Deportes

Liga Venezolana de Béisbol pide a EEUU dejar a peloteros jugar en Venezuela

El director de la LVBP explicó que de los 15 millones de dólares que tienen cada año para todos los equipos del circuito esta temporada rehusaron 9 millones de PDVSA y el Banco Nacional de Desarrollo de Venezuela

Publicidad
AFP / FEDERICO PARRA |EFE

Giuseppe Palmisano, presidente de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP), dijo que el campeonato que inicia este martes en su país está completamente desligado del patrocinio del gobierno de Nicolás Maduro y pidió a Estados Unidos que permita a sus peloteros jugar en Venezuela.

Palmisano, quien se encuentra en Estados Unidos para abogar por la liga, recordó que esta es una entidad privada y apolítica que necesita seguir subsistiendo porque de ella dependen 40.000 familias que viven del béisbol en Venezuela.

En ese sentido, Palmisano aclaró este martes en Miami que la medida decretada en agosto por el presidente Donald Trump contra bienes asociados al gobierno de Maduro no incluye a la LVBP, que realiza este año su edición 75.

«En ningún momento la LVBP ha sido sancionada, ni señalada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro estadounidense como parte de esa sanción», manifestó Palmisano.

Sin embargo las organizaciones del béisbol norteamericano pueden resultar sancionadas por colaborar con las organizaciones venezolanas.

Según el dirigente deportivo, las Grandes Ligas (MLB) de Estados Unidos de buena fe buscó una aclaración de la OFAC que los protegiera de cualquier problema y ante la falta de un pronunciamiento de esta agencia federal rompió parcialmente las relaciones con la LVBP por precaución.

Explicó que de 15 millones de dólares que tienen habitualmente cada año para todos los equipos del circuito rehusaron esta temporada los 9 millones de dólares que aportó en los últimos años la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) y el Banco Nacional de Desarrollo de Venezuela (Bandes).

Aclaró que ese patrocinio lo recibieron de empresas oficiales cuando estas no estaban sancionadas por Estados Unidos.

Palmisano, quien reemplazó en septiembre pasado a Juan José Ávila, quien renunció al cargo, indicó que este recorte hizo estragos en el campeonato 2019-2020, que fue reducido en tiempo y partidos, pero su intención es no dejarlo morir.

El torneo, que suele comenzar el 15 de octubre y terminar en enero, comienza hoy 5 de noviembre con una reducción de más de 40% de sus gastos, que se nota en menos partidos por equipo, que pasaron de 63 encuentros a 42.

Palmisano hizo un llamado a no dejar desaparecer la liga, que promueve a muchos jóvenes que sueñan con ser profesionales y lamentó que con el tiempo puede empezar a perder también patrocinio privado y las taquillas debido a estas sanciones.

Publicidad
Publicidad