Venezuela

Cae la noche de Caracas entre la desolación y los disturbios

La noche del 19 de abril cae mostrando dos caras de la capital. Luego de la descomunal marcha opositora que fue reprimida por militares y policías, zonas del este y del oeste anochecen en medio de fuertes disturbios y la desolación que dejó una jornada llena de tumultos.

Publicidad
Fotografía: @JuanCaribe

Sectores residenciales como Altamira y Colinas de Bello Monte se encuentran en “medio de una guerra”, según denunciaron vecinos a El Estímulo, por la represión desatada por policías y militares que se enfrentan desde hace horas contra manifestantes al presidente Nicolás Maduro.

Hombres, mujeres, niños y hasta mascotas de edificios residenciales de Colinas de Bello Monte se han debido desplazar de sus apartamentos ante los efectos de gases generados por la lluvia de bombas lacrimógenas, lanzadas desde un helicóptero de la policía que sobrevuela la zona.

En Altamira, el paso por algunas calles y avenidas está restringido ante las tanquetas de la Guardia Nacional Bolivariana que lanzan bombas lacrimógenas para disolver a los manifestantes, quienes han levantado barricadas con palos, piedras y postes en varios puntos de esa zona.

En Santa Fe, agentes de la policía nacional bolivariana se enfrentan con manifestantes que han vuelto a derribar árboles y postes para imponer barricadas. Los gases de las bombas se mezclan con el humo negro que arroja la quema de algunos cauchos en la vía, denunció una vecina.

El oeste capitalino también siente los efectos de la represión. En el sector residencial de El Paraíso, las bombas lacrimógenas han impactado estacionamientos, afectando severamente a los vecinos.

El centro de la capital permanecía en calma, luego que una movilización chavista tomara en un acto que concluyó con un discurso de Maduro.

En la autopista Francisco Fajardo, la más importante de la capital donde decenas de miles de opositores marcharon en contra de Maduro, son evidentes los vestigios de los enfrentamientos: troncos de árboles quemados, enormes piedras y rejas derribadas por los manifestantes debieron ser removidas por policías en su intento para reactivar el paso por la vía, constaron dos reporteros de El Estímulo.

Incluso, agentes policiales debieron remover una moto quemada por manifestantes en el viaducto que conecta el sector de Chacao con la autopista de Prados del Este.

En el distribuidor de Altamira, al este de la ciudad, los uniformados lanzaron bombas lacrimógenas a los cientos de manifestantes que se habían concentrado en los alrededores de la Plaza Francia.

Pero no todo el este de Caracas estaba sumergido en tumultos. Ríos de personas en la urbanización Los Palos Grandes y en Chacao caminaban en calma para retornar a sus hogares luego de que el Metro de Caracas cerrara veinte estaciones y el servicio de transporte público se viera reducido por las manifestaciones.

En sectores de Chacao, el olor a bombas lacrimógenas se sentía aunque la calma prevalecía. La tranquilidad también se reportaba en El Cafetal, Caurimare, El Marqués, Los Ruices, reportaron los vecinos.

En Los Palos Grandes, polleras y ventas de perrocalientes estaban abarrotados por grupos que saciaban el hambre luego de una extenuante marcha bajo el sol caraqueño.

Publicidad
Publicidad