Venezuela

El carnet de la patria repite como mecanismo de control en las elecciones

El patrón es común: los puntos rojos donde el oficialismo pasa asistencia de sus adeptos en cada comicio se asoman como elementos unidos a cada centro de votación. Para la elección de concejales no hay excepción, donde desde tempranas horas de la mañana estos puestos se convierten en el puente entre las urnas y quienes esperan una recompensa por su obligación.

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Carnet de la Patria
Fotografía: AVN

En una jornada en la que hasta horas de la mañana el flujo de electores era mínimo, los puntos rojos lucían como alcabalas oficialistas en pro de buscar el éxito en una fecha que tiene como ingrediente amargo la indiferencia del venezolano, hoy con el norte puesto en tratar de no dejarse llevar por la corriente de la crisis generalizada que somete al país.

En un recorrido hecho por El Estímulo en varios centros de la capital, algunos lugares en los que el pasado 20 de mayo, día de las elecciones presidenciales, había puestos oficialistas que hoy están ausentes.

La costumbre del Ejecutivo de premiar a los votantes no es cosa menor para muchos venezolanos que dependen de los elementos del gobierno para subsistir. Esa política dependiente ha alimentado esa maquinaria, hoy cada vez con menos seguidores pero cuya realidad en un territorio con menos espacio para el desarrollo es el de atar con fuerza a los pocos fieles.

En ese hábito por conseguir una recompensa que intente hacer frente a la escasez, varios esperan recibir un bono por su participación en la cita, haciendo del sufragio un acto más necesario que voluntario.

No obstante, el aparataje oficialista no da en el clavo.

Para las elecciones de mayo, los números alcanzados estuvieron por debajo de los inscritos en este documento creado por Nicolás Maduro y denunciado por la oposición de ser un instrumento de control social.

En aquella fecha, el presidente obtuvo 6.190.612 votos, dejando la incertidumbre sobre 9.559.388 personas con carnet de la patria no votó por su reelección.

De acuerdo con el mandatario, para diciembre del año pasado había al menos 15.750.000 inscritos en el carnet de la patria, el programa insignia del gobierno nacional para otorgar bonos y condicionar la entrega, en programas sociales, de alimentos y medicinas que escasean en Venezuela.

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