Los especialistas en el área afirman que los precios de cualquier lente, operación o tratamiento pueden variar hasta semanalmente por la escasez de insumos y la salida del país de laboratorios expertos en oftalmología.
La oftalmología no se salva de la crisis de salud que atraviesa Venezuela desde hace unos años. El área de la medicina que depende primordialmente de la tecnología se mantiene en el país con muchos tropiezos pero con miras a prevenir una ruina en ese sector de la salud.
Los oftalmólogos Sandra Sosa, Sigfrido Miranda y Jorge Gan, coinciden en que la poca asignación de divisas para este sector de la salud impiden que las casas comerciales y los pocos laboratorios oftalmológicos logren importar los insumos, las materias primas para los medicamentos y los tipos de lentes de contacto o intraoculares que no se producen en Venezuela.
A estos problemas se les suma el del equipamiento para la realización de exámenes primordiales en una consulta rutinaria. Miranda, médico de la clínica oftalmológica Visión Paraíso, asegura que: “Nosotros éramos un país punta en la opción de tecnología para atender a nuestros pacientes. Ya está ocurriendo que muchas de esas tecnologías ya no las estamos teniendo, no por conocimiento porque conocimiento tenemos, sino porque nos estamos quedando atrás en la obtención de equipos”.
Esta disyuntiva es una situación muy delicada, debido a que la oftalmología es la especialidad médica más dependiente de la tecnología para así detectar enfermedades o irregularidades en el músculo primordial de la visión.
La lista de cosas que no se consiguen en esta área de la salud se extiende mayormente a los medicamentos preventivos y a los post operatorios: “Si no tienen los medicamentos para el tratamiento para después de la intervención, se pospone la operación porque de lo contrario no puede cumplir el tratamiento”, asegura el oftalmólogo Jorge Gan, especialista en cirugía refractiva y segmento interior de la Clínica el Ávila.
Para prevenir esta situación, los tres médicos de la vista recetan largas listas de medicamentos en donde especifican cuáles pueden comprar si no consiguen el de la marca ideal para lo que necesitan. Según ellos mismos, los más complicados de conseguir son: mezclas de antibióticos con esteroides, antinflamatorios, gotas lubricantes (solo hay dos tipos en el mercado venezolano) y, en cuanto a lo necesario para las operaciones, es difícil conseguir suturas, la soluciones, el material descartable, inclusive los lentes intraoculares para cataratas y otros problemas visuales. «Y la tendencia es que esto se va a ir agudizando más», asegura Miranda.
«El tiempo de crisis obliga a la sociedad a solidarizarse» dice Sosa, oftalmóloga de Visión Salud, mientras explica que muchos de sus pacientes, al no encontrar algún medicamento, acuden a las redes sociales para buscarlos. Asimismo, Miranda explica que muchos de las personas que atienden recurren a sus familiares o amigos en el exterior para comprarlos y traerlos al país.
Las clínicas o consultorios oftalmológicos también han tenido un golpe de la crisis debido a que el flujo de pacientes ha bajado y los equipos necesarios para las consultas diarias ya no se consiguen como antes. El doctor Miranda explica que en Visión Paraíso no han podido conseguir más equipos. Sin embargo, asegura que la situación en el consultorio pudiese estar peor si no hubiesen prevenido la crisis de salud actual:
«Lo que les permitió seguir funcionando es que vimos que esta crisis se iba a presentar, lo avisamos hace un año atrás y tomamos las medidas para tener los insumos para funcionar el resto del año», asegura el oftalmólogo.
– Precios –
El cuidado de la vista en Venezuela, según los expertos, no es prioridad para el criollo. Aunque los precios de las consultas se mantienen por debajo del sueldo mínimo, el costo de los diferentes lentes de contacto, de las distintas monturas que ofrece el mercado y las múltiples operaciones que ofrecen las clínicas oftalmológicas, pueden variar semana tras semana si es que está disponible para su entrega.
– Recomendaciones –
«En estas condiciones debemos retomar la medicina preventiva como educativa», dice la oftalmóloga Sosa frente a la escasez de medicamentos y los altos costos de las operaciones. A continuación, les presentamos las recomendaciones de los tres expertos entrevistados.
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