No hay quien conozca las cifras exactas. Sin embargo, algunos estudios preliminares, poco conclusivos, señalan que más de un millón de venezolanos se han ido del país en los últimos 15 años. Están desperdigados en el mundo. Una nueva colonia se asienta en Perú. Aquí cuentan sus testimonios de vida y relatan cómo ha sido ese periplo de emigración.
Perú ya dejó de despedir a sus hijos quechuas. Dejó de ser un país de emigrantes a ser uno que los adopta. Los venezolanos, espantados por la violencia, la inestabilidad política y económica, huyen del país que acogió a sus padres y a sus abuelos. Para muchos perdió la gracia de la que los venezolanos «se las echaban» cuando aterrizaban de vacaciones en otros paraderos.
Adaptarse no es tan difícil, cuenta Oriana Montilla en un texto para la revista Clímax. Después de un tiempo olvidan la palabra chaqueta y se cubren del frío con una «casaca». Además consiguen con más facilidad la preciada Harina PAN en el Mercado #2 de Surquillo que en los de su patria natal.
Haití, el primer país de América Latina y el Caribe en alcanzar su independencia en tiempos de la colonia, padece hoy una crisis sistémica, una suerte de atolladero lo convierte en un “Estado fallido”, condición de la que sólo podrá salir con un apoyo más decidido y compromiso de la comunidad internacional
De acuerdo con la Encuesta dirigida a la Población Venezolana en Perú, el 49% de los migrantes de nuestro país eran jóvenes de entre 18 y 29 años, de ellos, un 48% tenía algún estudio superior pero no todos completos y una gran parte no había podido homologarlos | Por Andrés Cañizález y Miguel Ángel Valladares
Pese al riesgo de fuga hacia Perú de miembros de las bandas criminales que operan en Ecuador, el gobierno descartó cerrar la frontera alegando razones comerciales
