Venezuela

Ataque de militar a niño en Anzoátegui pudo ser fatal

El menor de edad de 11 años estuvo a punto de morir luego que un militar venezolano lo sometiera a “torturas”

El repudió a las acciones de un capital de la Guardia Nacional en contra de un niño de 11 años que jugaba en el pesebre de la Guardia Nacional
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El repudio a las acciones de un capitán de la Guardia Nacional en contra de un niño de 11 años que jugaba en el pesebre de la Escuela de Formación de Guardias Nacionales, en San Tomé, estado Anzoátegui, se hizo tendencia en las redes sociales venezolanas.

El video del menor de edad llorando y relatando como el oficial lo castigó la tarde del sábado 16 de noviembre, se hizo viral.

El Estímulo conversó con familiares del niño quienes dieron detalles de lo sucedido y exigen destituir al militar que pudo acabar con la vida del niño.

“Lo golpeó, lo cacheteó, le haló la oreja, le pegó la cabeza contra la pared y no conforme le metió la cabecita en el tobo con agua de coleto, le metió corriente… es un aberrado”, declaró Solimar de Melean, abuela del menor de edad.

Para el niño que vive apenas a 100 metros del centro de formación de guardias nacionales, era normal jugar allí con sus amigos.

“Se acercaron a jugar con él. Cambiaron de un lado a otro los muñequitos, se divertían… niños al fin. Puede ser que se hayan llevado alguna ovejita, no sé”, comentó Solimar.

El hecho a simple vista parecía sencillo, pero sobrepasó los límites en el momento que el niño es obligado a ingresar al recinto militar.

“Es un abuso, un delito. El otro niño es más pequeño (8 años) que mi nieto que apenas tiene 11 años. Al más pequeño, el Capitán Arellano le dijo que lo iba a picar en pedacitos y luego se lo mostraría a mi nieto si regresaban a meterse al pesebre”, denunció consternada la abuela.

Solimar de Melean dijo que su nieto en medio del llanto y el terror recuerda que Arellano estaba acompañado de otro militar.

“Pero Arellano fue quien lo golpeó”, precisó.

Pudo ser fatal

Para el menor de 11 años lo que inició como una tarde rutinaria de juego pudo haberlo llevado a la muerte, según referencias médicas.

El niño padece una patología neurológica, según familiares, por lo que debe estar medicado de manera constante.
Luego de salir de la instalación militar fue llevado a una evaluación médica en el hospital de Pdvsa, San Tomé.

“El doctor que lo vio dijo que, si hubiera tomado el medicamento antes del evento con la corriente que le metieron, el niño hubiera sufrido un infarto”, declaró la abuela del infante.

El niño comento a sus familiares que al momento de recibir la descarga eléctrica sintió que su corazón se salía.
“Abuelita, cuando ese señor me estaba poniendo la corriente yo sentía que mis venitas saltaban y el corazón se me iba a salir por la boca”, relató Solimar.

La pesadilla no termina. Continua asustado, no ha logrado recuperar la tranquilidad ni el sueño.

“Ha dormido muy intranquilo, él tiene una habitación, duerme solo pero le pidió a la mamá anoche que lo abrazara y no lo dejara solito, así medio durmió”, detalló la abuela.

Protestaron en San Tomé

Con la detención de los menores de 11 y 8 años, una turba de vecinos se aglomeró el pasado sábado 16 de noviembre a las puertas de la escuela de guardia.

No solo pedían justicia, exigían también que saliera el Capitán Arellano, con esposas y mojado.
“Lo queremos esposado y mojado, como él lo hizo con el niño”, vociferaban.

Por su parte la abuela del niño maltratado pidió justicia y la destitución del militar.

“Si permitimos que lo juzgue un tribunal militar lo que harán sería cambiarlo a otro comando y va a continuar disfrutando su vida, haciéndole daño a otros niños o adultos, es un aberrado. Quién sabe cuántas cosas más habrán pasado en esa escuela y no se han dicho”, precisó.

En contacto telefónico con Omar Melean, padre del menor de edad en cuestión dijo que lamenta no poder estar en este difícil momento con su hijo.

Melean se encuentra trabajando en Perú desde hace algún tiempo. Desde allí manifestó que su hijo no merece nada de lo que le sucedió.

“Es algo que sobrepasa los límites de la maldad y vamos a luchar para que se haga justicia, se tiene que castigar”.
Comentó que él como otros venezolanos se vio obligado a migrar para poder tener una mejor calidad de vida y ayudar a la familia que se quedó en Venezuela.

Agradecen a las autoridades

Los familiares agradecieron al Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), a los representantes de la Lopna y medicina forense.

Resaltaron también el apoyo del alcalde del municipio Freites de San Tomé y del director de la escuela de guardias nacionales, quien se ha puesto a la orden para facilitar las investigaciones.

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