Stereolux devora la manzana de Eva

Napoleón Guevara es el lead vocal de la banda de rock caraqueña Stereolux. De mediana estatura, tez color moreno claro, y la sesera coronada por una greña breve y dispersa, Guevara es el frontman de este quinteto que apuesta por hacer rock en la Venezuela del colapso.

Stereolux es una agrupación formada a finales del año 2015 por los guitarristas Abraham Herrera y Luis Gerardo Moreno, el vocalista Napoleón Guevara, el bajista Jorge Cañizalez y baterista Daniel Zapata. Y como ocurre cada día, Abraham Herrera se fue del país en 2017 y en su lugar ingresó Claudio Sesti.

El sonido de Stereolux pendula del hard rock al pop, pasando por el punk rock. ¿Influencias marcadas? Led Zeppelin, Deep Purple, Kiss, Guns & Roses, Velvet Revolver, Green Day, y bandas más contemporáneas como Monster Truck, Foo Figthers, Black Stones Cherry, The Strokes, entre otras. El rock latinoamericano ha sazonado las partituras de estos chicos, con grupos como Soda Stereo y Enanitos Verdes.

Los dos últimos fueron para la composición y grabación de temas. Fusionar influencias con un concepto que empaquete percepción y vivencias de estos cinco jóvenes fue la meta. Los Stereolux dicen sentir “en el arte una forma creativa, alternativa y apasionada de expresarse”.

A principios de 2018 estuvo listo el primer EP titulado Stereolux, preámbulo perfecto de su primer larga duración, en estos momentos en pre producción. Para finales de 2018 debería estar disponible. “La puesta en escena de la banda suele ser bastante cargada y llena de energía, lo cual los hizo merecedores del 2do lugar del primer Festival Caracas Rock and Roll celebrado en Teatrex el Bosque y Hard Rock Café el pasado 16 de noviembre de 2017”, se lee en un despacho de prensa de la agrupación.

Hace poco lanzaron al ruedo su primer sencillo promocional, titulado de modo muy bíblico “Eva”. Guevara cuenta que la letra le pertenece, pero la música fue compuesta por el guitarrista de la banda. Apenas sobre la veintena, el joven compositor ya acumula estudios de teoría y solfeo, armonía e ingeniería de sonido. Dice que descubrió que algo había en él de bueno para el canto muy tempranamente en el coro de su colegio.

Relata que su padre es médico, “pero siempre ha sido un tipo muy interesado en las artes”, por lo cual a través de él le llegan influencias del rock viejo, con bandas como Led Zeppelin o Queen. Y la alineación de Stereolux es la clásica de una banda de este estilo: dos guitarras, bajo, batería y un lead vocal. A Guevara no le gusta tanto leer como el cine, y acá su autor predilecto –nos revela- es Tarantino. “Especialmente Django Unchained”, explica. Y apunta otras preferencias.

–¿New York o París?
-New York
–¿Qué es lo primero que ves en una mujer?
-Los ojos
–¿Si fueras un auto, qué marca sería?
-Tesla
–¿Cuál es tu postre preferido?
-Fondant de chocolate
–¿Caracas o Magallanes?
-Magallanes

Amor de hembra
Eva existe, pero es un nombre ficticio, confiesa. Se trata de una chica que ha traído a Guevara por la calle de la amargura. Uno lo ve en la letra del tema, ahíto de gritos clásicos en la gradería de varones, estilo “no puedo vivir sin ti”. El artista va un poco más allá en su historia: “Es una chica de estas que te hacen sentir que hay algo, pero cuando te acercas lo que encuentras es frío, entonces sientes que están jugando contigo”, se le congela un poco la mirada parda.

Autor de las líricas, como ya se dijo, Guevara expone que la quintaesencia de la historia contenida en “Eva” (parte de un EP de dos canciones, que luego será vertido en una placa de diez rolas) es la línea que dice: “dime si te quedas, o me voy”. C’est la vie. Así suelen ser las cosas en este “valle de eterno verano”, como dice la gente de Desorden Público en torno a Caracas. “Eva” es una canción melódica pero muy agresiva, sazonada acá y allá con guitarras estridentes y malditas.

Stereolux apuesta por hacer rock and roll en la Venezuela de la debacle, donde vemos fotografías dolorosas de una diáspora que cada vez se depaupera más. Guevara dice que la estrategia es hacerse de un lugar acá en Caracas y más adelante pensar en América Latina: “México estaría bien, allá están bandas como Los Mesoneros, o La Vida Boheme. También pienso en Miami o tal vez Nueva York”. El futuro está en otra parte.

Pero eso ya será más adelante. El joven vocalista apunta que siente que ya ha estudiado bastante. No descarta seguir estudiando música, producción, etcétera, pero va a la almendra de su lucha: “Yo quiero hacerme un lugar en el negocio. Lamentablemente, esta es una industria en la cual a cierta edad ya no tienes cabida. Por lo tanto, mi meta no es tanto seguir estudiando como entrar a hacer discos, conciertos, y esas cosas”.

La oveja negra
Tiene una hermana, quien también estudia medicina, como su padre. “Yo soy algo así como la oveja negra”, sonríe con malicia. Consultamos al músico sobre el eventual interés por una carrera universitaria en este mundo tan complicado: “Si fuera a una universidad tal vez estudiaría Educación; admiro mucho a mis maestros, y me parece un arte enseñar. Si fuera por mero gusto estudiaría Filosofía”, se va por la calle del medio.

Pero ha querido desde los primeros instantes de la entrevista dejar algo muy en claro. Para él no es misión imposible vivir de la música. “Se puede. Claro que sí”, despacha con entera confianza. Guevara desliza en torno a sus compañeros de banda que “más que amigos somos como hermanos, porque tenemos que compartir cosas muy importantes”, se lleva una mano al pecho. Stereolux –indica- prefiere las salas de ensayo para prepararse.

De las locaciones que hay en Caracas tal vez sea Hard Rock Café la que más se parece al estilo de Stereolux. Guevara dice que conoce a sus fans, luego de cada show puede tocarlos con las manos y hablar con ellos. En efecto, hace poco la banda hizo un show case allí mismo. Habrá un video para “Eva” que rotará en Youtube, pero no descarta algunos canales especializados como HTV.

De las bandas nacionales dice conocer el trabajo de Dermis Tatú; le parece bueno. También respeta la obra de iconos como Los Caramelos de Cianuro, o el ya citado Desorden Público, “aunque ellos no hacen rock, sino ska”. En América Latina, cierra su declaración, un gran ejemplo a seguir para él es Soda Stereo. Y allí es donde Guevara y su pandilla quieren estar: en el gran negocio, que un día fue timoneado por Gustavo Cerati. “Ese es mi gran sueño”.