La creatividad es necesaria para darle chispa a nuestras vidas sexuales, pero a veces algunas personas se ponen muy creativas y los resultados son dignos de aparecer en un episodio de 1000 maneras de morir. Y aunque en ocasiones te puedes aburrir con las típicas técnicas de masturbación, lo recomendable es irse por el camino viejo y evitar este tipo de accidentes. Por ello, antes de que se te ocurra insertar tu pene en un sitio donde no pertenece, aquí te traemos siete lugares donde nunca lo debes colocar basándonos en casos recientes.
En una botella de plástico
Comenzando el año, a un hombre hondureño de 50 años le amputaron su pene luego de que se le quedara atascado en una botella de plástico que estaba utilizando como juguete sexual. Cuatro días después fue al hospital de Tegucigalpa, donde el Dr. Denis Chirinos le diagnosticó necrosis y no hubo más opción que cortarlo. Ouch.
Un cilindro de acero
Un hombre en Granada llamó a emergencias después de meter a su amiguito en un cilindro de acero de dos centímetros de diámetro y ocho de longitud. Al principio, los doctores no pudieron operarlo porque al introducirlo tuvo una fuerte erección y, sin tiempo de reaccionar, el cilindro le estranguló el órgano sexual de tal forma que le produjo una gran inflamación que, a su vez, impedía que bajase la erección, por lo tanto era imposible sacarlo. Luego de dos horas de tensión, finalmente los bomberos pudieron extraer el cilindro.
Un frasco de salsa para pasta
Un hombre en Australia fue encontrado por la policía parcialmente vestido con su pene metido en un frasco de salsa para pasta.
Un anillo de bodas
El año pasado un hombre sudafricano no podía sacare su anillo de bodas de su pene, el cual terminó allí por razones eróticas basadas en las recomendaciones de sus amigos. Los doctores trataron de extraerlo de la manera usual, pero luego tuvieron que cortarlo con una sierra ortopédica.
Con amigos así…
Un banco de metal
Más de una docena de policías ayudaron a un hombre en Hong Kong quien tenía su pene atrapado en un hoyo de un banco de metal. El hombre le contó a la policía que pensó que era divertido tener sexo con un banco. Pero resultó que no era tan divertido como pensaba.
Un tostador
En 2013, un hombre tuvo que llamar a los bomberos para que le sacaran su pene de un tostador. Así de caliente estaba para que se le ocurriera semejante fantasía.
Una prostituta
En 2016, un hombre de avanzada edad murió mientras tenía sexo con una prostituta. Realmente, no es una mala manera de morir, pero sí fue traumático para la mujer porque cuando los paramédicos llegaron, sacaron al hombre de la vivienda en una camilla y la prostituta iba encima de él tapada con una sábana porque se había quedado enganchada.
Esto se debe al «síndrome del pene cautivo», el cual ocurre cuando los músculos del piso pélvico de la vagina se contraen durante el orgasmo ocasionando que el pene se inflame siendo imposible para el hombre retirarlo mientras se mantenga la erección.]]>
