Los partidos que apoyan al Gobierno de Venezuela, agrupados en el llamado Gran Polo Patriótico (GPP), pidieron a la oposición del país desmarcarse del supuesto plan de golpe de Estado que ya fue frustrado, según la información ofrecida ayer por el presidente Nicolás Maduro.
«La oposición no tiene, no le queda, no puede, tener otro camino que el deslinde, el que no se deslinda se hará cómplice por omisión», dijo en una rueda de prensa el representante del GPP Rafael Uzcátegui, que subrayó como un hecho grave que el diputado opositor Julio Borges, haya sido señalado por voceros del Gobierno como partícipe de este plan.
Uzcátegui indicó que la oposición no puede «hacer silencio, omitir o tratar de banalizar lo que está sucediendo» y señaló que este supuesto plan tiene serias implicaciones.
Recordó que, según el presidente y voceros del Gobierno, «hay oficiales de la fuerza armada detenidos, hay civiles y hay incluso diputados acusados en el caso como Julio Borges, una de las autoridades importantísimas de un partido opositor como Primero Justicia (PJ)»:
«O sea que [Julio Borges] está señalado y podría ser detenido».
Primero Justicia respondió que rechazan las acusaciones:
Rechazamos las acusaciones irresponsables del gobierno en contra de @JulioBorges,que sólo revelan el miedo que tienen al cambio #PJSinMiedo
— Primero Justicia (@Pr1meroJusticia) febrero 13, 2015
El vocero del GPP dijo que ahora se inicia un «proceso jurídico muy complicado» que puede llevar al Parlamento venezolano a tomar «medidas» sobre Borges, «que ha sido señalado abiertamente».
Maduro informó ayer que su Gobierno frustró un nuevo plan de golpe para derrocarlo y anunció que ya fue detenido un grupo de personas, entre los que se cuentan oficiales de la Fuerza Aérea, en una estrategia «trazada desde Washington».
Dijo que entre el miércoles 11 de febrero y la madrugada del 12 de febrero se hicieron varias detenciones de los presuntos involucrados en este plan en el que también estarían involucrados opositores.
Entre los objetivos de ese ataque, que sería ayer, se encontrarían, según Maduro, el palacio presidencial de Miraflores y el lugar donde él estaba participando en los actos de celebración del Día de la Juventud cuando también se cumplía un año del inicio de una ola de protestas antigubernamentales que dejó 43 muertos.
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