El informe señala que en enero pasado el precio de los alimento tuvo un alza intermensual de 2,1% respecto a los registros de diciembre 2016, un repunte que estuvo influenciado por el alza de las cotizaciones del azúcar y “aumentos drásticos de los precios de exportación tanto de los cereales como de los aceites vegetales”.
En este sentido, la FAO señala que el índice de precio del azúcar se disparó 9,9% en enero, debido en buena medida a las expectativas de reducción de la producción para la zafra 2016–2017 que está en pleno proceso, especialmente en Brasil (el mayor productor y exportador mundial del rubro), India y Tailandia.
Los cereales subieron en enero 3,4% y llevó el índice a 147 puntos, el mayor precio en seis meses. Respecto al trigo, el informe señala que el alza se debió al temor de que las condiciones atmosféricas desfavorables perjudiquen las cosechas de 2017 y a las noticias sobre la reducción de la zona de producción en Estados Unidos.
El maíz, en tanto, subió por una mayor demanda y las negativas perspectivas para las cosechas en América del Sur. En este sentido es bueno recordar que según el gremio agricultor venezolano (Fedeagro), la pasada cosecha de maíz apenas cubrió 25% de la demanda, y para la próxima temporada no se espera que mejore la situación debido a la nula disponibilidad de semillas e insumos.
En cuanto al arroz, la menor disponibilidad de grano proveniente de la India debido a mayores compras por parte del gobierno de ese país afectó al alza las cotizaciones.
Los aceites vegetales también subieron en enero 1,8% y ubicó el índice FAO en 186,3 puntos. La lenta recuperación de la producción de aceite de palma y alza de importaciones han provocado que este rubro alcance su cotización más alto en 30 meses, de acuerdo con las estadísticas del organismo.
En lo que respecta a los lácteos y carnes, el indicador se mantuvo casi sin alteraciones. Según el informe, el comercio de leche se mantuvo en niveles moderados, contrariamente a lo ocurrido en el segundo semestre de 2016, cuando los precios subieron repentinamente 50%.
Sobre la carne, la FAO señala que el incremento de las cotizaciones de la carne de bovino por la disminución de las exportaciones de Australia fue contrarrestado por la caída de la carne de ovino, así como una pequeña baja de la carne de aves y porcino.
