«Una vez más la Administración Trump demuestra que le duele la verdad y reacciona con soberbia violando el Derecho Internacional», tuiteó el canciller venezolano, Jorge Arreaza.
Arreaza agregó en la red social que el recinto, ubicado en el elegante barrio de Georgetown, fue «tomado e invadido por un despliegue policial sin precedentes».
«La sede diplomática, que estaba tomada desde hace semanas por activistas oficialistas, fue liberada en la mañana de este jueves», según señaló Carlos Vecchio, representante de Juan Guaidó, reconocido como presidente interino por más de 50 países, en Estados Unidos.
En el recinto quedaban los últimos cuatro militantes, que habían sido notificados el lunes por la policía que los desalojarían por la fuerza si no desocupaban la propiedad.
Maduro responsabilizó el miércoles a Donald Trump de la «grave violación, no solo legal sino moral» de la embajada, y dijo que la medida policial es una «locura».
Ambos países rompieron relaciones diplomáticas después de que Guaidó se proclamara mandatario interino en enero.
El líder socialista dijo que denunciará el caso ante instancias internacionales.