La empresa, con sede en Estados Unidos, recibió en junio un permiso del gobierno de Aruba para renovar, reiniciar y operar la refinería con capacidad para procesar 235.000 barriles por día y una terminal adjunta, bajo un contrato de arrendamiento por 25 años, reseñó Reuters.
Pdvsa convocó hace escasos cinco días a acreedores para que participen en un canje de bonos por $7.100 millones con vencimiento en 2017 por otro de vencimiento en 2020 en condiciones que el mercado no recibió positivamente.
El prospecto de la oferta incluye 50,1% de las acciones de Citgo como garantía para el cambio voluntario de papeles, y un cupón de 8,50%, por debajo de lo esperado por los tenedores de títulos.
La operación cerrará el 14 de octubre. No obstante, la calificadora Standard & Poors dijo que de concretarse el canje sería considerado un default y rebajó la calificación de la deuda de Venezuela de B- hasta CCC+.