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Los rugidos del Puma que se convirtieron en escándalos

Aunque José Luis Rodríguez se ha esforzado porque su carrera artística sea el principal alimento de los medios de comunicación, haciendo de la discreción una aliada, no pudo escapar de algunos escándalos. Ahora que vuelve a rugir, a sus 75 años, respirando aires nuevos, bueno es recordar esta otra vida del Puma

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Tras haber incursionado en el mundo de la canción de la mano de Chelique Sarabia y de haberse proyectado en las filas de Billo’s Caracas Boys, José Luis Rodríguez inició una faceta en solitario que lo llevó al terreno de la actuación. En la sede de RCTV, ubicada en Quinta Crespo, conoció a la diva Lila Morillo. Y surgió el romance… y los escándalos, hasta con las mayores de sus hijas.

No importó el acercamiento con la muerte ni su segunda oportunidad de vida. Sus hijas no tuvieron compasión en arremeter de nuevo contra él: Lilibeth Morillo le dijo a El Puma que «como padre no vales la pena».  Aseguró que a pesar de intentar mantener una relación con él, el esfuerzo no dio sus frutos. «Ese hombre sigue escogiendo ser padre de una, no de tres y abuelo de nadie», dijo a través de un video publicado en su cuenta de Instagram. Las diferencias parecen irreconciliables.


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SON 4 VIDEOS…DESLIZA Papá…que triste tener que usar estas vías para remitirte mi mensaje @elpumaoficial alejándome de mis formas de preservar la privacidad familiar, pues siempre me apego a la prudencia y discreción, pero ya que has bloqueado todas mis vías de acceso, no tengo alternativa, pues quiero lo escuches de mis labios, sin la posibilidad de tergiversación por medio de 3eros, nos dijiste que tuviste que escoger entre tú nueva familia y nosotras y habíamos perdido! Y a pesar de eso y de estar libre de culpa, pues NADA te he hecho y lo sabes, volví a buscarte, sin que lo merecieras, honrando a Dios y a ti… hoy, por mas que intentes pretender que no existo, te hablo y recuerdo… que tengo voz y NO SOY INVISIBLE… PAPÁ ……4 VIDEOS que espero te lleguen y a todo aquel que pueda asistirme a qué así sea, se les agradece! @galilealopezmorillo_ @lilianarodriguezmorillo @elcocoterodelila

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Pero la historia de los escándalos comienza mucho antes. Mientras el mundo aplaudía la propuesta de Los Beatles, la liberación sexual, la igualdad de los derechos civiles de los afroamericanos, el uso de la pastilla anticonceptiva y la utilización del bikini; Venezuela respondía a históricos patrones machistas entre los cuales resultaba cuando menos disonante que una mujer asumiera una relación con un hombre menor que ella. Ahí el origen del primer escándalo de El Puma, una vez que trascendió a la prensa su idilio con el símbolo sexy de los años 60.

ElPuma4La pareja hizo oídos sordos y siguió adelante. Contrajo nupcias en 1966 y recibió a sus hijas Liliana y Lilibeth. La familia ejemplar encontró un apoyo incondicional en el programa Sábado sensacional (estrenado el 29 de enero de 1972). De la mano del animador Amador Bendayán, el público criollo pudo seguir la evolución de los Rodríguez-Morillo. Todo era paz y amor, en compañía de Cristo.

Sin embargo, la internacionalización de José Luis nubló el panorama.

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La mudanza

Desde el éxito en el Festival de Viña del Mar 1980, el mánager del artista, Toty Maselli, insistía en la conveniencia de fijar residencia en Miami, para facilitar los desplazamientos a diferentes países. Seis años después logró el cometido. En el norte se debilitó el matrimonio que concluyó el 1° de julio de 1986, con la firma del divorcio más mediático en los anales del medio artístico nacional. Lila declararía, muchos años después, que Maselli fue el responsable de la disolución del vínculo.

A los cuatro meses de la ruptura, José Luis conoció a la modelo cubana Carolina Pérez, con quien inició una relación que se ha mantenido hasta ahora. También comenzó un ciclo de encuentros y desencuentros con su ex y con sus hijas mayores. Mientras Morillo aprovechaba cada ocasión para crear polémica, El Puma optaba por el silencio, tratando de preservar su privacidad.

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No obstante, la situación se agudizó con el nacimiento de Génesis Rodríguez Pérez en 1987. La brecha se hizo más profunda y lo que era una comidilla trascendió a los medios, a través de declaraciones que hablaban de distanciamiento y olvido por parte del cantante.

Golpe fatal

El episodio que terminó de quebrar la relación entre José Luis, Liliana y Lilibeth ocurrió en 2004. Ese año, Telemundo seleccionó a Génesis como protagonista de la telenovela Prisionera, al lado del mexicano Mauricio Islas. Los productores organizaron una fiesta el 28 de junio.

A los días, durante las grabaciones, la joven actriz sufrió un desmayo que le produjo fractura de talón y ameritó su traslado a un centro médico. Tras el chequeo físico, el especialista le hizo algunas preguntas frente a su padre. Entonces trascendió que, la misma noche de la celebración, Génesis y Mauricio tuvieron un encuentro íntimo. Al ser ella menor de edad (tenía 17 años), según la legislación de Florida, el hecho se consideraba “una violación sexual estatutaria”.

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El Puma decidió demandar a Islas y el escándalo repercutió en Hispanoamérica. El actor fue despedido de Telemundo antes de ser detenido. Pagó fianza de siete mil 500 dólares y recibió la demanda de divorcio de Patricia Villasana, madre de su hija Camila. En los juzgados, José Luis se opuso a un careo propuesto por los abogados del acusado. Y, de la noche a la mañana, el caso se esfumó. Algunas versiones aseguran que hubo indemnización acordada a puerta cerrada.

En medio de la controversia, apareció Lila con una candente revelación. Aseguró a la revista TV Notas que no entendía el comportamiento del padre de sus hijas, porque cuando Liliana tenía seis años de edad fue abusada por el guitarrista Publio García, en el estudio de grabación que la familia tenía en su hogar. La intérprete agregó que, en ese momento, la reacción de José Luis fue despedirlo, sin hacer mayor bulla, para “no perjudicar su imagen artística”. Incluso sostuvo que, años más tarde, lo contrató de nuevo en Puma TV e ignoró el consecuente reclamo. Las declaraciones tuvieron el apoyo testimonial de la víctima: “Todo es cierto, mi mamá tendrá muchas faltas, pero mentirosa no es”.

Confesión

Una década más duraría la distancia entre padres e hijas. Ni las palabras ni los llamamientos transmitidos a través de los medios revirtieron la situación, aunque trascendió que hubo dos intentos de acercamiento que, no obstante, fracasaron. El ídolo de la canción mantuvo su comportamiento de siempre, sin ceder a la tentación de responder.

ElPuma3La historia adquirió un nuevo matiz, a partir de la entrevista televisiva concedida por José Luis Rodríguez al escritor peruano Jaime Bayly. El encuentro tenía el objetivo principal de hablar del libro de memorias El Puma y yo. Sin embargo, comenzó con la confesión de que le habían diagnosticado una rara enfermedad denominada fibromatosis pulmonar. De esta forma, la publicación de 100 fotografías y 228 páginas, a través de las cuales el artista quiso compartir anécdotas y reflexiones de su vida, pasó a un segundo plano.

A partir de entonces, Liliana y Lilibeth se mantuvieron al tanto del estado de salud de su padre mediante terceras personas, en virtud de que la comunicación directa seguía siendo inexistente.

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El desenlace

La difusión de la imagen captada en Barranquilla durante un concierto en el que José Luis apareció asistido por un respirador y una bombona de oxígeno sembró la preocupación entre los fanáticos del cantante y, por supuesto, entre sus afectos.

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Lila declaró a Panorama: “Me enteré lo de El Puma, porque me lo mostraron, pero él está empeñado en decir que quiere morir sobre las tablas. Yo pienso que nadie que se encuentre en esas condiciones debe salir a un escenario, más cuando sabe que el mundo entero lo está viendo y está pendiente de él. Yo como él, me retiro, clausuro. Más importante que la salud no hay nada y, si es de meterme en un hospital, me meto. Todos sabemos que él esta delicado. Tenemos al mundo entero cristiano orando por él, sé que las oraciones llegan y que el Señor Jesucristo no lo abandona. José Luis, desde Venezuela, te enviamos un abrazo. Eres uno de los mejores, eres nuestro. Queremos que te recuperes y que salgas al ruedo como siempre te hemos visto, como todo un puma”.

ElPuma2Mientras Liliana confesó al programa Suelta la sopa de Telemundo: “Nos reunimos (también estuvo Galilea, la única nieta del cantante), pues sí, se dio. Hablé primero con él por teléfono, nos encontramos, nos contó, nos comentó que estaba padeciendo fibrosis pulmonar hace mucho tiempo… Imagínate, de eso hace dos años y eso es progresivo, lo vi como lo vi hace dos años. Me hubiera gustado pasar más tiempo con él, pero su horario de trabajo era muy duro de 7 a 11, de 7 a 12, era así todos los días, así que le agradecí lo poquito que estuvimos sentados en una mesa. Pensé que íbamos a ir a cuartos separados, una habitación, pero fue una cosa pública (…) Pudimos hablar y conversar, lo pude tocar, le pude hablar, lo pude besar, le besé los ojos, le besé el cuello, lo abracé y noté su cuerpo ya delgado, porque estaba delgado, sigue bello, pero está delgado”.

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Y Lilibeth, la más renuente a tocar el tema en público, habló desde Los Ángeles: “Aquí no hay bandos, lo que hay es una familia lastimosamente distanciada sin motivo, tal vez, pero es una familia al fin. El Puma siempre será mi papá y eso no va a cambiar nunca. No con esto estoy aprobando o desaprobando sus acciones, porque no las entiendo (…) lo que pido es a mi Señor Jesucristo que él siga siendo próspero, feliz, bendecido y que tenga larga vida”.

Tercera vida

El cantante venezolano José Luis Rodríguez reapareció el viernes 20 de abril de 2018 en Miami, cuatro meses después de recibir un doble trasplante de pulmón y anunció que prepara un nuevo disco, una serie sobre su vida y que en un año volverá a los escenarios. A sus 75 años prometió volver a rugir y, rodeado de sus médicos, alegó estar «completamente recuperado».

ElPuma1«He nacido tres veces. Primero cuando me tuvo mi madre, luego a los 33 años cuando recibí a Cristo y ahora», soltó el músico, con mejor semblante y acompañado por su esposa Carolina, a quien le agradeció haberlo acompañado durante el duro proceso. «Yo perdí una gran fortuna y no estoy hablando de oro o plata. Estoy hablando de tiempo», indicó en relación a los años que pasó buscando una cura para la fibromatosis pulmonar que aquejaba desde 2003. Tenía pocos meses por delante de vida cuando apareció un donante compatible con él. «Es terrible morir asfixiado, es desesperante, no hay explicación para eso», recordó.

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En esta tercera vida, El Puma dice haber perdido «el ego, la arrogancia, la prepotencia». Y el asunto pudiera tener un impacto en su manera de entender los tejidos familiares. Una afirmación que pareciera alejarse de aquellas reveladoras palabras que José Luis le dijo alguna vez a la mayor de sus hijas: “Tuve que tomar una decisión y ustedes perdieron. Si no nos volvemos a ver en esta vida, nos volveremos a ver en la otra”.

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