La junta militar de Sudán nombró como nuevo jefe del Estado Mayor al general Hisham Abdelmotalib Ahmed Babakr, un día después de que pasase a retiro su predecesor, Kamal Abdel Maaruf, quien sirvió bajo el mando del expresidente Omar al Bashir, derrocado el pasado jueves.
Babakr, que ocupaba hasta ahora el cargo de adjunto del jefe del Estado Mayor, fue promovido por decisión del presidente del Consejo Militar Transitorio, Abdelfatah al Burhan, según un comunicado oficial.
Además, Burhan nombró al jefe de la Armada, general Abdala al Matari al Fardi, como Inspector General de las Fuerzas Armadas, que se considera el tercer cargo más importante en el escalafón militar, un puesto que ocupaba el actual jefe de la junta militar.
La junta militar pasó a retiro el domingo al exministro de Defensa Awad bin Auf, que encabezó la junta en las primeras 24 horas tras el derrocamiento de Al Bashir, y al jefe del Estado Mayor del Ejército, que sirvieron bajo el mando del expresidente.
Del mismo modo, la junta cesó al embajador sudanés en Washington y anunció la revaluación de la situación de los embajadores en otros países.
Los generales se reunieron este domingo con representantes de las fuerzas políticas en el centro de convenciones de Jartum para dar comienzo a las negociaciones sobre la transición.
Los militares les pidieron a los opositores que presenten sus «sugerencias y puntos de vista» por escrito a lo largo de esta semana, incluidas sus condiciones para la formación de un gobierno civil y un candidato a primer ministro.
La junta militar anunció este domingo que el Partido del Congreso Nacional, que gobernó Sudán en los últimos 30 años de la mano de Al Bashir, estará excluido de las negociaciones del futuro gobierno.
Un general, que formaba parte del gobierno de transición, detuvo al primer ministro y otros líderes y declaró "estado de emergencia"
Sudán entregará al expresidente Omar al Bashir a la Corte Penal Internacional (CPI), donde se le busca desde 2009 para responder de acusaciones de genocidio y crímenes de guerra durante el conflicto de Darfur, afirmó un alto funcionario sudanés.
El dictador y exmilitar de 75 años de edad, que dirigió el país con mano de hierro por 30 años, fue juzgado por un tribunal especial y declarado culpable de corrupción y posesión ilegal de fondos extranjeros.
