En el mercado

La dulcería criolla se hace bombones con Lúdico

Chocolates Lúdico hace piezas de conserva de coco, bocadillo de guayaba, golfeado, plátano con queso, manjares de limón y parchita, jalea de mango y acemita tocuyana

Texto: Gabriel Balbás (@gabrielbalbas) / Fotos: Cortesía de @ChocolatesLudico
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Conserva de coco, bocadillo de guayaba, golfeado, plátanos con queso, manjar de limón, manjar de parchita, jalea de mango, dulce de leche, café con leche, praliné de maní y acemita tocuyana… Pareciese el menú de un abasto que vende dulcería criolla en algún pueblo venezolano, pero se trata de los sabores que podemos encontrar en los bombones de Chocolates Lúdico.

La dulcería criolla venezolana es deliciosa. Esa trilogía de sabores que componen el papelón, la canela, y las frutas, como ingredientes principales de muchos postres nacionales, es un éxtasis para nuestras papilas gustativas.  Pero ahora la cosa se pone más sabrosa, porque imaginen esos sabores -que más allá de suculentos, también nos traen recuerdos de infancia-  bañados en chocolate fino de aroma. Ese es el concepto de Luzmar González Borges y Diego Granadillo, quienes decidieron emprender en el mundo de la bombonería con su marca Chocolates Lúdico.

De la China al bombón de plátano con queso, así se resume el viaje que ha vivido esta bombonería artesanal que aún da sus primeros pasos.  Los creadores de este invento achocolatado vivían en China, allá Luzmar cursaba su maestría en Gestión del desarrollo rural, eligiendo el cacao de Chuao como tema de tesis. Fue en ese momento donde comenzó a involucrarse con el chocolate, un mundo que hasta ese entonces le era ajeno. Siendo geógrafa de carrera, jamás pensó que terminaría en un emprendimiento gastronómico.

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Como si se tratase de una profecía, cuando la pareja regresa a Venezuela se residencian en Guatire, muy cerca de la procesadora de chocolates Kkao Real.

“Todos los días en la casa, abrías la ventana y entraba el olor del chocolate”,  recuerda Luzmar cuando narra las anécdotas de cómo terminó estudiando el noble oficio del chocolatier.

Posteriormente, como requisito para culminar su tesis, debía inventar un bombón de autor y nuevamente la idea llegó por la nariz: “Estaba cocinando y empecé a imaginarme un bombón que combinara los sabores del plátano y el queso”. El resultado del invento se convirtió en el primer bombón de la marca.

Con recetas de la abuela

Poco a poco, Luzmar y Diego, que antes no cocinaban más que lo esencial, comenzaron a inmiscuirse en el recetario de dulcería criolla venezolana, descubriendo más de 100 recetas de postres que llevan plátano, coco o papelón. También han usado la tradición culinaria familiar, como la receta de la jalea de mango de la abuela o la preparación del bocadillo de guayaba que aprendieron en casa. La idea es encapsular la dulcería criolla y jugar con la memoria gustativa del venezolano a través de las conexiones que esto genera.

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Golfeados con técnica belga

El reto es lograr combinaciones de sabores que evoquen un dulce criollo, cuenta Diego. No es tan sencillo como elaborar la receta del postre y meterlo de relleno en el bombón. Las preparaciones llevan todo el delicado trabajo que requiere la técnica belga de bombonería, donde se utiliza un molde recubierto en chocolate -en este caso utilizan chocolates Bitácora Cacao para las coberturas-, para luego colocar el relleno y finalmente el sellado con más chocolate.

Una mezcla de papelón, especias y queso blanco duro logra recrear a la perfección el sabor del golfeado, sin necesidad de usar harinas ni horneados. Lograr que se sienta que se está comiendo un golfeado tradicional como el de Petare pero sin dejar de ser un delicado bombón es un ejemplo de lo que ha logrado chocolates Lúdico.

Una experiencia lúdica

El nombre Lúdico realmente viene de la combinación de las sílabas iniciales de Luzmar, Diego y Compañía. Sin embargo, también resume la experiencia que tendrá el consumidor con cada uno de los 11 sabores que tienen hasta el momento: Conserva de coco, bocadillo de guayaba, golfeado, plátanos con queso, manjar de limón, manjar de parchita, jalea de mango, dulce de leche, café con leche, praliné de maní y acemita tocuyana.

Ya en desarrollo están los próximos sabores a incorporarse a la lista de rellenos: dulce de lechosa, cabello de ángel, catalina, torta negra, y dulce de tamarindo. Además del compromiso especial de elaborar un bombón del criollísimo bienmesabe.

Coordenadas

Para pedidos e información: @Chocolatesludico

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