Las multinacionales brasileñas JBS y BRF, dos de las mayores procesadoras de carne del mundo, perdieron en un mes 5.471 millones de reales (unos $1.735 millones) de su valor de mercado tras la operación policial que desarticuló una red que adulteraba carne, según un estudio divulgado este lunes.
JBS perdió 15,35% de su valor de mercado desde el pasado 17 de marzo, cuando la Policía Federal brasileña lanzó la operación «Carne débil», apuntó la consultora especializada Economática.
La empresa, que valía 32.600 millones de reales (unos 10.350 millones de dólares) antes de la operación, cerró la sesión bursátil del pasado jueves con un valor calculado en 27.600 millones de reales (cerca de 8.760 millones de dólares).
Por su parte, BRF perdió 1,45% de su valor de mercado, pasando de valer 31.900 millones de reales (10.125 millones de dólares) a 31.500 millones de reales (10.000 millones de dólares), según el mismo estudio.
La caída del valor de mercado de las dos compañías se produjo a pesar de que las exportaciones de carne brasileña aumentaron en el mes de marzo 9% en comparación con el mismo mes de 2016, con una facturación de 1.340 millones de dólares entre carne bovina, pollo y cerdo.
La operación «Carne débil» salpicó a importantes empresas del sector, como JBS y BRF, y puso bajo sospecha a 21 plantas de esas y otras compañías a las que se les suspendió temporalmente las licencias de exportación.
El escándalo surgió a raíz del descubrimiento de una mafia de productores que sobornaban a fiscales sanitarios para vender carnes en mal estado o adulteradas con productos químicos, algo que para la Policía puso «en riesgo la salud de los consumidores y solo buscó aumentar los beneficios» de los empresarios.
La Policía también indicó que fue posible verificar que muchos de los funcionarios corruptos se valían de sus familiares para lavar el dinero que recibían de los empresarios implicados al poseer un patrimonio incompatible con sus rentas.
La Policía denunció por el caso a 63 personas ante la Fiscalía, que responderán por delitos de tráfico de influencias, corrupción, empleo de proceso prohibido o de sustancias no permitidas, falsedad, organización criminal, malversación, entre otros, señaló la Policía.
La operación generó una crisis internacional, razón por la cual una veintena de países dispuso distintas restricciones a las carnes de Brasil.
En la mayoría de los casos, los embargos se limitaron a las 21 plantas cárnicas investigadas, aunque muchos de esos países, entre los que se encuentran algunos de los clientes más importantes de Brasil como Hong Kong, China, Chile o Egipto, ya levantaron dichas medidas.
No obstante, el ministro de Agricultura de Brasil, Blairo Maggi, realizará una gira en mayo por China, Hong Kong, Emiratos Árabes, Arabia Saudí y Europa para «intensificar las negociaciones con los importadores de carne brasileña».
Brasil es el mayor exportador mundial de carnes bovinas y de pollo y el cuarto en el apartado de la de cerdo, y según cálculos del propio Gobierno el escándalo puede costarle 10% de su mercado externo y pérdidas cercanas a 1.500 millones de dólares anuales.]]>
Vender otra vez electricidad a Brasil, como ofrece Nicolás Maduro en su reciente visita a Brasilia, es posible a pesar de los problemas en Venezuela. Lo que no puede hacer su régimen es enviar esa carga eléctrica al centro y occidente de Venezuela donde los apagones son constantes. Incluso, ni siquiera a Caracas, ciudad intocable, que día a día siente más el descalabro del sistema eléctrico.
Los inversores creen que la confianza en los activos brasileños se debilitarán, una confianza que se ha visto afectada por el temor a que Lula aumente el gasto público y deshaga las reformas más favorables para el mercado
El proceso podría aportar al menos $11.000 millones al estado brasileño. Eletrobras posee cerca de la mitad de las líneas de transmisión y subestaciones del país, con una extensión sumada de más de 70.000 kilómetros de tendidos eléctricos y una capacidad instalada de generación de en torno a los 50.000 megavatios (MW).
