Espectáculos

Cinco artistas que sacudieron al mundo del espectáculo de Venezuela en 2020

En medio de la difícil y complicada pandemia del coronavirus, hubo luminarias que, o bien por su trabajo, retador e indetenible a pesar de la cuarentena; o porque sufrieron inesperados quebrantos de salud que los incapacitaron; o ídolos a los que les sobrevino la muerte, nunca dejaron de ser motivo de conversación en el ámbito del espectáculo. Son los casos de Alicia Banquez, Chyno Miranda, Mirla Castellanos, Mimí Lazo y Raúl Amundaray.

Alicia Banquez
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Este 2020 a punto de finalizar, un año difícil y complicado en todos los ámbitos por la pandemia del coronavirus, resulta un desafío a la hora de evaluar o hacer un balance de quiénes -en este caso los artistas- tuvieron un sobresaliente y afortunado desempeño, así como aquellos que no lo consiguieron.

Lo que se impone entonces es centrarse en los que en Venezuela no dejaron de estar en el candelero, en primer término por su determinación de enfrentar los obstáculos generados por la emergencia sanitaria mundial y no detenerse ante ellos, como Alicia Banquez y Mirla Castellanos,  así como en quienes desarrollaron propuestas creativas vigorosas y de largo alcance, como Mimí Lazo y Luis Fernández.

También hubo quienes recibieron atención mediática por otras diferentes razones, que los situaron como temas obligados de conversación. En este caso por una enfermedad extraña e incapacitante, como la que padece Chyno Miranda, cantante y ex integrante del dueto de Chino y Nacho.

También, por la consternación que produjo la muerte, al tratarse de una figura pública de arraigo popular, como Raúl Amundaray, el llamado “Galán de galanes” de Venezuela.

He aquí estas cinco historias:

Alicia Banquez. Mucho más que una revelación

Trabajo, disciplina, constancia y formación artística son los atributos que han forjado integralmente a esta cantante. Aunque no puede ser catalogada como “revelación del año”, por cuanto ostenta una consistente actividad de varios años, sí alcanzó en este complicado 2020 lo que se vislumbra como el empuje definitivo de su carrera. Todo comenzó arrancando el año, el 1 de enero, cuando empezó a ser manejada por Miguel Sierralta, empresario venezolano afincado en Miami, en donde se le considera uno de los más influyentes y experimentados en su especialidad.

Antes de esta alianza profesional, la artista todavía conocida como Alicia Hernández había desarrollado un amplio recorrido como vocalista en los musicales Anita, la huerfanita y A todo volumen, presentaciones en distintos escenarios como el BOD con «Blues en Negra». Hasta llegó a participar y figurar en la edición 2005 de Fama, sudor y lágrimas, el popular «talent show» de Rctv, además de incursionar como actriz, su otra pasión, en diferentes telenovelas y en el teatro y cine.

De la mano de Sierralta mejor no le ha podido ir. Ha alcanzado nuevamente el primer lugar del Record Report, gracias a Desesperada, tema popularizado originalmente por Marta Sánchez, que se suma a los dos que en el transcurso del año logró colocar en la cima de la cartelera que registra los discos que más suenan en nuestro país: Mi historia entre tus dedos, que grabó a dúo con Chico Castillo, ex integrante de los Gipsy KingsEl perdón, cover del éxito de Nicky Jam y Enrique Iglesias.

Particularmente bien recibido por crítica y público fue su concierto, efectuado el pasado 1º de octubre, vía streaming, que tuvo como escenario el teatro del Centro Cultural BOD. Allí,  acompañada por su banda desgranó un repertorio de covers, provenientes del pop, la balada y el soul, que no dejó a nadie insatisfecho. Interpretó versiones muy singulares de temas popularizados por Rihanna, Adele, Alejandro Sanz, Rosana, Franco De Vita, Ricardo Montaner, Marta Sánchez, Etta James y Aretha Franklin, entre otros, a través de los cuales demostró su atractiva fuerza vocal y su poderoso desenvolvimiento escénico.

Este concierto será transmitido ahora en TV por Venevisión y Venevisión Plus, que lo presentarán este 25 de diciembre a las 10 pm.

Alicia Banquez mantiene una movida agenda de trabajo. Ahora le toca prepararse para el periplo internacional, que una vez se normalice la emergencia provocada por el coronavirus y se abran los vuelos, comenzará por España, para luego proseguir a Estados Unidos y otros países.

Chyno Miranda y su misteriosa enfermedad

El pasado 18 de noviembre se conoció que Jesús “Chyno” Miranda, el popular cantante venezolano que formó junto a su compatriota Nacho Mendoza un reconocido dúo de música urbana, luchaba contra una dura enfermedad, que se empezó a manifestar desde los primeros meses de este 2020.

Sus allegados lo dieron a conocer a través de un comunicado publicado en las cuentas oficiales del artista. “Sin duda que el 2020 ha sido un año complejo y difícil para todos y para quienes estamos alrededor de Jesús nos ha tocado vivir unas semanas de mucha preocupación e inquietud”, comienza el texto.

Según informaciones posteriores, se trata de secuelas neurológicas dejadas por el padecimiento de covid-19.

El comunicado relata que empezando 2020, Chyno “empezó con unas breves pero intensas molestias en sus manos y piernas, que se fueron intensificando, al experimentar mucho dolor, calambres, sensibilidad y entumecimiento, dolores que primero lo forzaron a dejar drásticamente su vida activa de ejercicios y sus actividades cotidianas, hasta un punto en que no pudo caminar más. Con mucha discreción mantuvimos en privado su condición por respeto a su privacidad y por el agudo dolor que estaba padeciendo”.

La misteriosa enfermedad de Chyno Miranda sacudió el mundo venezolano de la música. Explicaban que los médicos le ordenaron rehabilitación física y lo hospitalizaron por cuatro semanas. “Es una recuperación bastante lenta y de mucha paciencia, pero cada vez está mejor y más fortalecido”, agregaron sus voceros, que aunque describieron los síntomas y el proceso de recuperación vivido por el cantante, no dieron a conocer el nombre de la enfermedad que padece.

Comentaban que tienen “mucha fe” en que su recuperación se dará “más rápido de lo esperado” y añadieron que están a su lado “apoyándolo y brindándole todo lo que necesita para ver al Jesús de siempre, a Chyno”.

Por otro lado, la familia publicó una nota, en la cual aseguraba que el mismo Chyno “pronto les contará su historia” y resaltó que el cantante,  de 36 años de edad, “ha sido un guerrero”. La publicación también la compartió Nacho, su ex compañero.

Afortunada recuperación

Dos semanas después, el 30 de noviembre, en un nuevo video difundido en la cuenta Instagram de su esposa, Natasha Araos de Miranda, está avanzó detalles sobre la salud de su cónyugue. Todo ello, destacando que “ha respetado la privacidad que ha exigido el entorno del artista desde que se iniciaron los primeros síntomas de su enfermedad”. Sin embargo, “a sabiendas del interés suscitado luego de la noticia”, decidió dar pequeños detalles de cómo avanza el proceso de recuperación.

El intérprete, que estaba sentado a su lado en el video, respondió a la duda de si estaba recuperándose: “Claro que sí, por supuesto que sí”. El clip, que duró apenas unos segundos, mostró un fragmento de su imagen, que se asomó tímidamente a la cámara.


El portal de la revista People en Español publicó una entrevista con la esposa de Chyno, Natasha Araos, quien ofrece detalles sobre la enfermedad del artista. Luego ella volvió a compartir un video, en el que explicaba una fisioterapia que acababan de hacerle a Chyno y colgó un video en el que camina a su lado, mostrando que el artista ya puede dar pasos por sí solo. A esta altura y con tanta incógnita, sólo bastaría agregar: Esta historia continuará.

Mirla Castellanos. En Madrid la pandemia no la detuvo

Cuando Mirla Castellanos llegó a Madrid el pasado 6 de marzo, era solamente por dos semanas, pues tenía cita en el consulado de Estados Unidos, el 9 del mismo mes, donde ella y su esposo renovarían su visa norteamericana. Aprovecharon la circunstancia para visitar a su hija menor, residente en la capital española. Nada la hacía presagiar que ese lapso se extendería por casi 10 meses, que todavía se mantienen, debido a las restricciones que pocos días después se aplicaron para enfrentar la pandemia del coronavirus. Como a muchos otros viajeros en el mundo, la pandemia la tomó por sorpresa y la ha obligado a quedarse confinada en la madre patria junto a su esposo, el empresario Miguel Ángel Martínez. Inclusive, se contagió con la covid-19 y salió airosa.

Mirla Castellanos, «La Primerísima». Foto: Billy Cas.

Mirla le ha puesto al mal tiempo buena cara. Su ritmo de trabajo ha sido indetenible, gracias al compositor y productor venezolano residente en la capital española William Luque, con quien tuvo un encuentro providencial a instancias de su mánager, Luis Capecchi. Desde Caracas el empresario ha manejado los hilos de todas y cada una de las iniciativas que la llevado a cabo Mirla, que incluyen grabación de discos y video-clips, entrevistas de prensa, televisión y medios digitales, así como numerosas sesiones de fotos para renovar su portafolio gráfico.

Tuvo la suerte de conseguirse también con un grupo de profesionales venezolanos, residentes en Madrid, que se encargan de maquillarla, peinarla y proporcionarle vestuario y apoyo logístico para todas estas actividades.

Una Artista a prueba de todo

También inauguró desde Madrid su propio canal de YouTube, a través del cual acaba de lanzar Invisible, su nueva canción, compuesta y producida por William Luque. El maestro también estuvo a cargo de la realización de su respectivo video musical, así como lo hizo también con las otras dos canciones que la artista venezolana grabó también en España.

El primero fue Bachata rosa, versión del célebre tema de Juan Luis Guerra, que nuestra artista hizo viral en las redes. Y después adaptó el bolero Cómo fue, respaldada por vocalistas de tres generaciones: ella, Francisco León y el propio William Luque. Es uno de los temas más escuchados vía Instagram y en su canal de YouTube, donde figuran igualmente todos sus éxitos de las diferentes épocas de su carrera.

En medio de su incesante actividad, un día comenzó a sentirse mal y alertada ante la pandemia de covid-19, fue con su esposo a una consulta médica de despistaje y le dijeron que estaba contagiada con el virus, no así su marido, cuyo examen dio negativo. Ambos tuvieron que estar tres semanas en cuarentena y en ambientes separados, hasta que, pasado ese lapso, La Primerísima se hizo la prueba y salió negativa. Afortunadamente su sintomatología fue leve.

Apenas recuperarse retomó su ritmo de trabajo, pero no ve la hora de poder regresar a Venezuela.

“Me hace mucha falta mi país. Añoro a mis amigos, al ambiente artístico, mi televisión, mis noticias. Todo eso lo extraño. Y a mis hijos, que es lo primero en la vida. Cuando llegue a Caracas, si todo pasa y Dios nos ayuda, creo que seguiremos con la obra de teatro Renny Presente, como teníamos previsto antes de la pandemia», comenta.

Raúl Amundaray. El adiós del “galán de galanes”

“Estoy bien, saludable y joven, como debe ser”, dijo un Raúl Amundaray divertido y entre risas, al iniciar nuestro diálogo telefónico para la que sería la última entrevista que concediera a un medio venezolano, a fines de octubre de 2019, publicada en El Universal. Hacía ya dos años que estaba viviendo en Houston, Estados Unidos.

Nada hacía presagiar entonces que menos de tres meses después la prensa estaría registrando profusamente su fallecimiento, ocurrido la noche del lunes 20 de enero, comenzando el año, Día de Martin Luther King, luego de regresar con su hija de un viaje recreativo el fin de semana largo.

A Houston llegó “por la terrible situación que vive Venezuela, con un gobierno tan funesto. No regresaré hasta que no salgamos de esta pesadilla. Tenía una academia para la formación de actores emergentes y la tuve que cerrar para venirme, pues las cosas no estaban muy bien. Desde hacía tiempo no trabajaba en televisión, sencillamente porque allá la producción no existe, dejaron de hacer telenovelas hace mucho tiempo”.

Raúl Amundaray, eterno galán, primer actor, artista de lujo y Maestro de la época de oro de la TV venezolana. Foto: Venevisión, archivo.

A la hora de hacer un balance histórico de la televisión venezolana, habría que mencionar a Amundaray como el galán más prototípico del género telenovela. Para empezar, fue el protagonista de El derecho de nacer, el más emblemático de los títulos en materia de culebrones, el que marcó el camino a seguir en lo que a melodramas televisivos se refiere. Lo hizo en 1965, vía Rctv, cuando contaba 28 años y ya tenía cierta experiencia en radionovelas. Ya había salido airoso de su primer papel en la pequeña pantalla, un año antes, en Historia de tres hermanas, en el mismo canal, donde hacía pareja nada menos que con Eva Moreno, la actriz más reconocida de la TV de entonces. A partir de allí, su éxito resultó indetenible.

Más que un personaje

El personaje de Albertico Limonta, el médico que encarnó en El derecho de nacer, lo marcó para siempre y se erigió en su trampolín para obtener fama, dinero y reconocimiento. Fue el galán de galanes -así lo denominaban la prensa especializada- durante las décadas de los años 60, 70 y 80 y, ya en rango de primer actor, continuó trabajando en un apreciable número de telenovelas, hasta que decidió, como muchas luminarias del espectáculo, liar sus bártulos e irse a vivir a otro país. Con casi 50 años de carrera nunca dejaba de mencionar que El derecho de nacer lo marcó.

«Toda la vida me han relacionado con el personaje de Albertico Limonta. Muchos años después hice El asesinato de Delgado Chalbaud, serie de José Ignacio Cabrujas, que considero uno de los mejores trabajos, no solamente de mi carrera, sino también una de las producciones más relevantes en la historia de nuestra TV. Otro hito en mi trayectoria fue Cristal, de Delia Fiallo, gracias a la cual estuve varias veces en España y fui premiado allá como mejor actor. Más recientemente, recuerdo con particular afecto el papel de Don Pipo, el abuelo bueno y simpático, que se movía entre la comicidad y el drama, que escribió Mónica Montañés para mí en su telenovela ¿Vieja, yo?, que transmitió Venevisión».

También contaba que otra de sus grandes satisfacciones era haber trabajado con las más grandes actrices, como Eva Moreno, Marina Baura, Doris Wells, Lupita Ferrer y Pierina España. “Ellas eran las mejores”, remarcaba.

Raúl Amundaray y Eva Moreno en «Tres Hermanas» (Foto: Archivo Venevisión).

Mimí Lazo. Reinventar el teatro on line

La pandemia del coronavirus ha traído situaciones dolorosas,  pero también ha obligado a reinventarse de muy diferentes maneras. Este es el caso de Mimí Lazo, quien dio un paso al frente y asumió el liderazgo de una de las iniciativas dentro de las propuestas que actualmente se ofrecen desde las plataformas digitales, que en su caso ha sido disfrutada, y celebrada, por más de 20 mil espectadores desde que iniciaron la novedosa experiencia el pasado agosto a través de mimilazo.net.

Lo singular de su propuesta es que implica una manera de ofrecer el espectáculo teatral en streaming, pero adaptándolo a las posibilidades que este recurso ofrece; es decir, ir mucho más allá de ofrecer obras grabadas.

«Cuando Mimí empezó con la idea, porque es a ella a quien se le ocurre -dice el director, productor y actor Luis Fernández, su pareja y socio en el proyecto-  inmediatamente la rechacé, porque odio el teatro grabado. No me gusta un teatro que se graba para verlo en video. No me parece que funciona nunca. Pero luego que empezamos a hacer los monólogos, que vi la cercanía con la gente, que me di cuenta que de verdad podía ser interactivo, que aprecié la dinámica que se establece, entonces le plantee a Mimí que teníamos que adaptar; es decir, no hacer las obras tal cual, sino adaptarlas a este nuevo escenario, que tiene unas reglas diferentes a las de un teatro normal».

Mimí Lazo y Luis Fernández, una pareja exitosa, dentro y fuera del espectáculo, en vivo y por medios digitales. Foto: Mimilazo.net.

No es realmente teatro, es una modalidad de audiovisual en un formato inédito. Por ahí se fueron y lo que al principio parecía teatro grabado, se convirtió en una cosa diferente, nueva, que tomó su propia personalidad. Además de poderlos conectar con público, en todo el mundo y al mismo momento, ha servido también para cultivar conversaciones posteriores a las obras.

Es como extender una invitación al camerino a través de la cámara, tener en la sala a gente, que no solamente se encuentra con ellos “de tú a tú” en la cámara, sino que además se encuentran entre ellos: familias, amigos que tienen años que no se ven y que van juntos al teatro a ver la misma obra y luego verse en esa sala virtual, y además están en diferentes partes del mundo.

Mientras se reactivan las grandes salas de entretenimiento, Mimí Lazo y Luis Fernández encontraron esta ingeniosa manera de transmitir esa energía a través del acercamiento de los actores y actrices con el público asistente a sus obras. Lo califican como una “Zoom-party”, en la cual el encuentro virtual con los amigos, el poder compartir un trago y una conversación amena y relajada, se impone tras la función de teatro. Nunca antes el público había estado tan cerca de sus actrices y actores como ellos de su público.

Cartelera de grandes artistas

La oferta, que es completamente en vivo y con un «after party», incluye obras emblemáticas producidas y dirigidas por Luis Fernández, como El Aplauso va por DentroA mi Gordo no me lo quita nadieNo eres tú, soy yo. Está la infaltable «A 2,50 la Cubalibre», una experiencia virtual basada en la obra de Ibrahim Guerra, con elencos de artistas emblemáticos como Marisela Berti, Beatriz Vásquez, Coraima Torres, Sindy Lazo, Ana Beatriz Osorio, Alejandra Machado, Mirtha Pérez y la española Ana Turpin.

Las artistas se conectan desde diversas ciudades de Colombia, México, España y Estados Unidos, para ofrecerles un buen espectáculo, llevado por primera vez a la plataforma online.

La parrilla también incluye a Carlota Sosa en La Voz Humana, a Orlando Urdaneta con ¿Divorciarme yo?, Ana Beatriz Osorio en Por todo lo que jodemos las mujeresDESconocidos, el nuevo proyecto original de Monica Montañes, y finalmente, la Zoom-serie El SexoSentido.

También se ofrecen funciones de cine foro, en las cuales presentan y luego intercambian ideas con el público en torno a producciones como Tamara, de Elia  Schneider; Una noche oriental, de Miguel Curiel; Acosada en lunes de carnaval, de Malena Roncayolo y Un sueño en el abismo, de Frank Spano, entre otras.

Lo cierto es que mimilazo.net llega directo a las casas, buscando reavivar una de las cosas que se ha perdido con el cierre de teatros por la actual pandemia; esa necesaria interacción de los actores y actrices con su público, esa suerte de energía que acerca, que nutre desde la sala, llena el escenario e inspira el aplauso que reconoce a la buena actuación, a la puesta y a todo el equipo técnico que participa en ella.

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