Hay muchos condicionantes de entrada para pensar que no se puede. El primero, que siempre como venezolanos creemos que somos muy poco para que la tecnología de punta nos pueda ayudar, lo vemos como algo inalcanzable. Si a eso sumamos la grave crisis económica por la que atraviesa la nación, el negativismo se acentúa, pero si añadimos a la llama los tizones de la falta de recursos en la FVF y que muchos equipos de Primera División aún no cancelan los salarios del año a sus extranjeros, caeremos en el coma del pesimismo.
Desde ese punto de vista podemos terminar aquí la columna y decir que no puede ser opción, pero hay que desgranar el tema desde su entramado componencial para analizar si realmente es posible que el VAR disminuya las controversias por decisiones arbitrales en el campeonato nacional con su implementación.
Analizamos un ejemplo: Jorge Enrique Vélez, presidente de la DIMAYOR, entidad que administra el fútbol de Primera y Segunda División en la vecina Colombia, aseguró que a más tardar dentro de año y medio, Colombia aplicará el VAR en todos los partidos de su campeonato. Indicó que la tecnología representará un desembolso de entre dos y cuatro millones de dólares, que serían costeados por FIFA, Federación Colombiana de Fútbol (se beneficiaría porque en las eliminatorias sudamericanas mundialistas la tecnología deberá ser aplicada) y la propia DIMAYOR.
Una ventaja primigenia que tiene el fútbol del vecino país es que todos sus partidos de Primera son televisados, cosa que no ocurre en Venezuela. Por eso, la idea inicial de utilizar un servicio de asistencia arbitral en el balompié criollo sería de contar con la tecnología en la instancia decisiva, la Liguilla hasta las finales, donde se garantiza transmisión televisiva en vivo.
Partiendo de ahí, hemos consultado a directores, ingenieros y técnicos de la empresa productora de las transmisiones del fútbol venezolano, T & H Producciones, si es posible facilitar las herramientas tecnológicas necesarias para disponer del sistema de cámaras necesario para la adecuación del VAR y la respuesta ha sido afirmativa. Desde el punto de vista de la factibilidad técnica, no habría problema para que en la Liguilla FutVE se pueda utilizar un sistema de video asistencia arbitral.
No obstante, asegurada la factibilidad técnica, existe un impedimento: la IFAB (entidad encargada de definir las reglas del fútbol a nivel mundial y sus modificaciones) debe brindar el visto bueno para que en competiciones federadas sea aplicado un sistema de video asistencia. Conmebol y FIFA pueden facilitar hasta un 50% del financiamiento del proyecto, pero el mismo debe cumplir los mínimos estándares exigidos por la IFAB, los cuales, entre otras exigencias, solo pueden utilizar la tecnología que proveen 14 empresas autorizadas (sí, el VAR también es visto como un negocio). No es montar una sala con televisores que reproduzcan lo que filman las cámaras de una móvil. No es tan sencillo.
En un espejo, visto lo que se adelanta en Colombia, un proyecto de VAR para Venezuela debería contar con el compromiso de aporte de la propia FVF y la Liga FutVE en cuanto a recursos financieros se refiere, entendiendo que los costos serían menores al limitarse a utilizar el sistema en la Liguilla de cada Torneo y las finales correspondientes.
Hay un aspecto vital: el elemento fundamental para aplicar el sistema VAR no es el relacionado a los recursos para obtener la tecnología. Tiene que ver con la preparación arbitral para la utilización del sistema, lo que puede superar un año calendario. Árbitros venezolanos internacionales como Jesús Valenzuela, José Argote, Alexis Herrera, Carlos López o Jorge Urrego han recibido capacitación y participado en competiciones continentales donde se aplica la asistencia tecnológica arbitral, por lo que su apoyo como multiplicadores de conocimiento es una ventaja enorme, pero requeriría de un plan bien consensuado para la formación.
El presidente de la DIMAYOR en Colombia ha revelado que ese país está listo ya para la aplicación de la tecnología, que el retraso solo se debe a los planes de capacitación que deben cumplir sus árbitros, necesario y esencial para alcanzar el alto nivel en la precisión de las decisiones y disminuir los tiempos de las mismas. Ahí es donde se debe invertir el mayor tiempo.
Visto lo anterior, la aplicación del sistema VAR en Venezuela es factible siempre que exista voluntad de todas las partes para financiar y llevar a cabo el proyecto. Ahora bien, que la disponibilidad de recursos tenga otras prioridades tanto para la FVF como los clubes de la liga sea una realidad, obliga a pensar que desde la vista real, es muy complicado que en un corto o mediano plazo esta tecnología sea aplicada en el país, pero no es imposible.
Vienen las eliminatorias mundialistas y en el estadio donde el cuerpo técnico de Venezuela decida jugar como local debe instalarse este sistema. Ahí se estará más cerca de una solución para reducir tanta suspicacia.]]>
