La crisis eléctrica se agudiza con el pasar de los días y la ausencia de medidas efectivas por parte del gobierno empeora aún más la situación que, para los expertos, solo demuestra la falta de pericia del Ejecutivo.
La cota del embalse de Guri se ubicó en 247,56 m.s.n.m el 10 de marzo, 9,8 metros menos que los 257,36 m.s.n.m que tenía el 9 de febrero de 2010 cuando el entonces presidente Hugo Chávez declaró la emergencia eléctrica en Venezuela. Aún así, el gobierno de Nicolás Maduro no ha decretado la gravedad de la situación.
Para el ingeniero eléctrico Miguel Lara, el Estado no sabe qué acciones tomar ni cómo justificar el tiempo que ha tardado en asumir el gran problema que está enfrentando.
«La emergencia eléctrica se debió decretar en agosto de 2015, cuando Jesse Chacón fue separado del cargo y sustituido por Luis Motta Domínguez. ¿No fue extraño que en plena época de lluvias se anunciara el bombardeo de nubes? Él sabía que el embalse estaba en una condición crítica y que la generación termoeléctrica estaba muy mal», sostuvo el especialista durante una entrevista con El Estímulo.
Lara consideró que la ausencia de medidas en 2015 se debió a las elecciones parlamentarias. «En lugar de declarar la emergencia y comenzar a racionar, prefirireron seguir abusando del embalse. Desde septiembre se vienen registrando niveles mínimos históricos en el Guri y han responsabilizado al fenómeno El Niño de todo», agregó.
Desde la designación de Motta Domínguez como ministro de Energía Eléctrica, la cota de Guri ha bajado 11,95 metros al pasar de 259,51 m.s.n.m el 25 de agosto de 2015 a 247,56 m.s.n.m el 10 de marzo, a lo que se le suma la inoperatividad de grandes centrales térmicas, como la Ramón Laguna (Zulia), Tacoa (Vargas) y Planta Centro (Carabobo), y de una turbina de la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar por falta de mantenimiento durante su gestión.
A continuación, una lista de los puntos fundamentales que, de acuerdo con los especialistas, han originado la crisis eléctrica en el país:
-Un cambio de huso horario en 2007 que, según expertos, empeoró el requerimiento de gigavatios-hora diarios en 2,5%.
-Grandes inversiones hechas en 2008 en plantas eléctricas cubanas cifradas en 1,3 millardos de dólares, que no aportaron ni 500 megavatios al Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
-Adquisición de turbinas de segunda mano con sobreprecio a través de 12 jugosos contratos por $2.200 millones a través de la empresa Derwick Associates.
-Creación del Parque Eólico de La Guajira en 2011, con una inversión de alrededor de 200 millones de dólares, que aún no está operativo.
-Falta de mantenimiento en las centrales termoeléctricas.
-Promesas incumplidas: Construcción de la central hidroeléctrica Manuel Piar en Tocoma.
Vender otra vez electricidad a Brasil, como ofrece Nicolás Maduro en su reciente visita a Brasilia, es posible a pesar de los problemas en Venezuela. Lo que no puede hacer su régimen es enviar esa carga eléctrica al centro y occidente de Venezuela donde los apagones son constantes. Incluso, ni siquiera a Caracas, ciudad intocable, que día a día siente más el descalabro del sistema eléctrico.
Solo en el estado Zulia, se dieron 40.877 fallas eléctricas en 2019, lo que representa la mitad de las fallas de todo el país. Mientras tanto, en el Paseo de Los Próceres, las luces navideñas recubren hasta el último tronco de los árboles del lugar
La Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción del estado Zulia (Fedecámaras Zulia) denunció que durante el pasado mes de mayo, el sector productivo de esa entidad se ha visto paralizado por la escasez de combustible, "que tiene parado el transporte de mercancías, trabajadores y clientes", y por la crisis eléctrica.
