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Educadores de Carabobo: no hay condiciones para regreso a clases semipresenciales

Las preocupaciones sobre la vuelta a las aulas son compartidas por profesores y padres y representantes, debido a que no observan un plan que garantice las condiciones de bioseguridad para evitar la propagación de la covid-19 en las instituciones educativas

olga ramos sistema educativo
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El anuncio hecho por Nicolás Maduro el 12 de febrero sobre el retorno a clases de manera semipresencial a partir de marzo para todos los niveles, ha causado dudas entre los profesores que ven con recelo la vuelta a las aulas sin las condiciones adecuadas para enfrentar la pandemia y considerando su precaria situación laboral.

Adicionalmente, manifiestan preocupación porque las edificaciones educativas no cumplen con la adecuación ni cuentan con servicios esenciales como el agua potable, por ejemplo. También reconocen que se mantienen las dificultades para los traslados en el transporte público, debido a la falta de dinero en efectivo y a las pocas unidades que se mantienen operativas.

En el estado Carabobo, los docentes se han reunido con sus organizaciones sindicales y con representantes para evaluar la nueva realidad que se les presenta y encuentran que no hay condiciones para el regreso a clases en el aula, pese a que se planifica la asistencia una semana sí y otra no.

Han declarado en diversos medios de comunicación de la región que les preocupa no saber cuándo les aplicarán la vacuna contra la covid-19, pues consideran que también son personal de alto riesgo a contagios.

Adelba Taffin, presidenta de la ONG Padres Organizados, destacó que los padres y representantes no han sido consultados sobre la conveniencia o no del retorno semipresencial a clases, bajo la modalidad del esquema 7+7.

“Es importante destacar que todos quisiéramos que se restableciera de manera regular la asistencia de los niños a la escuela, que se restableciera ese vínculo (…) pero ese retorno debería ser en condiciones seguras y, lamentablemente, el Estado venezolano no ha hecho ninguna inversión que garantice el regreso a las escuelas en condiciones de seguridad”.

Indicó que el Estado debe garantizar a los docentes un ingreso digno, un salario competitivo para que cubran todas sus necesidades. Además, se requiere que reparen la infraestructura de los planteles oficiales en el país porque en un 80% presentan graves deterioros.

Taffin aseveró que urge garantizar el suministro permanente de agua en los planteles educativos para que quienes asistan, tanto estudiantes, docentes o personal administrativo, puedan lavarse las manos de manera regular, tal como lo recomiendan los organismos sanitarios.

“Se necesita que el Estado garantice el suministro de los insumos de bioseguridad para evitar contagios masivos en las escuelas, tomando en consideración que la gran mayoría de estudiantes y docentes cuentan con los recursos necesarios para adquirir esos insumos”.

Añadió que en 90% de los planteles educativos solamente se hace limpieza si los padres y representantes donan los insumos para ese proceso, lo que a su parecer complica más la situación.

Es necesario, ¿pero se puede?

“Hace casi un año cuando empezó todo esto de la cuarentena y nos mandaron a nuestros hijos a casa a estudiar, yo pensaba que no podría con el estrés que me causaba atender a dos niños de 7 y 9 años con clases virtuales. Hoy por hoy, logramos terminar el año escolar pasado y nos arreglamos con ciertos horarios, pero la verdad es que no ha sido nada sencillo”, explicó Solangel Mora, asistente administrativo de una empresa de alimentos, de 41 años y residenciada en Valencia.

Mora narró a El Estímulo que el principal dolor de cabeza han sido, sin duda alguna, las fallas eléctricas y de internet. Lo inesperado de la suspensión de ambos servicios les obligó a planificar durante los fines de semana las jornadas de tareas.

Pero también se quejó de lo abrumadora que podían ser las asignaciones escolares: “Había días en que era imposible que los niños terminaran todas las tareas y me tocaba a mí, que vivo sola con ellos, ayudarles. Claro que les insistía en que ellos eran los responsables de sus tareas, pero si la luz se iba de 6 a 11 pm, cómo los mantenía despiertos y al día siguiente a las 7 am había que entregarlas. Ha sido arduo, difícil. No teníamos ninguna preparación para esto”.

Otra representante, María Luisa Pérez, de 39 años y vendedora de inmuebles, refirió que casi a un año del comienzo de la nueva modalidad de clases virtuales, siente la necesidad de que su hijo vuelva a clases de modo presencial.

Pérez, que vive sola junto a su hijo adolescente de 16 años en Naguanagua, estado Carabobo, dijo que lograr la disciplina de la asistencia a clases on line y el cumplimiento de los deberes asignados ha sido cuesta arriba porque los horarios se relajaron.

“Los muchachos quieren jugar videojuegos hasta la madrugada porque no sienten la presión de que tienen que levantarse temprano para ir al colegio. Aparte, algunos de los docentes no les animan mucho a que se mantengan activos en sus investigaciones o aprendizajes en general. Entonces cuesta estar pendientes de que hagan sus obligaciones y tareas. Yo pienso que si se cumplen las normas de bioseguridad pueden volver a clases, aunque no sea todos los días”, afirmó.

Y sin transporte

Juan Tortolero, secretario general de Sintraenseñanza Carabobo, uno de los sindicatos que agrupa a los docentes en laregión, dijo que los gremios del área en Carabobo consideran que no están dadas las condiciones para un inicio de clases presencial.

“No podemos convocar a los alumnos en nuestras escuelas ya que les faltan pupitres, están deterioradas, la maleza está crecida y los servicios básicos, como agua, luz y gas, no los tienen”, advirtió Tortolero.

De igual manera, señaló que hay dificultades para cancelar los pasajes del transporte público -debido a la escasez de dinero en sencillo- y con las fallas en la gasolina y diésel: otro impedimento más para que el retorno a las aulas sea adecuado.

“Hoy le decimos al gobierno que se asesore con los expertos internacionales de la Organización Mundial de la Salud que recomiendan el distanciamiento y las clases a distancia”, agregó Tortolero.

Luis Guillermo Padrón, presidente de la Junta Sindical Transitoria Sinvemaca, filial de la Federación Venezolana de Maestros, indicó que rechazan el llamado del Ejecutivo para volver a los salones de clases.

Recalcó que hay un elevado aumento de la deserción escolar y eso causa angustia a padres y docentes. “Sobre todo en el área de primaria tratan de hacer un simulacro real de lo que está ocurriendo y hemos visto con mucha preocupación que lo hacen constantemente. Ya sabemos que hay maestros que han muerto”.

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