Salud

La peste bubónica se contagia a través de la saliva

China alertó sobre un posible brote de peste bubónica. Esta enfermedad se transmite, inicialmente, a través de la picada de una pulga que habita en un roedor infectado pero, luego, de humano a humano o de animal a humano a través de las gotas de saliva

Publicidad
peste bubonica
AFP / Archivo

Como si fuera poco, China alerta sobre otro brote de una enfermedad contagiosa en su país. Esta vez es la peste bubónica.

Autoridades médicas del norte de China, alertaron sobre un posible caso de peste bubónica en la ciudad de Bayannur, cercana a Mongolia, país donde se registraron otros dos casos. El paciente chino sería un pastor que debió ser hospitalizado.

La peste bubónica se transmite básicamente de dos maneras. Una, por la picadura de una pulga que primero se alimentó con la sangre de un roedor infectado (suelen ser ratas) con la bacteria Yersinia pestis. Otra, por el contacto con los orines o la saliva de los roedores o animales infectados. Es importante saber que también puede afectar a otras especies que viven cerca de los roedores, como conejos, o a las mascotas.

Luego, de humano a humano, puede transmitirse a través de las gotas de salive que emite un enfermo.

La peste bubónica fue la causante de la peste negra, la epidemia que mató a millones de personas en el siglo XIV. Su origen se ubica, precisamente, en Mongolia.

Al entrar al organismo, la bacteria busca un ganglio linfático donde alojarse y reproducirse. Por eso, una de las características de esta peste son los ganglios de enorme tamaño y dolorosos. Estos bubones, como se les conoce, suelen verse en las axilas, la ingle y el cuello. Cuando no se trata a tiempo y la infección se generaliza, la enfermedad pasa a denominarse peste septicémica. Y si logra alcanzar los pulmones, peste neumónica. En ese caso, si se sienten dificultades para respirar, es conveniente usar mascarilla para evitar contagiar a otros.

Los síntomas

Las señales sospechosas de la enfermedad comienzan a manifestarse entre uno y 7 días después de contraerla.

Además de los ganglios inflamados, otros síntomas de la peste bubónica son fiebre alta, escalofríos, dolor de cabeza, dolor muscular y malestar general. A veces puede presentarse con convulsiones.

Cuando evoluciona a peste neumónica o septicémica, se presentan otros síntomas, como tos, dificultad respiratoria, fiebre, diarrea y sangrado.

Esta enfermedad es peligrosa. Incluso si se trata a tiempo puede llegar a una tasa de letalidad de 10 %. Si no se atiende, la mortalidad oscila entre 30 y 60 %. El tratamiento es con fuertes antibióticos, atención hospitalaria y aislamiento.

El diagnóstico suele hacerse extrayendo líquido de los ganglios inflamados. La bacteria solo está presente en la sangre si ya se generalizó la infección.

Alerta duradera

Aunque las autoridades chinas le colocaron un nivel de alerta 3 de 4 a la peste bubónica, lo que es el segundo más bajo de alarma, extendieron el aviso hasta diciembre «para controlar y prevenir  los posibles brotes», informó Efe.

Reportaron un solo caso, pero pidieron a los ciudadanos ser precavidos «ante el riesgo de contagios de persona a persona», por lo que se sospecha que puedan haber más pacientes que no se han hecho públicos. Recordemos que, con el nuevo coronavirus, China buscó ocultar la información presionando a los médicos que hablaban sobre la nueva enfermedad. La misma OMS ha admitido probables casos de COVID-19 desde octubre, aunque China admitió oficialmente su existencia el 31 de diciembre de 2019.

Actualmente, los tres países más afectados con la peste bubónica, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), son Madagascar, República Democrática del Congo y Perú.

Fuentes

CDC.gov 

Medlineplus.gov

Clínica Mayo

Publicidad
Publicidad