Hace 10 años Gelato e Caffé nació con la idea de reunir a todos por un placer común: el helado. Hoy, siguen su camino con productos como el panettone relleno con helado y la torta negra rellena de helado de avellanas, nacidos para complacer a todos los paladares en estas fechas navideñas
Todos los años, Gelatto e Caffé se dedica a la producción de helados que a todos encantan y para estas fechas, añaden dos productos que han marcado pauta en la memoria gustativa de la navidad. El panettone relleno con helado y la torta negra rellena de helado de avellanas que surgieron gracias a la búsqueda por complacer a los amantes de los sabores navideños pero con una diferencia muy importante: el helado es el elemento estrella en ambos postres.
«Quisimos colocar al helado como protagonista en la mesa navideña y lo logramos a través de estos dos productos que ya son tradición en nuestro local», comenta Mónica Serrano, Gerente General de la marca.
El panettone relleno con helado surgió hace ocho años, mientras que la torta navideña fue hace seis años como parte de esa búsqueda por recrear lo mejor de la tradición navideña con el helado de avellanas, sabor predilecto para acompañar los sabores de esta torta que incluye dátiles, almendras, nueces, cerezas verdes y rojas, uvas pasas, especias y frutas maceradas.
El panettone que ofrecen no lleva frutas confitadas, sino trazos de naranja y uvas pasas. Se puede encargar con helado de crema catalana o con crema de chocolate y avellana a la que llaman Imperial. Ambos productos pueden retirarse en los dos locales de Gelato e Caffé ubicados en el pueblo de El Hatillo o en el CC Altamira Village.
«Estos productos fueron un hit desde que los lanzamos y actualmente somos los únicos que proveemos de estos emblemáticos postres rellenos de helado», asegura Serrano.
Coordenadas Gelato e Caffé
A través de sus redes sociales informaron que trabajan en una "nueva alternativa gastronómica" y están remodelando el local
Entre las novedades están las fajitas flambeadas en la mesa, que pueden ser de camarones, pollo, lomito o mixtas. También se suman los tequebites, minitequeños en salsa tártara
Caracas es la única ciudad latinoamericana que The Economist incluyó en su ranking
