Gastronomía

El Gran Café no cierra: cambia de dueño pero conserva su nombre

El icónico café de Sabana Grande se encuentra cerrado temporalmente por remodelación. Sus nuevos dueños conservarán el nombre de este lugar donde confluían, sin distinción, caraqueños de todo oficio y de distintos orígenes

Publicidad
Gran Café
Daniel Hernández y Archivo de Bienmesabe

Aunque el Gran Café perdió su esplendor en los últimos años, el rumor de que cerraría sus puertas hizo lamentarse a muchos caraqueños para quienes representa un símbolo urbano. Sin embargo, no es así. El Gran Café de Sabana Grande continuará abierto.

Los propietarios decidieron vender el icónico café del bulevar de Sabana Grande. Los nuevos dueños lo están remodelando y por ello se ve la santamaría cerrada. Seguirá siendo un café y conservará su nombre.

Foto Daniel Hernández

Así lo comprobó el periodista Daniel Hernández, de El Estímulo, que se acercó al lugar al conocer los rumores que circularon en redes sociales.

Foto Daniel Hernández

Décadas siendo el café de Caracas

Según cuenta el cronista Alberto Veloz, la historia del Gran Café de Sabana Grande se inicia incluso antes de abrir sus puertas, con la construcción de la avenida Abraham Lincoln (que se conoce más como Calle Real) en los años 50 del siglo XX.

Le Grand Café. su nombre original, se hizo famoso por su aromático café, sándwiches como el Club House, merengadas de helado con crema y batidos de frutas.

café en caracas gran café
Gran Café de Sabana Grande

«Una verdadera delicia era observar el mar de mesitas con sus sillas de aluminio con asiento y respaldar de malla plástica entrelazada que se diferenciaban por los colores para cada sector de la amplísima terraza, con el clima más perfecto del mundo y plena de conspicuos personajes, no tanto por ser ilustres, que algunos sí lo eran, sino porque sobresalían del resto de los paseantes, normalitos y corrientes», escribió el cronista en un artículo de la revista Bienmesabe que puede leer completo haciendo click aquí.

Fue sitio de reunión de intelectuales, periodistas y escritores. Este grupo comenzaba a llegar a las mesas cerca de la 1 pm y se despedían en la noche. Pero también recibía a oficinistas de la zona o señoras que compraban en las elegantes tiendas del bulevar. Y, por supuesto, a estudiantes de la cercana Universidad Central que encontraban en el Gran Café un perfecto escenario de debates y alimentación intelectual.

«Su ubicación equidistante entre el centro y el este de la ciudad lo hacía el lugar de encuentro para gente de todas las condiciones sociales: económicas, políticas, culturales, donde cabían escritores de gran valía y los emergentes. Ministros de turno sin guardaespaldas. Poetas de lustre. Periodistas de alto vuelo. Artistas reconocidos y de cabaret (…) y pintores de toda talla donde sobresalió por su calidad plástica Pascual Navarro, versión tropicalizada de Dalí, con excéntricos trajes e innumerables sortijas, una en cada dedo, que lo hacían parecer un hippie con su hirsuta barba y sienes plateadas. Cientos de tardes, sentado frente a su caballete, pasaba largas horas pintando. En su justo honor y como homenaje, la ciudad designó la calle oeste del Gran Café con el nombre de calle Pascual Navarro», sigue contando Veloz.

Gran Café
El Gran Café en Sabana Grande

¿Qué le espera al nuevo Gran Café? Ojalá logre recuperar al menos algunas pinceladas de lo que fue en la Caracas bonita que tanto se recuerda.

Publicidad