El despacho arguye que la semana estuvo caracterizada por la volatilidad: «Los precios petroleros continuaron bajando afectados por la perspectiva de una desaceleración de la demanda global durante los próximos meses y una mayor producción en algunos países», explica el reporte publicado en la página web.
El resultado registrado es el más bajo desde la primera semana de mayo de 2009.
La cesta OPEP terminó la semana en $56,88. El precio de referencia del barril WTI promedió en $56,05 y el crudo de Brent en $60,67.
Los precios internacionales estuvieron marcados esta semana por la disminución en las expectativas de demanda y los datos sobre las reservas de crudo de Estados Unidos, que disminuyeron menos de lo previsto por los analistas.]]>