto del gobierno central y de sus empresas relacionadas, la hace cada vez más dependiente del BCV».
Para este año, Oliveros sostiene que Venezuela tiene dos temas claves en el horizonte: Lo que hará la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) en materia económica y los pagos de la deuda pública externa que suman 4.200 millones de dólares para el último trimestre.
«En economía veremos más de lo mismo en la ANC, profundización de la política de controles a pesar de que en estos dos últimos años el gobierno permitió el alza de los precios y la importación a dólar libre. Seguiremos viendo mercados negros, escasez, colas, inflación y bachaqueo. Además de presiones en el mercado cambiario paralelo, ya que continuará el resguardo en un activo tan importante como lo es el dólar».
Considera que la crisis política no se resolverá tampoco en lo inmediato y la prioridad del gobierno está en persistir y mantenerse en el poder.
Con respecto al pago de la deuda, sostiene que existe mayor probabilidad de que tanto la República como Pdvsa cancelen sus compromisos, por lo que prevé nuevos recortes en las importaciones en los próximos meses.
Si la administración de Donald Trump decide ejecutar sanciones económicas y tocan finalmente al sector petrolero, Oliveros señala que tendrá efectos en el corto plazo en términos del flujo de caja y pondría obviamente presión a la economía. No obstante, «el gobierno parece estarse preparando y ha estado aumentando las exportaciones petroleras a Rusia y Asia».
En sus consejos para el sector empresarial para sortear la crisis económica, el director de Ecoanalítica recomienda la rotación de inventarios, hacer un seguimiento periódico de los precios, mantener la atención al personal con  bonificaciones especiales y aumento salarial, exportar y tratar de ofrecer servicios en divisas.
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