Venezuela

Así es como el Gobierno asfixia al Parlamento opositor

La Asamblea Nacional (AN) se ve asfixiada por todas partes. Un apagón eléctrico forzado y la negativa para otorgar recursos se suman a la larga lista de acciones que buscan cercenar la operatividad -jurídica y presupuestaria- del único poder público manejado por la oposición.

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La batalla que libran desde hace meses el oficialismo y la oposición abrió un nuevo capítulo: la asfixia administrativa de la Asamblea Nacional. El presidente del legislativo, Henry Ramos Allup, denunció el lunes que no hay dinero para cumplir cabalmente con el pago de sueldos y salarios al personal administrativo y obrero del poder público, incluyendo a los parlamentarios.

José Vicente Rivero, dirigente de Sifucan, el mayor sindicato que opera en el Parlamento, denunció a El Estímulo que jubilados y obreros de ese organismo pudieron cobrar este martes sus sueldos que habían sido bloqueados de manera arbitraria por la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre), sujeta al Ministerio de Finanzas.

Sin embargo, más de dos mil trabajadores del legislativo todavía no han cobrado la última quincena del mes de abril, una demora que de acuerdo a Rivero no había pasado nunca en la AN.

«No hay garantías de que se mantengan los pagos. Los cobros de los obreros son semanales. Para la semana que viene en la AN ya no reposa dinero y se dificultará hasta el pago de los obreros», añadió el dirigente sindical.  

En un acto celebrado en el edificio José María Vargas, la sede administrativa de la AN, unos 50 trabajadores amenazaron con tomar las calles si el Gobierno no libera los recursos y facilita la firma del contrato colectivo que lleva 16 meses vencido.

La crisis presupuestaria se conoce días después que el presidente Nicolás Maduro ordenara un apagón eléctrico forzado a las instalaciones de la AN, porque, según dice, la directiva parlamentaria se niega acatar con las medidas de racionamiento impuesto por el Gobierno en las oficinas públicas.

El jueves pasado, la estatal eléctrica Corpoelec cortó el suministro a la sede de la AN y el Parlatino, un apagón similar  había ocurrido un día después.

A la asfixia monetaria se le suma las acciones para frenar las iniciativas tomadas por el Parlamento, controlado por la oposición desde el pasado 5 de enero. Diputados de la Mesa de la Unidad Democrática sostienen que el presidente Nicolás Maduro utiliza al Tribunal Supremo de Justicia para vulnerar cualquier acción que se emprenda desde el legislativo contra su gobierno.

Julio Borges, jefe de la bancada opositora, aseguró que, en cinco meses, el Supremo ha dictado 13 fallos para frenar las iniciativas de la AN para controlar las funciones de ministerios, empresas públicas, ministros y regular el poder de Maduro en otros poderes públicos.

-Agresiones a la carta-

Al denunciado cerco judicial, los legisladores de oposición sufren de constantes agresiones por parte de miembros identificados con el oficialismo en los alrededores de la Asamblea Nacional. El último caso fue reportado este martes contra los diputados Stalin González y Juan Requesens, quienes fueron golpeados con palos por supuestos simpatizantes del chavismo en el centro de Caracas.

-Hasta  falta el papel- 

La Secretaría de la AN pocas veces cuenta con el papel necesario y la tinta para imprimir los documentos que deben ser repartidos entre los asambleístas. Ocasionalmente, hay papel higiénico en los baños y los trabajadores se quejan de que ni siquiera cuentan con café para mantenerse activos durante las largas horas de trabajo que exige el Legislativo.

«Parece algo tonto, pero eso nos retarda el trabajo en las plenarias y comisiones», explicó en una ocasión Ramos Allup.

Con información de Anna Carolina Maier y Johann Starchevich

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