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EEUU: China lleva musulmanes a centros de reeducación

Los documentos filtrados ponen de relieve una creciente colección de evidencia de que los líderes chinos son responsables de serias violaciones de derechos humanos en la región de Xinjiang, hogar de la minoría Uigur.

Documentos clasificados que muestran la presencia de campos de reeducación en China
AP |AP
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El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo que China lleva a cabo una masiva y sistemática represión de musulmanes.

Pompeo se basó en documentos filtrados que demuestran la represión del gobierno a las minorías en el occidente de China.

Los documentos filtrados señala Pompeo ponen de relieve una abrumadora y creciente colección de evidencia de que los líderes chinos son responsables de serias violaciones de derechos humanos en la región de Xinjiang, donde vive la minoría Uigur.

Los uigures son chinos de origen musulmán, la mayoría provenientes del centro de Asia.

En la región el Partido Comunista Chino controla la vida está con cámaras de vigilancia. Beijing implementó en la región, antes que en otras zonas del país, un sistema de puntos que premian o castigan a los ciudadanos.

“Detallan la detención brutal y la represión sistemática del partido chino contra los uigures y miembros de otros grupos musulmanes minoritarios en Xinjiang”, dijo Pompeo.

“Hacemos un llamado al gobierno chino para que libere de inmediato a todos los que fueron arbitrariamente detenidos y que ponga fin a estas políticas draconianas que han aterrorizado a sus propios ciudadanos en Xinjiang”, afirmó.

Estados Unidos y China viven un momento delicado en las relaciones bilaterales, y negocian para poner fin a la guerra comercial. Además Washington observa la situación en Hong Kong, donde las protestas pro democracia son violentas y hay enfrentamientos entre policías y manifestantes.

“Hay abusos de derechos humanos muy significativos. Demuestra que no es al azar. Es intencional y sucede en la actualidad”, indicó.

Las evidencias

Los documentos clasificados fueron proporcionados al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, y difundido por The Associated Press.

Muestran que los centros se usan para reeducación ideológica y conductual forzada.

También ilustran cómo Beijing utiliza un sistema de vigilancia de alta tecnología para aprehender a personas y para pronosticar quién cometerá un crimen.

Capacitación voluntaria para el trabajo es el motivo del gobierno chino para detener a más de un millón de miembros de minorías étnicas, la mayoría musulmanas.

Un proyecto clasificado muestra que los centros son como lo describen personas antes detenidas: centros de reeducación ideológica y conductual forzada que operan en secreto.

Los documentos exhiben la estrategia deliberada del gobierno chino de encerrar a minorías étnicas incluso antes de que cometan un crimen, y para reestructurar sus pensamientos y la forma en la que hablan.

Los documentos también muestran cómo Beijing innova una forma de control social utilizando datos e inteligencia artificial.

Al recurrir a datos recopilados por tecnología de vigilancia masiva, las computadoras dieron los nombres de decenas de miles de personas que interrogaron o detuvieron en sólo una semana.

Preocupación internacional

“Tenemos serias preocupaciones por la situación de los derechos humanos en Xinjiang y las cada vez más intensas medidas del gobierno, en particular la detención extrajudicial de más de un millón de musulmanes uigures y otras minorías étnicas”, dijo un vocero de la oficina británica de relaciones exteriores.

“Queremos ver el final de estas restricciones indiscriminadas y desproporcionadas a las libertades culturales y religiosas de los musulmanes uigures y otras minorías étnicas en Xinjiang”, agregó.

El ministro de relaciones exteriores alemán, Heiko Mass, dijo: “Si en efecto cientos de miles de uigures están detenidos en centros, entonces la comunidad internacional no puede cerrar los ojos”.

El ministerio del exterior de Japón dijo: “Creo que la libertad, respeto a los derechos humanos fundamentales y la ley, que son el valor universal de la comunidad internacional, también están garantizados en China”.

Mientras tanto, hay indicios de que China tomaba medidas para destruir evidencia documental de los abusos.

Un hombre que ahora vive en exilio dijo que el grupo uigur que conocía lo contactó en octubre. El grupo, encargado del trabajo administrativo en una oficina comunitaria en el sur de Xinjiang, dijo que el gobierno ordenó la quema y destrucción de los papeles.

“Todos los estantes están completamente vacíos”, dijo su amigo. El hombre se negó a identificarse por temor a que tomaran represalias en su contra o su familia.

El hombre dijo que los papeles en las oficinas son formularios que llenan funcionarios del gobierno que monitorean a todos en la comunidad. En los papeles se recaba información personal susceptible como estado civil, residencia registrada y si están detenidos.

Los datos de los formularios entra en una base de datos en una sala separada, mientras que los formularios se almacenan en los estantes.

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