Un recorrido realizado por El Estímulo en mercados municipales, supermercados y otros comercios determinó que no hay una fruta que sea más económica porque en todos los comercios visitados varía su precio y termina siendo más cara que las demás. Por ejemplo, la semana pasada el limón costaba Bs 470 en el Excelsior Gama, pero en el mercado municipal de la Alcaldía de Sucre en Santa Eduvigis, tiene un precio de Bs 800, es decir, una diferencia de 70%.
A excepción del limón, ninguna fruta de las encontradas bajaba de Bs 500 el kilo. En febrero de 2016 ya comenzaba a complicarse la compra de frutas. El kilo de mandarina y guayaba costaba Bs 435 y 450, respectivamente, ahora, tienen precios de Bs 1.065 y Bs 620, un aumento de 133% y 38% para cada uno en solo seis meses.
«Ahora tengo que comprar menos. Antes tú podías hacer un mercado de varias frutas, pero nadie puede comprar una manzana a mil bolívares, es demasiado», afirmó una consumidora.
El cambur, que era una de las más económicas, se consigue en los establecimientos a precios que oscilan entre Bs 900 y Bs 1.100, el mismo precio de las fresas en ciertos establecimientos o incluso más en otros como en el mercado de Quinta Crespo donde el kilo de fresas se puede conseguir en Bs 400.
Y es que el exótico kiwi se consigue en Bs 800, por debajo del otrora económico cambur.
«¿Cómo compro un kilo de cambur si está a mil bolívares? Ya no puedo, he tenido que comprar menos o buscar otros sitios donde vendan las frutas más baratas», dijo una compradora en el supermercado Excelsior Gama.
Los mangos, fruta con los nutrientes suficientes para alimentarse en tiempos de escasez de alimentos, ya no se ven con tanta frecuencia en los supermercados porque la temporada ya concluyó y su precio subió.
En el Excelsior Gama cuesta Bs 540 el kilo y en el Automercados Plaza, Bs 600. Sin embargo, en el mercado municipal de Santa Eduvigis, tiene un precio de Bs 1.000, una diferencia de 85% con respecto al primer precio y de apenas unas pocas cuadras.
«No te voy a mentir, he tenido que comprar más porque aquí estamos sobreviviendo y uno tiene que sustituir como pueda. Todo está muy caro pero tenemos que comprar lo que podamos», añadió otra cliente.
Aunque el Banco Central de Venezuela no ha dado a conocer la inflación de lo que va de año, la variación mensual de los precios de los bienes y servicios se ubica sobre 20%, de acuerdo con analistas independientes. Sin embargo, en los resultados ofrecidos por el BCV hasta 2015, la categoría Alimentos y bebidas no alcohólicas apuntalaba el alto costo de la vida.