Testigos de la represión denunciaron por las redes sociales que una veintena de niños resultaron asfixiados por los gases lacrimógenos, así como adultos mayores.
Imágenes de niños atendidos por Protección Civil Táchira tras la contingencia fueron divulgadas por los aficionados en las redes sociales.
Durante el partido, los asistentes al partido obligaron a los militares abandonar el estadio ante gritos, pitos y consignas por la represión hecha por la Guardia Nacional durante tres semanas de manifestaciones contra Nicolás Maduro, que han dejado 21 muertos. Al grito “y va a caer, y va a caer, este Gobierno va a caer” los hinchas también plantaron cara a los uniformados a las afueras del estadio, considerado el templo del fútbol venezolano.
Cuando los aficionados habían abandonado el estadio luego de culminar el encuentro, los militares lanzaron las bombas que alcanzaron a la instalación deportiva.