Economía

¡Qué mala suerte tener petróleo!

Venezuela se encuentra en una situación catastrófica y hay una serie de explicaciones de fondo sobre las razones.

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Por Marco Aurelio Rodríguez @MarcoAurelioRSU

La teoría general bastante aceptada indica que el “exceso” de petróleo en Venezuela ha sido ejemplo global de lo que la enfermedad holandesa puede causarle a un país; el enorme flujo de dólares provenientes del petróleo ocasionó que solo produjéramos eso. En consecuencia la economía es vulnerable a sus volátiles precios, con períodos alternados de riqueza y pobreza.

Además, también estamos sujetos a un “ciclo fiscal” en donde se expande fuertemente el gasto y endeudamiento en épocas de altos precios y así no se ahorran fondos para tiempos en los cuales los precios bajan. Esto representa un populismo crónico, con gobiernos que buscan ventajas políticas inmediatas despilfarrando los recursos que luego deben recortar fuertemente, sin mayores posibilidades de emprender políticas serias de largo plazo.

Más aún, esta realidad de un estado con épocas de “mucho” dinero han creado una cultura corrupta que está impregnada en el ADN venezolano. A todo nivel en Venezuela hay corrupción, desde colearse para comprar pan, sobornar policías en las infracciones de tránsito, hasta los más escandalosos guisos en contrataciones con el gobierno. Esta cultura costará muchísimo cambiarla y por lo tanto las cosas podrían mejorar con un gobierno más serio y de derecha, pero el desorden continuará.

Todas estas cosas son verdades a medias. En primer lugar, la caída brutal del PIB por habitante en Venezuela no tiene que ver con que solo se produzca petróleo, sino más bien con que no se produce petróleo. Las décadas 50, 60 y 80 de la Venezuela saudita se caracterizó por un alto nivel de vida en continuo incremento.

A partir de ahí solo en períodos pequeños hubo algún cambio en la producción (Gran Viraje y Apertura de Caldera). La verdad hoy se produce considerablemente menos petróleo que en los 70’s, por habitante es aproximadamente un tercio de lo que hacíamos más de 40 años atrás.

Arabia Saudita solo exporta petróleo, pero produce sobre cuatro veces lo que Venezuela con menos reservas y más o menos la misma cantidad de personas. Vaya enfermedad holandesa…

El populismo es innegable, pero es difícil sostener con evidencia que es causa de nuestros males, total ésta es una enfermedad que padece con seriedad todo nuestro continente. Sin embargo, otros países latinos, aunque hayan sufrido algo con las caídas de precios de materias primas, no presentan ni remotamente la crisis que vivimos aquí.

La corrupción “natural” del venezolano tiene realmente poco sentido. Si pusieras a unos suizos a manejar a Cadivi ellos seguramente se portarían igual que lo hacen aquí. Un venezolano, tras la segunda multa ya maneja igual que un suizo. En Singapur se castiga con látigo y pena de muerte a funcionarios corruptos, y los salarios de los funcionarios públicos son los más altos del mundo ¿Esto no explica mejor la ausencia casi total de corrupción allí?

Total que todas nuestras desgracias tienen explicación, pero realmente hemos tenido muy mala suerte. El carisma de (Hugo) Chávez es un mito; si bien era capaz de comunicarse bien con un sector de la población, realmente me hubiera gustado ver cuán simpático les era sin dinero.

Él fue extremadamente afortunado en vivir una bonanza sin precedentes, por lo que no se preocupó en lo más mínimo por temas de producción. Solo regalos y deudas. Un gobierno tan incompetente no hubiera podido sostenerse sin esos precios del crudo.

Nicolás Maduro, por otro lado, me parece un mago para mantener tan alta popularidad en las circunstancias actuales del país, ya sumergido en hiperinflación desatada y crisis humanitaria y alimentaria.

Si el problema político se resuelve, yo empezaría aumentando agresivamente la producción del petróleo, para volvernos más independientes de él.

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