Economía

Escasez de arroz y pastas regulados impulsa ventas de vegetales y tubérculos

La escasez de los productos regulados como arroz, pasta y harina de maíz precocida ha obligado a los consumidores a sustituirlos por tubérculos y vegetales como papas, batatas, yuca, plátano y zanahoria, que en algunos casos son tan costosos como los alimentos regulados que se encuentran en el mercado negro.

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La paralización de las principales industrias venezolanas por falta de divisas ha traído como consecuencia 56% de escasez en la harina de maíz y 65% en arroz y pasta, según datos proporcionados por el gobierno. Se suma la actuación de los bachaqueros que revenden los productos entre 15 y 20 veces más su precio regulado, de acuerdo con el presidente de la firma Datánalisis, Luis Vicente León.

Un recorrido realizado por El Estímulo constató que en los supermercados y mercados municipales ha aumentado la venta, principalmente de papas, desde hace aproximadamente dos meses, debido a que la llegada de los alimentos de la cesta básica a los establecimientos cada vez es en menor cantidad y no cubre la demanda total. Además, hay que hacer enormes colas para poder adquirirlos, si se corre con suerte.

«Nos damos cuenta de que se ha vendido más porque cuando no llega arroz o pasta, los vegetales se acaban más rápido», aseguró un trabajador del Automercados Plazas, ubicado en el Centro Plaza de  Los Palos Grandes. El kilo de papa cuesta 1.100 bolívares, lo mismo que un kilo de arroz o de pasta en el mercado negro, mientras que el kilo de batata se consigue en 915 bolívares y el plátano en 490.

Una clienta del Excelsior Gama de Santa Eduvigis afirmó que en su casa sí ha aumentado la compra de esos alimentos. Agregó que tienen una empresa de delivery de almuerzos y «se nos ha hecho muy difícil porque no conseguimos arroz y hemos tenido que comprar otros productos. Las pocas veces que he hecho cola se acaba rápido y no logramos comprar».

En ese mismo supermercado el kilo de papa cuesta Bs 1.180, el de yuca, Bs 1.125 y el plátano tenía un precio de Bs 575.

En el automercado Luvebras de La Castellana una clienta detalló que «más que para sustituir, he tenido que comprar  vegetales y tubérculos para rendir los productos, sobre todo la harina, porque no sé cuándo voy a volver a comprar». En su caso, los vegetales forman parte de su dieta diaria, pero los tubérculos son ahora los nuevos integrantes.

Un trabajador de ese local aseguró que pueden notar el aumento en las ventas porque aproximadamente cada 3 horas deben reponer el inventario. El kilo de zanahoria está en Bs 1.658, por ejemplo.

En el interior del país se ve más complicada la compra de los alimentos regulados. Otra consumidora relató que su hermana, quien reside en el estado Lara, ha tenido que incrementar la compra de plátano y batata, principalmente, porque es más difícil conseguir harina, arroz y pasta en el interior del país.

En el mercado de Quinta Crespo, los precios de la papa disminuyen en relación a los supermercados y están entre Bs 800 y 1.000. Mientras que la yuca cuesta Bs 600.

Los trabajadores aseguran que, al igual que en otros establecimientos, se ha incrementado la venta especialmente los fines de semana.

No se tiene un estimado de cuánto han aumentado estos rubros en lo que va de año, pero los empleados de todos los locales comerciales visitados aseguran que se trata de precios muy inestables porque así como algunas veces llegan más caros, otras, disminuye. El kilo de tomate se puede conseguir en Bs 1.190.

Los precios de los alimentos siguen su curso indetenible, mientras los salarios se quedan rezagados en comparación con la velocidad con la sube el costo de la vida. Con un sueldo mínimo, recientemente aumentado a Bs 15.051,15, hay que destinar buena parte del presupuesto familiar para la compra de vegetales y verduras. Solo en 2015 la inflación de alimentos se ubicó en 315%.

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