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Fedecámaras y su plan de vacunación: ¿fantasía o realidad?

Fedecamaras lanzó una propuesta que en cualquier otro país podría parecer descabellada, pero que en el caso venezolano al menos se debe estudiar: la empresa privada quiere traer las vacunas para sus trabajadores y encargarse de toda la logística. En este momento le toca a Maduro decidir si lo permitirá o no

Fedecámaras
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Fedecámaras mostró al país un plan complementario de vacunación con el que la institución asegura logrará administrar en un espacio de un año 6 millones de dosis de vacuna contra la covid-19. De lograrlo, entonces la empresa privada podría vacunar entre a entre 3 y 6 millones de sus trabajadores.

La logística, los tiempos, la bioseguridad y los mecanismos se detallan en un plan que Fedecámaras logró engranar con federaciones y laboratorios médicos. En la mesa del Gobierno de Maduro ya se encuentra la propuesta, ahora queda de parte del Ejecutivo Nacional tomar una decisión.

¿Fedecámaras venderá las vacunas?

No. Al menos eso quiso recalcar el presidente de la organización gremial, Ricardo Cussano: «No es un proyecto de comercialización, es un proyecto de apoyo al país. Aquí no hay ningún actor involucrado en la cadena que aspire generar riquezas con esto».

Según Cussano, lo que se busca es que las empresas privadas, si así lo desean, logren comprar las vacunas para inmunizar a sus empleados, así como a los familiares de sus empleados.

«El trabajador no deberá pagar nada por la vacuna. La empresa asume el costo de esta inmunización», señaló.

vacuna Italia
EFE/ Miguel Gutiérrez

¿Quiénes serán vacunados?

Podrían ser vacunados los trabajadores de las empresas privadas que decidan entrar en el plan. Estas empresas privadas no deben pertenecer necesariamente a Fedecámaras, solo deben tributar y estar legalizadas.

Además, los familiares de los trabajadores también podrían ser vacunados, si así lo decide la empresa.

La propuesta también contempla que 20% de las vacunas que se adquieran serán destinadas a las personas que el Estado venezolano decida.

El proceso de vacunación iniciaría según los estándares de la Organización Mundial de la Salud. Primero serían vacunados los integrantes del sector salud y mayores de 55 años, porteriormente los demás.

¿Qué podría ganar el Gobierno de Maduro con esto?

La propuesta es aun solo eso: una propuesta. Para ejecutarse, debe contar con la aprobación del Ejecutivo Nacional, por lo que el Gobierno de Maduro tendrá la última palabra.

Este proyecto ambicioso que plantea Fedecámaras intenta conseguir el apoyo del gobierno al ofrecer que 20% de las vacunas que se traigan serán administradas a las personas que el Estado crea conveniente, es decir, a una lista que envíe el Ministerio de Salud.

Por otro lado, Fedecámaras no pretende comprar las dosis de vacunas que el Gobierno Nacional tenga asignadas, sino apoyar en la vacunación de un sector de la población (trabajadores de sector formal privado). Esto podría quitarle un peso de encima al Gobierno en la compra de vacunas para toda la población.

Coronavirus
AFP

Comprar las vacunas, el reto

Hasta el momento, los gobiernos del mundo son los responsables de comprar las vacunas para inmunizar a su población. La empresa privada aun no adquiere o no tiene acceso a las vacunas para comercializarlas, aunque Fedecámaras asegura que su motivación no es lucrarse sino apoyar el proceso en un país que atraviesa una crisis económica y humanitaria.

De hecho, Venezuela se encuentra entre los últimos países del mundo en cuanto a vacunas adquiridas, por lo que el plan de Fedecámaras puede que no parezca tan descabellado. Sin embargo, los laboratorios todavía no tienen autorización para vender a empresas privadas. Ante esto, Cussano señaló que elaboraron este plan para que pueda ejecutarse apenas exista esta posibilidad o para trabajar junto al Ejecutivo para que pueda servir de enlace para concretar las compras del medicamento.

«Hemos hablado con laboratorios internacionales, incluso nos hemos reunido con representantes de la embajada de Rusia (país que produce la vacuna Sputnik)», señaló.

 ¿Cuáles serían?

Solo las vacunas aprobadas por el gobierno nacional, que en este caso -de momento- son dos: la Sputnik (rusa) y la Sipnofarm (china).

«Queremos resaltar que la idea es trabajar en conjunto y cumplir con los reglamentos establecidos por el Ministerio de Salud», señaló el presidente de Fedecámaras.

¿Quién trabajará en esto?

Cussano señaló que Fedecámaras no puede ni pretende asumir este proceso de vacunación de forma unilateral: «Hay tres dimensiones o tres pilares para la vacunación».

La propuesta plantea trabajar con instituciones como las distintas iglesias, academias y el sector público. También el proceso será ejecutado y vigilado por la empresa Meditron y por organizaciones médicas.

Por último, Fedecámaras busca financiamiento de organizaciones como la CAF para acelerar el proceso, aunque aseguró que en caso de no conseguirlo el proyecto también se realizaría, aunque podría ser más lento.

La logística del plan

Lo primero que necesita Fedecámaras para llevar a cabo su plan de vacunación es la aprobación del Gobierno de Maduro. En el supuesto de conseguirlo, el segundo paso es lograr comprar las vacunas a Rusia o China, los únicos dos países que hasta el momento producen las vacunas autorizadas por el Estado venezolano.

En caso de conseguir la aprobación y venta de la vacuna, entonces empezaría la logística en el terreno. En el papel, Fedecámaras plantea que tardará cinco meses en montar la infraestructura para toda la cadena de frío que logre asegurar el mantenimiento de la vacuna por un periodo de, al menos, 8 días.

Tras asegurar la cadena de frío,  se empezará a traer las vacunas. El plan es traer cada 15 días una carga de 750 mil dosis, con lo que en 4 meses se lograría vacunar entre 3 y 6 millones de personas.

La vacuna se pondrá en 100 clínicas privadas de país, las cuales no fueron especificadas aun por Fedecámaras.

¿Qué necesita Fedecámaras del gobierno?

Que les garanticen algunos servicios públicos, como electricidad para mantener las cadenas de frío, y gasolina para el traslado.

También piden salvoconductos para que el personal se pueda mover por todo el país y distribuir la vacuna y seguridad para evitar que alguien pretenda robar los cargamentos y lucrarse con ellos.

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