Empresas y Negocios

Con el modelo Hilux podrían arrancar las exportaciones de Toyota este año

Será en agosto cuando se reanuden las operaciones en la planta de Cumaná, donde apenas se tiene previsto ensamblar 1.400 unidades, de las cuales 140 serán del modelo ‘popular’ y otro tanto podría ir al mercado externo.

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@jahurtado15

En medio de la peor crisis histórica de la industria automotriz nacional, la filial venezolana de Toyota espera concretar este mismo año la exportación de las primeras unidades ensambladas en el país, medida que permitirá obtener divisas con las cuales asegurar la operatividad de la planta de Cumaná.

“Creemos posible que este mismo año podamos estar enviando las primeras unidades, que serían pocas al comienzo”, afirma Wilfredo Valdivia, gerente de Relaciones Institucionales de Toyota de Venezuela, quien aclara que los países andinos (Bolivia, Colombia y Ecuador), serían los principales destinos de las unidades, que más adelante también podrían ser direccionadas a islas del Caribe, Cuba entre ellas.

El plan no es nuevo. Desde principios del año pasado y ante las dificultades para obtener divisas oficiales, el presidente de Toyota para América Latina y el Caribe, Steve St. Angelo, asomó la posibilidad de que la planta de Cumaná pudiera exportar hacia países de la región tanto vehículos terminados como partes y piezas.

Esta posibilidad se vio apoyada por el plan de recuperación del sector propuesto en marzo pasado por el gobierno de Nicolás Maduro, según el cual las ensambladoras podrán exportar hasta 10% de su producción con miras a obtener parte de las divisas necesarias para la compra de material productivo.

Al respecto, Valdivia explicó que si bien el familiar Corolla sería el modelo idóneo para el proyecto pues sale de planta con todo el equipamiento para operar con gas natural –sistema que es muy solicitado en otros países-, es muy probable que sea la pick-up Hilux el modelo que arranque las exportaciones.

– Sin pausa pero sin prisa –

Pero nada de esto se concretará en lo inmediato. De hecho, Valdivia señaló que el arranque de la planta no se concretará hasta finales de agosto, en virtud de que será a mediados de ese mes cuando arribe al país el primer lote de kits de ensamblaje adquirido por la empresa, en el marco del acuerdo firmado con el Ejecutivo para la reactivación del sector.

El pacto reproduce el esquema aplicado por Ford Motor desde el año pasado, según el cual los concesionarios de cada marca aportan dólares para la compra de material de ensamblaje, las automotrices arman los carros, y los concesionarios recuperan su inversión con la venta de las unidades en dólares excepto 10% de la producción, que será comercializada en bolívares bajo la denominación de vehículo popular.

“Ya hicimos el primer pedido de material pero tardará cuatro meses en llegar”, señala Valdivia, con lo cual se aclara que la producción de en la planta cumanesa no se ha reiniciado, como lo señalara en días pasados el vicepresidente para el Área Económica, Miguel Pérez Abad, cuando afirmó que ya se estaban produciendo los primeros vehículos populares.

Valdivia también dijo que las expectativas de ensamblaje para este año se limitan a unas 1.400 unidades, lo que representaría una caída de 60% frente a las 3.440 producidas en 2015.

“Nuestra prioridad es reanudar la planta que no produce un vehículo desde diciembre del año pasado”, acota el vocero, al tiempo de aclarar que el arranque será progresivo, por lo que las órdenes de pedido de material se harán mes a mes e incrementándose paulatinamente.

Afirma igualmente que no está previsto producir todos los modelos de la gama actual, y aunque declina señalar cuáles serán ensamblados, se da por descontado que entre ellos estarán la Hilux y el Corolla.

De cualquier manera, de las unidades a producir 10% (unas 140) serían para la exportación y otro 10% sería de vehículos populares.

Sobre el modelo de venta en bolívares, el representante de Toyota aclaró que el sistema de venta aún no ha sido concretado, pues aunque los autos serían comercializados por los concesionarios de cada marca, todavía se desconoce el mecanismo. “El gobierno está analizando el sistema y lo anunciará a su tiempo”, dijo.

La semana pasada, voceros de la industria que optaron por reservar su identidad señalaron que el acuerdo para la producción de estos autos preveía que fueran comercializados directamente por el gobierno al amparo del programa Venezuela Productiva Automotriz, alternativa que fue rechazada por las productoras que solicitaron la revocatoria de esta medida.

En cuanto al precio que tendrá el modelo popular -que en el caso de Toyota será el Corolla- el vocero dijo que si bien aún no hay un monto concreto, el valor será determinado de acuerdo con la tasa Dicom vigente para el momento.

– Viento a favor –

Las expectativas de Toyota en consolidar este año la exportación de vehículos se sustentan, en buena medida, en el programa de exportación de partes y piezas nacionales que arrancó en diciembre pasado con el envío del primer lote con destino a Argentina, y que la semana pasada concretó el segundo despacho.

Matteo D’Abrizio, gerente general de Compras y líder del proyecto, explica que la iniciativa tiene el mismo fin reconquistar la confianza de los mercados externos en las piezas fabricadas en el país y generar divisas que, aunque no es 100% de lo requerido, permitirá la reactivación de dos productores asociados a la empresa.

Para esta segunda etapa del proyecto se incorporaron tres nuevas piezas que son fabricadas por proveedores de Toyota (Metalpartes Espósito y Mamidel). La ensambladora compra las piezas, las empaca y despacha hacia Argentina, donde son distribuidas a otros países del Mercosur.

D’Abrizio explica que en una tercera etapa (septiembre 2016) se incorporarán otras piezas (entre ellas condensadores de aire acondicionado), y posteriormente se irá incrementando en número de ítems hasta completar las 18 partes que se tiene previsto exportar.

Aclara además que aunque de momento las piezas son sello venezolano son destinadas al mercado de reposición (repuestos), existe la posibilidad de suministrar partes para las ensambladoras del cono sur, con lo cual el volumen de exportación se elevaría considerablemente.

Sobre lo dólares obtenidos, el vocero aclara que tal como establece la normativa vigente, el 60% es manejado por Toyota para la compra de materia prima a fin de mantener el proyecto, y el resto es vendida a Banco Central a tasa Dicom.

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